Los cuatro jóvenes se hallaban dentro de la camioneta que la madre de la menor les había prestado, Keith era el único con licencia en ese tiempo, ya que Lance había reprobado su examen de conducir, Hunk le tenía un grandísimo temor a poner sus manos sobre el volante y Pidge seguía siendo la menor del grupo. Sus miradas se posaron sobre el pequeño edificio que quedaba en la carretera hacia San Diego por un pequeño camino no pavimentado, les parecía algo un tanto extraño y en cierto aspecto terrorífico, era un lugar totalmente abandonado y no había pasado ni siquiera un día desde que el mayor de ellos había desaparecido de la nada, todos se nombraban como buenos detectives. Lance miró al azabache con cierta preocupación, llevando su mano con precaución de que sus demás amigos lo viese, tomando con suavidad la mano pálida del joven, dejando una suave caricia sobre el dorso de la misma justamente cuando una pequeña sonrisa se dibujó en el rostro del moreno para brindarle seguridad a Keith, siempre lograba hacerlo aunque no se lo dijera.
– Pidge te quedas aquí, tienes cuatro años de diferencia y Hunk también se quedará aquí porque le da asco o temor la sangre y no quisiera que vomite, como siempre lo hace.– Indicó el azabache, mirando a ambos jóvenes mencionados con una ceja alzada, el moreno había bajado del vehículo para dirigirse hacia la cajuela de la misma para sacar el arma que Shiro siempre le guardaba cuando van al campo juntos por el trabajo del mayor, escuchándose después de unos segundos un leve estruendo cuando Lance estaba a punto de cerrar ese parte del vehículo, poniendo a Keith más que preocupado y desesperado.– Bueno, ya saben, tengan esto encendido por si acaso y ni se les ocurra salir. Hunk, te necesito, ven al frente y prepárate.– Habló con bastante rapidez para después bajar, dejando a ambos jóvenes con las palabras en la boca.– ¡Lance, vamos!– Ordenó, teniendo la atención del moreno cuando comenzó a correr, seguido de éste en dirección al lugar que tanto miedo e incomodidad le hacía sentir.
Se detuvieron a cada costado de la gran puerta de aquel tipo almacén, manteniendo sus armas pegadas a sus pechos con ambas manos en el mango de la misma, teniendo el dedo índice en el gatillo, listo para apretarlo ante situaciones o algo sorpresivo. Lance miró al azabache, comenzando a hacerle señas que el mayor le había enseñado meses atrás, le indicaba que subiese por las escaleras que se encontraban por detrás de él para meterse por la ventana, pero al parecer no le había entendido para nada en esos momentos, por lo que el moreno puso su típica cara de póker al momento en que Keith se giró, señalándole que subiría, escuchándose un suspiro por parte de Lance.
Keith subió con sigilo por aquellas escaleras en mal estado, poniendo ambas manos sobre el borde del ventanal del cual entraría mientras que el moreno entraría para distraer, pero había algo que causaba un presentimiento malo, no escuchaba ningún tipo de voces o ruidos que fueran a entender que había alguien adentro, aunque eso no quitaba el hecho de que debía entrar. Abrió la puerta de aluminio con algo de suciedad, frunciendo el entrecejo al no poder ver nada, sacando su linterna del bolsillo de su chaleco antibalas que llevaba puesto, encendiendo para iluminar su alrededor.
– Keith.– Habló el moreno al comprobar que no había nadie en el área, pareciéndole más que extraño aquello, pasaba la luz de la linterna a cada esquina que volteaba a ver, elevando está hacia donde el joven se encontraba.– Keith, baja, fue algo tonto venir acá.
– ¡Lance, cuidado!– Gritó justamente al divisar un silueta por detrás del joven, y éste hizo caso ante su aviso, girándose para detener el puño de dicho extraño con su propi mano, ejerciendo un poco de fuerza para guiar este por detrás de su espalda, golpeando la parte trasera de sus rodillas para que cayera al suelo de inmediato, poniéndose encima de su cuerpo.– ¿Estás bien?
– Sí, yo sí...– Hizo una pausa, guiando su vista hacia el azabache quien había bajado mediante movimientos y saltos.– ¿Viste cómo lo detuve? Vaya, soy genial, es bueno que te guste, así podré defenderte de todo, hasta de las agujas.
– ¡No me dan miedo esas cosas!– Se cruzó de brazos, desviando levemente su vista hacia otro dirección, pero pudo reaccionar y recordar al saber porqué se encontraban ahí y a quién habían detenido. Suspiró, inclinándose un poco para sacar su arma blanca de la bota, poniéndose de cuclillas después de sujetarlo del mano con el filo hacia enfrente, tomando la cabello del desconocido para alzar su rostro.– ¿Quién eres? ¿¡Dónde está Shiro!? ¡Responde!
– Keith...– Murmuró el moreno, desviando su vista hacia su alrededor al escuchar más pasos, sintiéndose rodeado por cinco personas.– Keith.
– ¿Qué?– Mantenía el filo de arma en la garganta del tipo, siendo capaz de ocasionarle un muerte lenta y dolorosa donde se ahogaría con su propia sangre, pero algo causó que desviara la mirada hacia su alrededor, un leve jadeo de dolor que reconocía a la perfección, Shiro y Keith asistían a clases de artes marciales y defensa personal, conocía cada quejido del mayor.– ¿Dónde está? Reconozco eso, ¿dónde está Shiro?
– Sh, no grites, le duele.– Y el cuerpo inconsciente del mayor cayó al suelo, siendo un golpe en seco, siendo pateado por el mismo hombre.– No te vuelvas a acercar o meterte con nuestro jefe, muchacho, vamos a atacar a quienes más quieres, ¿escuchaste bien?
– Ustedes no son nadie para decirme qué hacer.– Apretó el mango del arma, cambiando la dirección de su filo hacia atrás, apretando sus dientes con fuerzas.
– No juegues con nosotros, mocoso.– Lance aprovechó para acercar al mayor hacia ambos, poniéndolo boca arriba antes de hacerlo para no lastimarlo más de lo normal, frunciendo levemente su ceño al notar un corte horizontal en la mitad del puente de su nariz que acaba en cada pómulo.– Es advertencia o seguirá el bufón del grupo.
– No le harás nada a Lance.– Siguieron, algo que para Lance fue un insulto hacia su persona, llevándose una mano al pecho con indignación.
No hubo otro respuesta por parte de los desconocidos, aunque en un cierto punto se pudieron observar cinco siluetas de mujeres, algo que a Lance le pareció totalmente extraño, aunque guardó silencio, no debía preguntar absolutamente nada sobre esa personas, únicamente están ahí por Shiro.
– Me gusta su prótesis del brazo.– Se escuchó una suave voz y tanto añiñada al fondo del edificio, para después escucharse un pequeño quejido de la misma persona que había hablado, al parecer la habían golpeado para ir guardase silencio.
Lance y Keith optaron por salir con algo de rapidez, teniendo a Shiro en el medio con cada uno de sus brazos rodeando sus hombros, sujetando al mayor de la cintura para avanzar con más rapidez hacia el vehículo. Y de inmediato se abrió la puerta trasera, dejando mostrar a la pequeña Pidge para que sostuviera a Shiro en la parte trasera mientras que Hunk hacía más espacio, los asientos de bajaban y era lo mejor en esos momentos, Keith, por su parte, se subió a la parte del copiloto junto con Lance a su lado, arrancando el vehículo para alejarse de ahí lo más antes posible.
– Hunk, un algodón con algo de alcohol, por favor.– Abrió su mano frente al joven, quien había traído un botiquín de primeros auxilios por si se daba la ocasión, sacando de ahí lo que la joven le había dicho para dárselo.– Le quedará una fea cicatriz.
– Eso no arruina su belleza.– Habló Lance, guiando su vista hacia atrás.– ¿Qué? Hay que aumentar la autoestima entre todos, no me mires así.
– Te escuchaste tan gay, Lance.– Le respondió la mayor, rodando sus ojos para comenzar a limpiar las pequeñas heridas que el mayor tenía en su rostro, teniendo bastante cuidado al ver que éste fruncía el ceño al sentir el ardor que le daba el alcohol al tocar sus cortadas.
Hola :D
¿Les está gustando esta pizca de acción y tensión que le he agregado? Si es así, por favor dejen su opinión para agregar más en próximos capítulos, pero con distintas situaciones, me gusta escribir cosas de este estilo, le agrega sabor a la historia como la salsa a los sabrosos taquitos de la esquina :'v
Eh, otra cosa que quería comentarles es que estaba pensando que si estaría bien hacer una especie de respondiendo preguntas, ya saben, un pequeño paréntesis en la historia como si fuese un especial por las visitas y apoyo que recibe la historia uwur, preguntas a los personajes y a mí, claro, si me quieren y les importo :'v Creo que ya saben cómo, poner "para x personaje" antes de la pregunta. Es una opinión, y si les gusta dejen sus preguntas en los comentarios para hacerlo dentro de unos días, tal vez el sábado o domingo, dependiendo :3
Espero que les haya gustado el capítulo ❤ Nos vemos en el próximo, bye, babies 7u7 ❤❤
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First time kissing a guy. ↪klance
Fanfiction- ¿En verdad es la primera vez que besas a un chico?- Preguntó el moreno, mirando al joven con el ceño fruncido, quien asintió tímidamente. - Me gustó que fueras tú el primero.- Confesó, causando que las mejillas del moreno tomaran un color rojizo...