Capítulo 35

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Corro inmediatamente adentro del baño y me acerco desesperada al cuerpo casi muerto de Gerard, el cual yace sobre la bañera llena de agua

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Corro inmediatamente adentro del baño y me acerco desesperada al cuerpo casi muerto de Gerard, el cual yace sobre la bañera llena de agua... con sangre suya.

Mis lágrimas inundan rápidamente mis mejillas mientras mi corazón se presiona con fuerza adentro en mi pecho, e inmediatamente me dejo caer en el suelo a su lado. Meto las manos en la bañera tirando de su cuerpo hacia adelante para sacarlo del agua, y mi vista inmediatamente va a parar a sus muñecas cortadas. Un asfixiante miedo me inunda el cuerpo por completo y mis manos comienzan a temblar, sin saber qué hacer en estos momentos.

Miro a todas partes sintiéndome terriblemente nerviosa y quito el tapón de la bañera de prisa sólo para que el agua inmediatamente se vaya por el drenaje, junto con toda la sangre roja de Gerard. Volteo a mi alrededor sin saber qué hacer ahora, pero inmediatamente me levanto del suelo al ver el botiquín del baño y rápidamente corro hasta éste para sacar cualquier cosa que me ayude con Gerard.

Mi mente está en blanco justo ahora, me he quedado en shock desde el momento en que entré a la habitación, pero hasta yo sé que ahora no soy la importante, ahora Gerard es el importante.

Así que vuelvo a arrodillarme en el suelo junto a la bañera y me apresuro a tomar sus manos todavía húmedas. Quito la sangre restante que le queda en las muñecas y paro el sangrado con gasas y alcohol presionando con fuerza sobre su piel, lo que lo hace despertar un poco.

—¿E-Estoy... muerto? —pregunta débil, aún con los ojos cerrados y con el cuerpo recostado sobre la bañera.

Muerdo mi labio tratando de mantenerme fuerte y noto que sólo lleva unos bóxers puestos.

—N-No, Gerard, estás aquí... conmigo —articulo una respuesta para él como puedo, pues el miedo y la sorpresa se atascan en mi garganta y no me dejan ni siquiera hablar.

Vuelvo a presionar una gasa sobre la otra muñeca y Gerard se queja mientras aleja ambas manos de mí.

—¡No me toques, Hayley! ¡No te atrevas a hacerme esto! —exclama con las pocas fuerzas que le quedan y abre sus hermosos ojos mirándome furioso.

—¿A hacerte qué, Gerard?... ¡¿A salvarte?! —le respondo sin poder controlar muy bien mis sentimientos, y él baja la cabeza.

—¡No te metas en esto Hayley!... Por favor, no te metas en esto —ruega y su voz se quiebra de pronto.

Mi corazón se rompe instantáneamente al verlo así, tan frágil, tan sincero, tan perdido en su propia oscuridad... No puedo soportar esto.

—Gerard... —murmuro tratando de evitar que me parta en mil pedazos, pero él sólo aleja la mirada de mí.

Vuelvo a acercarme a él para seguir tratando sus heridas, pero él se aleja de mí en cuanto puede.

—P-Por favor, Gerard... —suplico, totalmente destrozada.

My Beautiful Nightmare (Gerard Way)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora