BONITA

Capítulo 4

Ahora estoy esperando el semáforo para poder avanzar, estoy a la vuelta del gimnasio. Entro al estacionamiento del gym, busco un lugar donde lo pueda estacionar. Apago el auto y voy al baúl a sacar el bolso. Subo el ascensor para poder llegar al piso donde entreno, estoy llegando tarde, seguro Nacho me debe estar esperando.

Cuando llego a mi destino voy directo al vestuario, me pongo unas calzas negras que me llegan hasta los tobillos, unas zapatillas Nike color rosa chicle y una remera negra mangas cortas. En el pelo me hice un rodete. Guardo en el bolso la ropa del día y lo acomodo en mi locker. Cuando salgo me lo encuentro a Nacho esperándome, está vestido con unos shorts negros, una remera blanca, zapatillas blancas y por supuesto su reloj.

-Tarde -me dice él mientras me da un beso.

-Si lo sé, perdón, había mucho tránsito en la calle -me justifico, sin mucho éxito.

-Andá a correr a la cinta 10 minutos -dice él, intentando hacerse el molesto, pero sé que me ama.

Asiento sin quejarme y me voy a la cinta. Cuando estoy por los 7 minutos veo que en la cinta de mi derecha se pone un chico a correr, me mira y sonríe, yo le devuelvo la sonrisa y sigo corriendo. Unas vez terminados los 10 minutos, Nacho me viene a buscar y me dice cuál es la rutina que me toca hacer hoy, piernas y abdominales.

TREMENDO.

Ya hace hora y media que estoy entrenando, por fin terminé con el entrenamiento. Para finalizar me voy al elíptico para hacer un poco más de cardio. Nacho se pone en la cinta que está ubicada al lado mío. Estuvimos haciendo cardio por más de 15 minutos, ya es tiempo de volver a casa.

-Te veo mañana -dice Nacho, me da un beso y un abrazo.

-Nos vemos, no te enojes -le digo yo abrazándolo toda transpirada.

-No me enojo, es que estoy con unos problemas con Maru -dice el medio triste.

-¿Querés que hablemos? -le digo yo. Maru es su novia.

-No, prefiero que vayas a casa, ya es tiempo, si querés mañana paso por la empresa y almorzamos juntos -dice él.

-Perfecto te espero Nachus -la rematamos con un último abrazo.

-Dale te veo ahí princesa -dice mientras me abraza y se va.

Me voy al vestuario para agarrar mi bolso, estoy agotada. Quiero ir a casa a darme una ducha bien relajante. Hoy fue un día muy productivo. Una vez que agarre mis pertenencias me acerco a la puerta y salgo del vestuario. Me voy al ascensor, llega, se abre la puerta y entro sola. Pulso -1 y me voy al estacionamiento. Llego a mi destino, abro el auto, dejo en el asiento de atrás el bolso, cierro la puerta y cuando me estoy por subir veo que el chico de la cinta está en el auto de al lado. Me está mirando y sonriendo nuevamente, hago lo mismo.

-Veo que nos volvemos a encontrar -dice el chico de la cinta.

-Eso parece -digo yo. Se acerca a mí.

-Marcos -dice el chico de la cinta.

-Olivia -respondo

-Que hermoso nombre Olivia -dice Marcos con una sonrisa.

-Gracias, Marcos no está nada mal -digo yo con una sonrisa.

-¿Venís siempre?

-Sí, todos los días, nunca te había visto por acá -comento mientras que me acomodo un poco el pelo, debe estar todo disparatado para todos lados.

-Vengo por la mañana, pero como me cambiaron el horario del trabajo tengo que venir a esta hora -responde él mientras que afirma su bolso en su hombro, que debo decir que es bastante grande.