72. Realidad.

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Cuatro paladines que habían quedado después de la larga lucha contra Zarkon se encontraban acompañados de la princesa Allura, del fiel Coran,  junto con Lotor, los jóvenes presentes se hallaba en un extraño lugar en uno de lo planetas que habían liberado del terrible imperio galra del que tanto temían, y todos se tendrán la pregunta en mente, ¿qué hacen ahí? Se rumora que una cueva llamada Wasser des Lebens se encontraba ahí, aquellas aguas eran mágicas, parecían sacadas de un cuento de hadas. Todos se encontraban ahí para una cosa y era la última de sus esperanzas, ya que la magia alteana y su inteligencia habían fracasado, se trataba del paladín del león rojo, Keith, había perdido la vida cuando se enfrentó cuerpo a cuerpo con el gran y anterior emperador de aquel imperio, siendo un sacrificio que ninguno del equipo se pudo imaginar; Lance fue el más afectado en esta terrible noticia junto con Shiro, fue devastador para el moreno presenciar la muerte de uno de sus fieles compañeros y que no pudo hacer nada para evitarlo, observó cómo la espada del enemigo atravesaba su abdomen sin ninguna compasión y después su cuerpo caer, imágenes que jamás se borrarán de su mente, culpa que jamás se irá de su pecho.

— Lotor, ¿estás seguro de que esto funciona?— Preguntó el moreno, llevando su mirada hacia el joven mitad alteano y mitad galra, en su mirada se notaba la gran tristeza que sentía en su pecho.— Llevamos una semana con esto y esta cosa es nuestra última esperanza en todo el universo.

— Lance, por favor, conozco cada rincón del universo como la palma de mi mano.— Se cruzó de brazos, acercándose a una roca que se encontraba cerca del gran lago que desprendía una especie de brillos que se hacían notar a causa de la luz solar que entraba por una grieta.— Anda, no pierdas tiempo.

— Confío en Lotor.— Habló Shiro, quien no dejaba de mirar al moreno, él tenía al azabache entre sus brazos con prendas ligeras, se sentía mal de ser culpable de las varias cicatrices en su cuerpo.— Hazlo, Lance.

— Por favor, por favor, por favor...— Murmuraban Pidge y Hunk, apegados hacia uno del otro mientras cruzaban sus dedos, rezando en su mente para que esto diera frutos.

— Adelante, Lance.— Sonrió levemente Allura, llevando sus manos hacia enfrente, desvió su vista hacia el hombre de cabellos anaranjados, quien solamente la rodeó con sus brazos.

Lance respiró profundamente, esa luz de esperanza en él no se apagaba por nada en el mundo, seguía manteniendo su mente con positividad, realmente le dolía demasiado no escuchar la voz del azabache, ya sea regañándolo, quejándose de lo que haga o hasta riendo con él, simplemente extrañaba a Keith Kogane, el lobo solitario del equipo de Voltron. Sostuvo el cuerpo del joven entre sus brazos con firmeza, apegándolo a su cuerpo de igual manera mientras sus piernas se movían en dirección al lago, cerró sus ojos al sentir el agua en sus pies, avanzando y avanzando hasta que el agua llegó a su cintura, momento en que abrió sus ojos, y volvió a tomar aire suficiente para poner su vista sobre el joven, admirando esos finos rasgos faciales que tanto le gustaba apreciar en silencio, nadie sabía sobre una cosa de él y jamás lo revelaría.

— Por favor...— Murmuró, comenzó a bajar el cuerpo del azabache, dejando que el agua lo cubrieran como un manto hasta sumergirlo, y entonces ocurrió, un brillo comienzo a resplandecer en el gran lago, pequeñas burbujas se elevaban al aire, dejando a los demás con la boca abierta y sin palabra alguna, Lance únicamente se dedicaba a mirar al joven, esperando alguna reacción de éste, y después de un tiempo de espera una sonrisa apareció en el rostro del moreno.

El azabache se alzó de forma repentina, dejando que su torso y cabeza salieran del agua para rodear al moreno del cuello, tomando una gran bocanada de aire con rapidez y ocultando su rostro en el cuello del joven, apegándose a su anatomía al sentir que se ahogaba, aquella escena dejó completamente mutados a los demás, nadie se pudo imaginar que unas simples aguas podrían revivir a una persona, simplemente estaban maravillados ante la increíble magia de aquel planeta.

First time kissing a guy. ↪klanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora