CAPÍTULO 20: Third part of the plan

838 62 3
                                    


-
¡Sam! ¡Mi coche! ¿En serio no te has molestado en buscarlo?

-Tú no te molestaste en hacerlo.

-¡Habían secuestrado a Emma!

-¡Tú estabas en el infierno!

Ambos discutían después de que Dean se hubiese paseado por el garaje del búnker y no hubiese encontrado el Impala por ningún lado. Había aparecido en la biblioteca con el sonido de sus botas haciendo eco en toda la estancia y reclamando a su hermano el saber qué había hecho con su "nena".

-¡Y no se te ha ocurrido mirar en los desguaces!

-¡Se puede saber qué es lo que no entiendes de que ESTABAS EN EL INFIERNO!- Exclamó Sam con los brazos abiertos. Ambos se habían dedicado a recorrer el búnker mientras discutían y en ese momento Sam había decidido pararse y darse la vuelta para enfrentar a su hermano otra vez de vuelta en la biblioteca mientras los otros dos miraban un mapa extendido sobre una de las mesas.

-¡EH!- Gritó Liz llamándoles la atención.- De verdad, oíros hablar ahora mismo es como música para mis oídos, pero cuando os ponéis así me dan ganas de mandaros al foso a los dos de una patada.- Se quejó la chica.- Te ha costado una hora dormir a Dianna.- Le reclamó al mayor de los Winchester- Si seguís así al final la vais a despertar.- Terminó enseñándoles el monitor del bebé con el que se habían hecho.

-Perdón...- Se disculpó el castaño mientras Dean rodaba los ojos.

-Vamos, tenemos que pensar cómo lo hacemos.- Les ordenó la chica.

-¿En serio? Pensar qué. Sabemos dónde está, vamos a por ella.

-Es el mismo sitio en el que la encontré antes de traerla aquí. –Anunció Castiel.- Cuando me vio me llevó hasta una especie de almacén, parecía abandonado.

-¿Y por qué ha vuelto allí sabiendo que podíamos localizarla?- preguntó Sam situándose al lado de Liz mientras su hermano observaba el mapa en musca de algún lugar en el que hubiese unos almacenes abandonados.

-Si realmente está reclutando demonios, necesitará un espacio grande. Se siente segura de poder acabar con nosotros.- Respondió el rubio más para sí mismo que para los demás, cruzándose de brazos. Estaba tan cerca que se sorprendía de no habérsela encontrado esos últimos días interrogando demonios.

-¿Crees que sería capaz de matarte?- Insistió su hermano inseguro.

-¿Recuerdas que yo estuve a punto de hacer un trabajo de carpintería contigo?- Dijo refiriéndose al momento en el que había estado a punto de darle con el martillo en la cabeza siendo un demonio.- Pues ella ha tenido tiempo de sobra a acostumbrarse a la marca y a lo que ella conlleva.

-Ha estado embarazada y no le ha hecho nada a la niña cuando ha tenido la oportunidad.

-Sam, no sabemos cómo pudo influir el embarazo en ella.- Comentó Liz.

-Probablemente no fue capaz de deshacerse de la sangre humana por completo hasta tener a Dianna. Cuando la traje aquí parecía dispuesta a acabar con todos.

-Y sin embargo no acabó contigo nada más verte.- Recalcó Sam. Quería pensar que aún había alguna posibilidad de recuperar a Emma. Se sentía culpable de que ella aún siguiese por ahí aunque hubiese sido Castiel el que la hubiese ayudado a escapar. Pero tenía razón en que si él no hubiese estado tan obcecado en recuperar a su hermano, probablemente habrían podido hacer algo que no implicase dejarla suelta armando todo un ejército.

-Yo tampoco te maté nada más verte, Sam.- Afirmo Dean con seguridad.- Y sin embargo fue cuando era prácticamente humano cuando más peligroso era para ti.

BECOMING A HUNTER ⇘ SUPERNATURAL ✓ EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora