Rigor Mortis//La Fiesta De Los Muertos//

Capítulo 27 //Parte II//

Mientras tanto en la base militar australiana, el Líder se encontraba mas tranquilo y su preocupación desapareció cuando recibió un mensaje de Beatríz confirmando que el equipo ya estaba poniendo en marcha la misión acordada y que hasta el momento todos se hallaban sanos y salvos.

-Comandante, me alegra mucho que todo esté bien- dijo la mayor Warren con una sonrisa.

-Aun es muy pronto para cantar victoria, Hegel es muy astuto y sabe jugar sucio, pero eso no quiere decir que no confíe en mis fuertes soldados.

-¿No le informaron algo más?- preguntó la mujer vestida con traje militar de camuflaje.

-No, la pelirroja alemana solo me dijo que hasta ahora todos estaban bien.

La mayor asintió y se retiró del lugar para darle las buenas nuevas a la hermanita de Alessia quien hace días estaba muy distante y algo deprimida debido a que no había forma de como animarla diciéndole que todo estaba bajo control y que tarde o temprano tendríamos noticias sobre su hermana.

La mujer supuso que estaba en el área de juegos quizá en algún columpio meciéndose solitariamente y al aproximarse al lugar se encontró con Liam en uno de los pasillos del edificio.

-Saludos Mayor Warren- dijo el chico haciendo el saludo militar.

-Saludos cadete Liam.

-Todos en la base rumorean cosas de los soldados que enviaron a la misión y casualmente vine a preguntarle sobre alguna información que se pueda saber del equipo.

-¿Qué estan rumoreando?- preguntó la mujer frunciendo el ceño.

-Pues... Hay quienes dicen que todos murieron y no tienen señales de sus cuerpos, también que fueron tragados por los muertos.

-Puedes decirles a los demás que nuestro equipo esta bien y que  aun todos permanecen con vida- le dijo sonriendo, lo cual el muchacho de unos 20 años notó extrañado porque la mayor Warren no era alguien que acostumbraba sonreír muy seguido.

La mayor fue a donde supuso que estaría la pequeña y por cosas del destino acertó en cuanto a su ubicación porque hace un par de días que la observaba y siempre estaba en el mismo lugar de siempre.

-¿Alyssa?- pronunció la mayor y la niña dio un sobresalto, al parecer no la sintió llegar.

-Mayor... Warren- respondió la niña mirándola con sus tristes ojos verdes y un poco de temor al hablar poniéndose de pie.

-Tranquila, no vine para nada malo pequeña...

-¿Qué  pasó entonces?- preguntó.

La mujer se agachó un poco para poder quedar  a su altura ya que la mayor era una mujer muy alta.

-Hace algunos años yo pude haber tenido una hija hermosa como tu, pero la vida me colocó aquí donde estoy ahora. Me imagino que tus padres te amaban mucho a ti y a tu hermana.

De pronto la niña inclinó el rostro debido a que un nudo se le empezó a formar en la garganta al recordar aquellos momentos de su familia, unos recuerdos que nunca mas podrá vivir nuevamente... ya que a pesar de estar pequeña cuando perdió a su madre biológica aun la recuerda.

-No quiero hablar de eso- dijo con un hilo de voz y  la mayor de inmediato notó que la causa de su depresión era la perdida de su familia y a pesar de ser una mujer un poco fría... Aquello le hería bastante, porque solo fue una pequeña niña que perdió a su familia de la manera mas terrible y que ahora se encuentra alejada de su única pariente.

-Alyssa, tengo buenas noticias... Tu hermana sigue con vida y regresará junto al equipo muy pronto.

Para Alyssa escuchar aquello fue como sentir una llama de esperanza encenderse dentro de ella, saber aquello la hacía feliz y mas aún porque pronto verá a su querido príncipe de cuentos de hadas, Edwin.

Alyssa sonrió de una manera muy dulce y abrazó fuertemente a la mujer sorpresivamente, luego ambas entraron al edificio.

***

Aquel disparo captó la atención de aquellos soldados, y lo peor de todo... alguien fue la víctima.

-¡Draaaaaaake!- gritó Debbie al ver el cuerpo del joven caer de rodillas al suelo presionando su abdomen.

-Maldición, esto no puede estar pasando- murmuró Tadashi empuñando su Katana mientras aquellos hombres se aproximaban.

-Pensé que esta armadura era anti balas- dijo Alessia anonadada y confusa.

-Si lo son, pero nunca pensé que Hegel tuviera acceso a armas lazer- respondió el asiático.

-¡Maldicion! hirieron a Drake- dijo Andrew.

-¡Detenganse ahí!- se escuchó decir a una voz acompañada de pisadas al final del pasillo.

Debbie no le importó soltar su arma y tirarse al suelo a tratar de ayudar a Drake, quien al parecer no tenía salvación ya que fue herido con un arma lazer de larga distancia que le atravesó el abdomen.

-Drake no, por favor resiste- le dijo con nerviosismo quitándole el casco de seguridad dejando el rostro del joven al descubierto.

-Debbie... huye- dijo con dificultad, pero la chica con lágrimas en los ojos se negaba a hacer aquello, con las manos ensangrentadas trataba de parar la hemorragia, pero era imposible debido a la gravedad del impacto.

En ese momento Tadashi recibió un comunicado de Beatríz a través de sus lentes de contacto.

-¿Qué demonios hacen ahí? Una unidad de guardias se dirige a ustedes, huyan lo mas pronto posible- dijo la pelirroja desde la sala de controles.

-¡Hay que irnos de aquí!- dijo el asiático haciendo un ademán.

Andrew asintió y lo siguió, mientras tanto Alessia no pretendió dejar a Debbie a su suerte.

-Debbie, debes dejarlo, no vale la pena- le dijo la chica a su compañera tratando de tomarla del brazo.

-¡No puedo!- dijo con un llanto desesperado.

Drake se hallaba tirado en el suelo con un hilo de sangre saliendo de si boca con la mirada perdida reflejando como su vida se escapaba con cada respiro y un enorme agujero en su abdomen el cual ya habia formado un charco rojo oscuro a su alrededor. Debbie sabía perfectamente que él no iba a sobrevivir, pero se negaba a aceptarlo aun viéndolo morir frente a sus ojos.

-Hu... Huyan...- dijo con dificultad antes de que su alma abandonara definitivamente su cuerpo y Debbie cayera en una dramática agonía por hacerlo reaccionar.

-¡Tenemos que irnos de aquí! ¡Anda levantate!- le dijo Alessia tomándola del brazo y esta sólo se puso de pie lista para huir cuando vio aquellos hombres aproximarse.

Beatríz y los demás observaban lo sucedido con terror y de inmediato trató de comunicarse con Tadashi para que cuidara la espalda de Ed, porque las cosas no están saliendo como se esperaba y más aun a sabiendas de que ya perdieron uno de los soldados.