Rigor Mortis//La Fiesta De Los Muertos//

Capítulo 10

Aquella tarde cuando me desmonté del tren, noté que la rubia de los lentes también hizo su parada en el mismo lugar que yo, solo que mi destino era ir al muelle, pero el de ella era para la ciudad y no tengo idea de en donde pueda ser, la curiosidad me invade, quiero seguirla...pero no quiero parecer un acosador en serie, ideas estúpidas.

Disimuladamente traté de seguirla en contra de mi voluntad y evadía el hecho que que ella lo notara, pero para mi mala suerte la perdí en plena calle cuando salimos de la estación por la cantidad de personas que allí habían caminando de un lado a otro, entonces decidí ir al muelle como lo tenia pensado para despejar mi mente un poco y... Quizá hacer mis planes de vida para cuando yo termine la universidad.

Me quedé allí parado en la calle unos momentos como si no tuviera algún rumbo a donde ir, realmente yo quería seguirla, quería saber a donde iba y... Quizá encontrar la posibilidad de hablar con ella y conocerla mas a fondo, pero por lo visto no lo hará hasta que sepa de mi existencia.

***

Kath...

Estando en pleno tren me sentía observada, como si alguien me conociera o me estuviera siguiendo. Ese chico de una creciente barba en el rostro y mechas rizadas era quien no apartaba sus oscuros ojos de mí, me setí un poco asustada y traté de distraerme mientras miraba por la ventana del vagón hasta que llegara mi parada. No entiendo como estoy viva con la estresante vida que llevo, sólo yo lo entiendo y... Debo mantener en secreto mis amistades con los Hegel, hay veces en que cuando estas siendo beneficiado o beneficiada con algo, lo mejor es callar para evitar problemas.

El tren se detuvo y casualmente había llegado a mi parada, me desmonto y me doy cuenta de que también varias personas lo hicieron incluyendo ese chico de mechas rizadas.

De inmediato trato de caminar lo mas rápido que puedo para llegar temprano al laboratorio y tratar con el virus nuevamente. Noto que hay varias personas el día de hoy, lo mejor es que tome un atajo.

***

EDWIN...

Estando sentado sólo en aquel lugar recordé que casi estamos en el mes de diciembre y pronto estaremos en navidad, es increíble la manera en que pasan los años y ni cuenta nos damos de ello.
Ya casi para el 2044 y yo aun no se que hacer con mi vida...
No tengo avances de nada, ni siquiera he conocido a una buena chica para presentarsela a mis padres.

Mirando el vaivén de las olas me doy cuenta de lo triste y aburrida que puede a llegar a ser la vida en estos tiempos. Los amigos no existen, a pesar de que no soy para nada romántico me doy cuenta también de que cada vez el amor va desapareciendo con el pasar del tiempo, ya todo es controlado a base de maquinas o robots con inteligencia artificial, y tampoco es fácil conseguir algún empleo de medio tiempo para distraer la mente mientras ganas un poco de dinero honradamente.

***

Katherine iba caminando a toda prisa hacia el laboratorio y como ella tenia acceso al código podía entrar y salir las veces que quisiera.

Al entrar en el frío lugar, se puso su bata blanca y su mascarilla, para luego recoger algunas mechas de cabello que sobresalían de su despeinado chongo.

Tomó el microscopio y mientras analizaba con cuidado aquel virus ella notaba que tenía el mismo comportamiento anterior, intentó inyectarlo a una rata de laboratorio que estuviera recientemente muerta para esperar a que surgiera algún efecto durante la Rigor Mortis, entonces dejó en una vitrina al animal y fue a dar un paseo por unas horas hasta que se cumpla el plazo. Después de cerrar el laboratorio sintió deseos de comer algo y fue a una de las cafeterías del lugar.
Estando allí pidió una malteada de chocolate y mientras la disfrutaba tomó el tiempo y acordó consigo misma regresar dentro de tres horas... Estando allí sentada pensó en aquel extraño del tren, para ella fue un poco llamativa su rara apariencia <<¿Quién sería? ¿De donde es?>> eran el tipo de preguntas que rondaban su mente en ese momento. La rubia pagó lo que había consumido y salió a dar un paseo por un parque cercano del lugar para entretenerse en algo.

La brisa movía un poco los flequillos de su rubio cabello y por un momento no pudo evitar contemplar su ambiente, porque hacía tiempo que no veía niños jugar o reírse y en aquel parque habían varios de ellos, sería una fatalidad que esas vidas inocentes se perdieran en una guerra sólo por ganar poder, un poder que sacrificaría miles de vidas...

Katherine luego de caminar un rato y tomar aire libre recordó que ya era la hora de regresar, entonces caminando a toda prisa llegó al laboratorio, insertó rápidamente el código de 5 dígitos y se preparó nuevamente para continuar con su experimento.

Durante unos momentos la rata no presentaba ninguna anormalidad, Kath sólo suspiró con decepción, pero en ese momento la rata empezó a reaccionar lentamente y ella lo notó cuando vio que sus patas se estaban moviendo un poco, entonces ella para asegurarse tocó con un bolígrafo aquella rata y notó que su cuerpo no estaba rígido.

Fue cuestión de minutos para que el animal empezara a actuar en forma de vida, y en ese momento Katherine supo que lo había logrado, que era una genio cuando la rata que estaba muerta ahora caminada y actuaba con mas fuerza, ella en ese momento sonrió victoriosa de si misma...

***

Dos años después...

Marcus Hegel era el actual líder del continente europeo   y muchos avances habían ocurrido en apenas año y medio de su victoria.

Todo se veía diferente y el ambiente había cambiado por completo, pero no por mucho tiempo... Hegel tras verse vinculado en asuntos oscuros en el gobierno, provocó que otros lideres continentales le plantearan una posible guerra. A pesar de sólo haber cinco lideres las cosas no eran como parecían y la codicia se estaba apoderando de cada uno ellos.

El líder de Oceanía se podía considerar como el mas pacífico dentro de los cinco y tambien el mas listo. El no apoyará la invasión a Europa y preferirá usar a su gran numero de militares en asuntos que realmente valgan la pena.