CAPÍTULO 27: It's a trap

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El rubio siempre había estado nervioso en los últimos tiempos, sobre todo cuando llegaba la noche y tenía que dormir. Sam y Liz habían insistido en coger una habitación para los tres todas y cada una de las veces que habían dormido en moteles para evitar lo que había ocurrido con Emma días atrás, pero Dean se había negado.

Era obvio que no iba a salir indemne del inframundo. Haber salido de allí no implicaba que las pesadillas le fuesen a abandonar y menos con todo lo que tenía encima. Se sorprendía soñando con las torturas en el infierno, generalmente era él el que las sufría por parte de Emma, pero se levantaba peor cuando la que recibía todo aquello era la pelirroja. Eso sí que era insufrible.

Y ahora se dedicaba a dar vueltas en la azotea, apretando las manos en puños y llevándoselas a la boca en numerosas ocasiones.

-Dean ¿puedes parar?- Le reclamó el castaño. La mirada de Liz se quedó parada en la cara del mayor, había estado observándole distraída mientras permanecía sentada con la espalda apoyada en una de las escaleras que llevaban hacia la azotea, pensando. Al fin y al cabo no había mucho más que hacer allí.

-Lo siento- Se disculpó Dean acercándose a la posición de su hermano y observando el callejón frente a ellos.- Hay algo que no me gusta.- Había amanecido con la misma angustia de siempre, pero normalmente a lo largo del día parecía ir relajándose para recargarlo otra vez por la noche. Sin embargo aquel día no había hecho nada más que empeorar y aumentar cada minuto que pasaba.- ¿Has visto algo?

-Nada... Gente yendo a trabajar, a desayunar... Metatrón no tardará mucho en aparecer.

-De hecho, ahí le tenéis.- Comentó Liz acercándose a ellos y señalando con la cabeza la posición por la que aparecía el escriba de Dios. Sam se volvió a colocar los prismáticos aunque realmente no les hacían falta, para observar al viejo ex-ángel acompañado por los dos demonios de siempre. Su mirada viró unos metros más para atrás en busca de la persona que Emma mandaba a diario.

-Esto es raro...- comentó al no localizar a la chica que había estado siguiéndoles en los últimos días.

-¿El qué?- Preguntó al momento Dean, nervioso, quitándole los prismáticos a su hermano.

-No veo a nadie que coincida con la gente de Emma. Nadie con cámara fotográfica, nada...- Dean suspiró al darse cuenta de que su hermano tenía razón. Aquello encendió una chispa en él. Parte de su impaciencia se debía a la monotonía que les había cubierto aquellos días y eso suponía un gran cambio.

Aguanto el aire y los prismáticos estuvieron a punto de caerse al suelo cuando vio a Emma unos pasos atrás, escondida en la esquina de un callejón junto a un grupo mayor de gente. A penas tardo unas milésimas de segundo en comenzar a andar tras ellos.

Logró coger los prismáticos en el aire, devolviéndoselos a Sam con un golpe en el hombro, señalando al lugar por el que Emma bajaba la calle con su grupo detrás de Metatrón, bastante visible. La gente comenzaba a apartarse por el camino mientras aquel grupo pasaba. No es que sus vestimentas llamasen la atención, pero tenían algo que los hacía ver peligrosos ante el instinto de los humanos.

-Joder... Se va a liar.- Comentó Liz mientras Dean salía corriendo en dirección a las escaleras de incendios, bajando los escalones de tres en tres. Incluso pudo verle bajar un tramo saltando por la barandilla. Los otros dos se quedaron algo rezagados recogiendo las pocas cosas que tenían allí arriba.

Cuando llegaron a la altura de Dean, este estaba sacando lo que creían poder necesitar contra los demonios, lanzándoselos a su hermano y Liz al verles aparecer.

-¿Qué se supone que vamos a hacer?- Preguntó Liz preocupada corriendo detrás de los hermanos.- Es peligroso, no tenemos ningún plan y vamos a meternos en medio de una pelea de bandas callejeras.

BECOMING A HUNTER ⇘ SUPERNATURAL ✓ EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora