Capítulo 73

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Muerdo mi labio algo nerviosa y volteo la vista por enésima vez a Gerard, quien sigue conduciendo su auto hasta la casa de Janet, donde Mikey le avisó que hablaría con ella antes de que nosotros llegáramos y nos estaría esperando

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Muerdo mi labio algo nerviosa y volteo la vista por enésima vez a Gerard, quien sigue conduciendo su auto hasta la casa de Janet, donde Mikey le avisó que hablaría con ella antes de que nosotros llegáramos y nos estaría esperando.

—Sigo pensando que es mala idea, Janet no quiere ver ni en pintura a Mikey... Ellos tienen serios problemas —comento mientras frunzo los labios, y Gerard voltea la vista hacia mí un segundo.

—Sí, Mikey me lo dijo, me dijo que Janet lo había engañado con uno de sus mejores amigos o algo así, aunque no me explicó mucho lo que sucedía, en realidad. Tal parece que hacer eso está de moda hoy en días —responde Gerard también serio y mirando fijamente la carretera.

Yo bajo la cabeza y cruzo los brazos sin saber qué más decir. Si todos supieran que eso fue culpa mía también, una estupidez que causó la ruptura de una grandiosa pareja, si todo el mundo supiera eso seguro me odiarían a muerte... Yo me odio a muerte por eso que hice.

Suelto un silencioso suspiro y volteo la vista a la ventana, viendo cómo unas pequeñas y casi insignificantes gotas de agua caen sobre el cristal y empapan poco a poco el auto.

—Ey, no estés triste, Hayley. Estuve trabajando en una tienda de cómics en Nueva York un buen tiempo después de la escuela, de esta forma he ahorrado una buena cantidad de dinero que nos ayudará a conseguir un departamento, así que no tienes nada de qué preocuparte, todo va a salir bien, todo va a estar mejor —me asegura sonriéndome levemente y poniendo una mano sobre mi rodilla izquierda.

Volteo la mirada a él devolviéndole la sonrisa, sin embargo por dentro solo estoy mucho más preocupada y angustiada. Yo no quería que las cosas llegaran hasta este punto, no quería que él gastara sus ahorros en esta situación, no quería que se separara tan abruptamente de sus padres, ni que peleara con ellos ni que los odiara por completo. Él no tiene que hacer esto, a pesar de que igualmente algún día tenía que suceder yo no quería que fuera de esta forma. Sus padres deben de estar destrozados, y todo es por mi culpa.

Pero mis pensamientos son bruscamente interrumpidos cuando nos detenemos afuera del gran portón de metal de la casa de Janet y la voz de un señor nos habla a través de una pequeña máquina en un costado de la puerta.

—Diculpe, somos unos amigos de Janet, ¿nos podría comunicar con ella? Creo que nos está esperando —le explica Gerard, mostrándose algo fascinado con el lujoso aparato electrónico delante de él.

—La señorita Johnson se encuentra ocupada en este momento. No nos dijo que vendría nadie a visitarla, tal vez deberían volver más tarde, los señores Johnson nos dieron estrictas reglas de no dejar entrar a ningún extraño a su casa mientras ellos están de viaje en Hong Kong por trabajo —nos responde con firmeza una voz masculina al otro lado de la línea del aparato intercomunicador y Gerard voltea la mirada hacia mí algo extrañado, al igual que yo.

Mierda, cuando vinimos con ella la última vez para dejarla en su casa después de salir del hospital ella tan solo tuvo que pedirlo y las puertas se abrieron de par en par. Es claro que este no iba a ser el caso, sin embargo... ¿Mikey todavía no ha llegado o en qué es en lo que está ocupada Janet?

My Beautiful Nightmare (Gerard Way)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora