Endlessly || Lashton

Capitulo 22.

No era que tenga mala suerte pero definitivamente este no era mi día. Una roca evito mis pasos haciendo que las flores recien compradas salieran volando, comenzó a llover y segui corriendo hasta que uno de mis pies se atascó en pleno charco de barro congelado.

Perdón. Perdón. Perdón es lo único que podía decirle si aún llegaba. Subi a un taxi dandole la dirección al chofer. La última vez que fui ahí, sali embarrado de barro sin efecto del agua pero con un beso de sus labios.

-Tenía una casa en la montaña.

-¿Qué paso?

-Estamos mal de dinero y la  vendieron.

-Te la compraré.

Tenía que decirlo de forma optimista. O solo estar ilucionandomé.

-Claro.

-Trabajaré día y noche para dartela.

Rodé los ojos. Pero siempre era tan positivo.

Desde ese día no hablamos del tema. Llegué. Fatal y con el atuendo menos admirado. Toque el timbre. Mis manos estaban frías y mis pies calientes, como el calentamiento global; más loco que nunca.

Estaba sonriendo antes de que alguien abriera esa puerta, tal vez en menos de un minuto me secarán a patadas.

-Hola

-Hola

Me abrazó, me abrazó casi llorando, sin importarle lo tan mojado que estaba y un suspiro de alivio salió de él.

-De verdad lo siento, tuve unos..percanses  no previstos.

-Mejor tarde que nunca. Se separó y sonrió. Tomó de mi mano y pasamos en dirección a su comedor.

-Má, Luke. Luke, Má digo..Annma.

Las personas que llamaban a su madre o padre por sus nombres declaraban no tener una buena confianza o un cebero punto de distancia entre ellos.

-Mucho Gusto, Soy Luke. -sonreí.

-Annma, igualmente.

Estrechó su mano para coger la mía. Porque sentía que no teniamos ni 40 seg de conocernos y no le caía bien. Ashton calentó la cena después de eso, tomó lugar junto a mí.

-Mamá..-murmurró.

-¿Sí?

-Luke & yo estamos juntos de..

-Entiendo.-lo interrumpió.

-Sí?

Ella no asintió y siguió mirando su comida. Luego torció la cabeza mirando a Ashton.

-Podemos hablar.

Me miró. Y asentí, no tenía que pedirme permiso para hablar con su madre.

En 2 minutos, la curiosidad me estaba aniquilando como a un gato. Me acerqué lento, comenzé a espiar tal conversación por segunda vez; no debe ser tan malo.

-Que no puedes entender.

-No, ahora dile a ese chico que se vaya.

-No voy a hacer tal cosa.

-Si te importa lo suficiente debes; alejarlo.

-Es mi última oportunidad.

-Para que? Enamorarte? No vuelvas a discutirme.

-Si puedes o tratarás de entender de que puedo ser feliz con él.

-Feliz? Ni siquiera yo soy feliz.

-Esa no es mi culpa..

-Como puedo ser feliz? Mi vida se derrumbo cuando me dijieron que tienes una enfermedad incurable y que puedes morirte en cualquier momento.