—Hogar, dulce hogar— soltó Dean alegremente cuando entraron por las puertas del búnker, dejando las cosas encima de la mesa con el mapa y yendo en dirección a la cocina a por unas cervezas.
Para ellos, sobre todo para el rubio, tener un lugar al que volver después de las cacerías,significaba mucho. Y más después de haber pasado prácticamente toda su vida en la carretera, alternando los sueños entre los asientos del Impala y las camas de los moteles de mala muerte en los que dormían durante los casos. A Sam por el contrario, le había costado más hacerse a la idea, pero al final había optado por imitar a su hermano y hacer de aquel refugio su propio hogar.
—Deberíamos hablar con Crowley, es raro que a estas alturas no sepamos nada de él— dejó caer Sam yendo a la biblioteca.
—Sabes que le gusta hacerse esperar- contestó Dean, dejando las cervezas encima de la mesa de la biblioteca en la que se había sentado su hermano-.¿No te unes?—preguntó a Emma, viendo que esta se dirigía al pasillo quedaba al lado de la entrada.
—Sí, pero primero voy a dejar esto en la habitación— Dean asintió en respuesta y se puso a sacar el teléfono de su bolsillo para llamar a Crowley.
Para cuando la chica había abandonado la estancia, el móvil ya daba señal. Al sexto toque, justo cuando iba a colgar, el demonio descolgó. Dean puso los ojos en blanco, exasperado con las estupideces del Rey del Infierno.
—¿Ya me echas de menos? Sólo han pasado un par de días— comentó con mofa.
—Corta el rollo Crowley, ¿tienes los huesos?—preguntó Dean directamente.
—Nope.
—¿Y a qué esperas?
—Verás,he estado pensando...
—Crowley, no lo hagas, tienes el cerebro conectado con el culo.
—No creo que pienses lo mismo después de oírme— Dean puso el altavoz sabiendo que una de las artimañas del demonio venía en camino—. Digamos, ¿qué gano yo si la chica se quita la marca? Aparte de un hueso de mi oído menos y una dermatitis.
—Ve al grano- insistió el menor de los hermanos—. No tenemos tiempo para tu parafernalia barata— justo en ese momento aparecía Emma, sentándose al lado de Dean, mirando a ambos hermanos confusa.
—Os daré el hueso que necesitais para encontrar a Rowena.
—Vale, ¿y...?— insistió Dean dando un ligero golpe en la mesa.
—Cuando matéis a mi querido padre.
—¿Tú padre?— inquirió confuso.
Miró dubitativo a su hermano mientras este le observaba con los ojos como platos, él parecía haber entendido a la perfección lo que Crowley pedía. Giró su cabeza hacia Emma, y se la encontró blanca como la cal. Fue en ese momento cuando algo le golpeó, y una bombilla se encendió en su cabeza.
— ¡Y una mierda, Crowley!
—Es un trato justo— se defendió al otro lado de la línea con su acento británico. Casi podían ver la sonrisa socarrona que estaría poniendo el demonio en ese momento.
—Crowley...—comenzó Sam en un intento de amenazarlo.
—Lo sé, yo seré el siguiente, bla bla bla... Pensad un poco en mis garantías. Si Pippi Langstrum se quita la marca nos quedamos sin formas de matar a Lucifer, y aunque siga encerrado en la jaula, va a haber tentativas para liberarlo durante toda la eternidad. Y, más o menos, ese es el tiempo que quiero que dure mi supremacía.
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BECOMING A HUNTER ⇘ SUPERNATURAL ✓ EDITANDO
Fanfiction❝Saving people, hunting things. The family business.❞ ( temporada diez en adelante ) cover by winchesterxflares