Capítulo 22 //parte II//

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Cada día que Ed pasaba sin saber nada de Kath era una pesadilla, no sólo por las criaturas, sino también por el hecho de no tenerla a su lado y añadiendo el hecho de que su grupo élite estaban creando problemas entre ellos mismos y mas aún con el reciente conflicto de Andrew y Drake, ya Ed sentía que estaba al borde de la locura y hasta llegaba a pensar que cuidaba niños y no soldados.

Luego de un par de horas por aquel largo camino al fin encontraron la ciudad, y todo estaba peor de lo que imaginaban, porque los grandes edificios aparentaban tener décadas de abandono y varios autos abandonados por doquier, las calles desiertas y el temor al asecho en cualquier rincón del devastado lugar con aire de tristeza y cuerpos en descomposición emitiendo desagradables hedores de muerte.

-Ed amigo... Y pensar que este fue nuestro hogar hace seis meses- dijo Tadashi con un nudo en la garganta al contemplar la destruida ciudad.

-Lo sé, entiendo perfectamente como te sientes: nostálgico, triste, vacío, Pero no debemos dejarnos llevar de nuestras emociones, fuimos entrenados para esto y a diferencia de hace seis meses atrás ya no somos los mismos novatos- respondió Edwin con un tono de voz que su amigo asiático nunca había visto, porque para Tadashi el antiguo Ed fue despedazado por los muertos dejando a uno nuevo y con un estilo de pensar diferente y con mas madurez.

Alessia y Beatríz iban caminando a la par queriéndose decir tantas cosas, pero la falta de confianza entre ellas por conflictos del pasado hacía que Alessia nunca pudiera sacar ese remordimiento de su corazón en contra de la pelirroja, y peor se sentían aquellas cuatro personas al pisar nuevamente el lugar donde crecieron el cual hoy día ya no existe y que solo quedan recuerdos vanos, recuerdos de un mundo que nunca más volverá a ser el mismo.

Debbie notó las extrañas caras que tenían aquellas cuatro personas en especial la chica de pelo muy corto, Alessia, sus rostros llenos de nostalgia y melancolía reflejaban la más perturbadora de las tristezas.

-¿Notaste las caras de ellos?- preguntó Debbie a Belak quien iba al lado de ella.

-Desde que entramos a la ciudad sus gestos cambiaron rotundamente, y eso quiere decir que estamos en su antiguo hogar- respondió Belak contemplando todo bajo alerta de cualquier situación anormal.

-Esta ciudad se nota a leguas que era hermosa- susurró Lorena al lado de Zayn.

-Así parece...- respondió.

Andrey miraba a todos lados asombrada de la condición del lugar, hubo algo que llamó su atención y fue el hecho de observar como especies de árboles salían de los edificios.

-¡Oye Ed!- dijo Andrey captando su atención.

-¿Por qué de algunos edificios salen árboles y arbustos?- preguntó la ojiazul frunciendo su ceño y atrayendo la atención de los demás.

-Ah, eso... Eso queridos compañeros fueron obras de Hegel. Debido a que en este tiempo "la comida real no existe" Hegel quiso experimentar con plantar pequeños árboles frutales y vegetales en los edificios para facilitar no sé que objetivo, pero de una u otra forma nos favorecía a pesar de que cada terreno baldío que hubiera Hegel lo comprara para construir algo, cosa que le dio mucha fama, riqueza y envidia con los demás líderes.

-Impresionante hijo de puta...- expresó Zayn.

-¿Eso fue idea de los americanos verdad?- preguntó Belak mirando las dañadas estructuras.

-El gobierno americano tiempo atrás fue una gran potencia, pero con los años fue perdiendo su grandeza con una terrible pandemia que mató a millones y cuando los asiáticos decidieron iniciar la pasada guerra con bombas radioactivas y su avanzada tecnología especial.

-No soporto el hedor de este maldito lugar- se quejó Drake tapándose la nariz con el brazo.

-Maldición- susurró Beatríz con molestia.

-Ten cuidado imbécil, eso puede ser algún muerto o tu mismo- le dijo Alessia.

Los demás rieron por lo bajo ante el comentario de la pelicorto.

-Realmente puede ser cierto, quizá halla uno que otro muerto cerca así que agudicen  bien sus sentidos- añadió Tad.

-Yo solo veo cadáveres- replicó Drake nuevamente.

-Estúpido- murmuró Andrew para si mismo con desagrado.

***

Kath con cada día que pasaba en aquel lugar, menores eran sus esperanzas de volver a ver a Edwin y ahora más difícil porque si ella intentaba escapar podría ser atrapada por los guardias o servirle de bocadillo a los monstruos del exterior y probablemente Hegel no le tendría mucha misericordia.

La rubia escucha que alguien toca la puerta y da permiso a entrar.

-Hola Kath... Saludó Steve mientras entraba a la habitación y cerraba la puerta trás de sí.

-Hola Stev... ¿Sucedió algo?- preguntó frunciendo el ceño.

-No, para nada... Kath, escuché decir de la boca de los guardias sobre una especie de nave japonesa aterrizada en el bosque y al parecer eran varias personas.

De inmediato el corazón de la rubia dio un vuelco e inconscientemente una llama de esperanza se encendió en su pecho.

-¿Cómo dices? ¿Una nave japonesa? ¿Dónde?- expresó abriendo sus azules ojos de asombro.

-Shhh. Calla, si mi padre sabe que te estoy contando esto no se que haria.

-Entiendo... Pero a pesar de todo almenos aquí te tengo a ti aunque me sienta de una u otra manera "Secuestrada"- suspiró con desgano.

-Hay que ser pacientes Kath y aunque no me gusta tenerte lejos... Prefiero ante todo tu felicidad, ya que para mi eres como una hermana.

***

Mientras tanto Hegel trata de utilizar miles de formas para descubrir el origen de aquella nave, le preocupa el hecho de sentirse invadido y la idea de que hallan sido sorprendidos por los monstruos no lo llenaba del todo.
De inmediato salió aturdido de su despacho y se dirigió hacia sus hombres.

-Buenas tardes caballeros...- saludó con un tono malicioso a lo que los demás respondieron.

-¿Sucedió algo jefe?- preguntó uno de los que allí estaban.

-No exactamente... Sólo vine a pedirles que refuercen la seguridad y que una unidad de inspección recorra la ciudad.

-Señor disculpe, pero usted sabe lo peligrosa que es la ciudad, sería algo suicida adentrarse- interrumpió.

-Guarda silencio y obedece, les di una orden inmediata- replicó.

Rigor Mortis//La Fiesta De Los Muertos//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora