En este momento me encuentro acurrucada en los brazos de Brando, disfrutando de su calor, de su cercanía, de su amor, de él. Es mi último tiempo, debo irme lejos y dejarlo a él, por su bien. Si me quedo con él las cosas se complicaran más, debo hacerlo por nuestra familia.
Me duele tener que hacerlo, pero siempre él me dijo que daría la vida por mi, pues en este momento estoy salvando su vida. Si me quedo con él las cosas terminarán mal.
Ahora lo estoy mirando. Está tan tranquilo, con su respiración calmada; su rostro se encuentra sereno, sin ningún ceño fruncido. Es hermoso mi hombre, pero debo irme, juntos no podremos ser felices. Tengo todo listo, tuve que pedirle ayuda a una de las chicas, ella está al tanto de la situación.
Sé que Brando cuando despierte y no me vea a su lado, se va a querer morir y va a estar muy enfadado. Pero deseo y anhelo que con el tiempo me perdone por lo que voy a hacer. Les voy a ser sincera, estoy muerta de miedo, pero lo hago por él y nuestros hijos.
Pensar que soñamos con tantas cosas, y de un día para el otro, las cosas se volvieron un infierno.
Antes de irme le dejo una carta y un dulce beso en la frente, si lo miro una vez más me quedaré con él y las cosas terminarán mal.
Con las lágrimas en mis ojos, salgo de la habitación y me dirijo a la sala. Ahí se encuentra mi pequeña maleta, Carlos me está esperando. Todo esto que estoy haciendo es por mi Bonito y mis pequeños Bonitos. Es por eso que Carlos y las chicas me están ayudando.
Debemos hacer las cosas lo más rápido posible, porque Brando se va a despertar dentro de poco. Apenas estoy con Carlos, no lo duda ni un segundo, me abre la puerta y nos dirigimos al auto. Una vez que estoy subida, Carlos enciende el auto y nos vamos. Si giro mi cabeza todos los hermosos recuerdos me atacarán y no podré continuar con mi decisión.
Así que decido no mirar hacia atrás y mirar hacia delante. Mis lágrimas no tardan en salir, pequeños sollozos salen de mi, pero me recuerdo que esto es por Brando y los niños. Acaricio mi panza y los recuerdos me vuelven a atacar.
-Señorita Olivia, ya hemos llegado -dice Carlos. A él no le pareció bien mi idea al principio, pero luego lo hice entrar en razón, y bueno aquí está ayudándome.
Cuando me bajo del auto, observo el avión privado que me mandó mi padre. Sí, solo él sabe por la situación que estoy pasando y es por eso que su avión está aquí.
-Gracias Carlos, por todo -le digo y le doy un fuerte abrazo, él me corresponde sin ninguna duda.
-Señorita Olivia, por favor tenga cuidado, cuide su vida y la de sus hijos. Yo me encargaré de Brando -me dice y cuando lo nombra a él y a mis hijos, comienzo a llorar nuevamente.
-Carlos, por favor, que no cometa ninguna locura y te ruego que hagas lo posible para que no sospeche de nada. Yo me encargué de romper el celular y no dejar ningún rastro. Te dejé el número de mi nuevo celular, por ahí me voy a comunicar contigo -le digo, ya un poco más calmada.
Dicho esto, comienzo a caminar hacia el avión, con las lágrimas saliendo y saliendo sin parar. La azafata me sonríe, pero en verdad no estoy de ánimos para corresponderle el saludo, prefiero no hacer y no comentar nada. Me siento en un sillón y comienzo a llorar y llorar, recordando todos nuestros momentos lindos y feos; nuestro primer beso, nuestra primera vez, cuando me dijo "te amo" y por sobre todo, cuando le conté que íbamos a ser padres.
Lo voy a extrañar tanto, tanto, que no se dan una idea. Me destroza el corazón esta situación, pero debo hacerlo.
Y de un momento a otro la azafata me pide que abroche mi cinturón, eso hago y siento como el avión despega. Si estuviera en otro momento me asustaría un poco, pero mi cabeza está en otro lugar y lo único que hago es llorar.
Y así, sin más, me estoy yendo lejos de mi Bonito, lejos de mi familia. Debo hacer esto, es lo correcto.
Se preguntarán a dónde me estoy yendo y por qué. Solo les puedo contar que me estoy yendo a Canadá, ahí mi padre tiene una casa donde íbamos de vacaciones. Pienso ir a vivir ahí, será difícil, pero cuando estoy por bajar los brazos, recuerdo que es por Brando y continúo con el plan.
Hola!
Espero que les guste este capitulo, no me maten... Quedan pocos capitulo.
Muchas gracias por leer y comentar!
Nos estamos leyendo, pronto...
Besos Mi
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BONITA
Roman d'amourPrimer libro #SAGABONITA Olivia es una chica de 23 años, bastante insegura. Tras estar en una relación muy intensa, ese amor la defraudo. Ahora no confía en los hombres, hasta que aparece Brando, con su sonrisa. Brando es un hombre misterioso de 27...