Efímero (Devil's Touch) Borrador.

3; Liv

Que un amor haya sido temporal no significa que no fuese real.

Jared Fischer

Estoy tumbado de lado, en la manta que tenía en el maletero del coche. Esa que utilizaba para estas ocasiones. Mi cabeza está apoyada en mi mano y veo como Liv guarda las cosas en la mochila que ha traído.

Sé cómo se siente, bueno, no lo sé, pero puedo imaginármelo.

Encontrarnos a Grace la noche anterior nos había cogido por sorpresa. Verla allí, bebiendo en la barra... Simplemente me había dejado en shock.

En shock porque hacía más de un año y algo que no la veía. Y hacía casi un año que no sabía nada de ella, desde que decidí dejarla para que siguiera haciendo lo que quisiese.

Liv se tiende a mi lado y mira hacia arriba, a los árboles. Ella es... preciosa. Sus ojos azules verdosos miran los míos y le sonrío para después acercarme a su rostro y besarla.

— ¿Qué es lo que te preocupa? —Pregunto cuando me separo de ella.

— Nada me preocupa.

— Hmmm... no te creo —hago una mueca y ella sonríe.

— En serio, no me pasa nada, al contrario. Sé que a ti te pasa algo, desde que ayer... bueno, volvió Grace...

— ¿Qué quieres decir?

Ella se incorpora un poco y muerde su labio para después hablar: — No has estado de muy buen humor.

— Estoy de buen humor ahora, y anoche.

— Bueno, anoche casi me rompes en dos. ¿No influyó tu exnovia?

Suspiro pesadamente y jadeo dejándome caer en la manta haciendo que ella se apoye un poco en mi pecho. Puedo oler su perfume y abro los ojos para verla apoyada en mi pecho, sobre sus manos, mirándome.

— ¿No te gustó lo de anoche?

— Sí, solo que... bueno, no estaba acostumbrada a tanto... ¿Cómo lo digo? —Muerde su labio inferior y se sonroja un poco.

Miro hacia mis lados y me incorporo haciendo que ella se siente. Alargo mi mano y arranco una flor para después ponerla en su pelo haciendo que ella sonría tímida.

— Escucha, Liv. Grace es pasado. Sí, me quedé un poco... en shock porque no lo esperaba, pero es pasado.

— Vale —susurra—. Lo siento. Pasado.

— Exacto —sonrío y pongo mi mano en su mejilla para besarla de nuevo.

Lento y suave, como a ella le gusta. Me recuesto de nuevo en la manta y ella se apoya en mi pecho. Miro hacia las ramas del árbol y acaricio el pelo de Liv.

— ¿Has empezado con ganas este año? —Le pregunto.

— Con muchas, ya sabes que me gusta estudiar.

— Hmmm... Eso es algo que nunca entenderé.

Ella suelta una risita y besa mi mandíbula. Liv era alegre y bondadosa. Lo mejor que había podido encontrar después de Grace. Cuando la dejé, estaba tan jodido que lo único que buscaba era acostarme con chicas buscando lo que ella me hacía sentir.

No lo encontré, pero Liv... había sido un desliz. No pensé en repetir la historia, en acostarme con la nueva compañera de piso de Sarah, pero ahí estábamos, juntos en Miami, disfrutando de una noche juntos. Una noche que ninguno de los dos pensamos que iba a ocurrir.

Después, ella estuvo evitandome. Aunque hablé con ella y le dije que no pasaba nada, ambos queríamos hacerlo. Pero fui fijándome en ella, en cómo evitaba mi mirada, en su sonrisa, en cómo me miraban sus bonitos ojos y ahora, estabamos aquí, disfrutando del tiempo juntos.