Ya han pasado unos días desde que Brando se fue, para ser exactos 10 días. Cada dia que pasa me siento peor. Lo extraño a más no poder. En tan poco tiempo se volvió la persona más importante de mi vida y ahora ya no está aquí conmigo, me siento devastada. Lo que más me duele es lo que me prometió en la carta, me sigue cuidando. A todos lados donde voy están los hombres de negro, como los llamo yo. Además de Manuel, por supuesto.
Intenté averiguar el motivo de su...no sé ni como llamarlo...huida, escapada, dejarme sola. En verdad no sé, la cuestión es que no encontré ninguna respuesta. Le pregunté a mi padre si sabía algo y me dijo que no, a mi hermano y él tampoco sabe, hasta mandé a Ester para que hable con la chirusa, pero ni ella sabe. En verdad no sé dónde se metió siquiera, nunca más nos comunicamos.
Por las noches tengo la necesidad de escucharlo, pero no me animo a llamar y darme cuenta que en verdad él ya superó lo nuestro. Que me atienda el contestador, o peor, que ni eso ocurra. Durante estas 10 noches lloré en todas y durante el día en la oficina también; pero siempre a escondidas, nunca nadie se da cuenta de cómo me siento en verdad. No quiero preocupar a mi familia, así que simulo estar como siempre, como si nada hubiera pasado. Pero en verdad estoy rota por dentro, no pensé que lo nuestro se iba a terminar tan pronto y menos de esta manera. En realidad miento, siempre tuve este temor, pero como él estaba a mi lado no lo creía en lo más profundo de mi ser. Ahora que tengo delante de mi esta realidad, ya no sé qué hacer.
En este momento estoy camino a la empresa, manejando sola en mi auto. Tengo una reunión con Baltazar, en verdad tengo ganas de verlo y que me explique qué es lo que me quiso decir aquel día. Puedo ver por mi espejo retrovisor cómo Manuel me sigue, y luego, más atrás de él, a los hombres de Brando. En verdad sigo sin comprender por qué tanta seguridad. Yo estaba bien con Manuel, ya Benjamín no apareció más, todo el ambiente está más tranquilo. Lo único que me falta es mi cielo, mi Brando, pero sé que vamos a volver a vernos, no pienso bajar los brazos tan rápido. Espero que él no lo haga.
Llegué a mi destino sana y salva, hago la misma rutina de siempre y subo por el ascensor, estoy llegando tarde...
Veo como Ester camina de un lado a otro, se la nota bastante alterada. Cuando me ve parece tranquilizarse un poco, ya más tranquila se acerca a mi.
-Señorita Olivia, Baltazar ya está en su oficina -me dice apurada.
-Gracias Ester, podrías llevar unos cafés por favor -comento tranquila. Asiente y se va volando a preparar lo que le pedí. No comprendo por qué está así. Sin más charla mental me dirijo a mi oficina. Desde la puerta se puede ver la espalda de Baltazar, como ya dijimos antes tiene un buen cuerpo para su edad, pero saben que a mi me da miedo y además mi corazón tiene dueño.
-Buenos días Baltazar, disculpa la demora -extiendo mi mano, pero él en vez de agarrarla se la acerca a sus labios, y le da un pequeño beso. En verdad me siento bastante intimidada y siento que no se está respetando mi espacio personal; pero no le pienso mostrar estos pensamientos a él, así que me hago la indiferente, como puedo...
-Tranquila bella Olivia, a las princesas se las espera -bueno este señor en verdad está fantaseando. Le doy una pequeña sonrisa y comenzamos a hablar de unos contratos, en verdad pude llevar bastante bien la situación. Dedo admitir que estaba asustada por esta reunión y más estando a solas con él, pero pude hacerlo, y creo que lo hice muy bien.
Ya se habló sobre los temas del contrato y ahora pienso sacar fuerza, coraje, de no sé dónde, y hacerle mi pregunta.
-¿Baltazar te puedo hacer una pregunta? -pregunto firme, mirando a sus ojos directamente.
-Las que quieras -contesta mientras se acomoda en su silla.
-¿Por qué me dijiste eso aquel día? -listo, solté la bomba...

ESTÁS LEYENDO
BONITA
RomansaPrimer libro #SAGABONITA Olivia es una chica de 23 años, bastante insegura. Tras estar en una relación muy intensa, ese amor la defraudo. Ahora no confía en los hombres, hasta que aparece Brando, con su sonrisa. Brando es un hombre misterioso de 27...