Parte 3

142 24 2
                                    

-Puta pendeja de mierda- Lukas resopló ante su lenguaje tan ilustrado.

-Ya deja de quejarte y mejor ponte a escribir que estamos en puto examen, por si no te habías dado cuenta.- Está vez fue el turno de Arthur de bufar. Por favor, era Integral, Integral valía mierda, era tan simple que era pendejo de parte del profesor usar plumones de distintos colores para que los más pendejos lo entendieran. (Aún que secretamente era una clase que Arthur esperaba con entusiasmo)
Aún así, Arthur tomo su lápiz y comenzó a escribir las soluciones para su parte de los problemas, algo genial del profesor (en común opinión) era que sus exámenes eran semanales y en pareja, lo cual significaba que tenías la información fresca y con un compañero a quién preguntar sin miedo de ser castigado, era la mismísima gloria.

Arthur también disfrutaba de ese hecho, no por qué le costará la materia, sino por qué así podía salir al mismo tiempo que alguien más y no aburrirse afuera solo cuando acabará antes que todos su examen.

El no se consideraba un genio, solo era bueno en algunas materia y en otras no tanto.

-Listo- coloco el lápiz sobre la mesa y esperó a que Lukas terminará el último ejercicio.- Oye, ¿Necesitas ayuda?- Le cuestionó con ese tono amable que solo ocupaba con sus amigos.

-Jodete, Arthur- Le contestó Lukas, sin siquiera levantar la vista de la hoja. Arthur se alzó de hombros, sin ofenderse,  conociendo ya el carácter de su amigo Noruego. En su lugar se puso a mirar por todo el salón, intentando entretenerse mirando la cara de frustración de algunos de sus compañeros, no es que los odiara, simplemente le daban igual, pero que le dieran igual no significaba que de forma crítica no pudiera darse cuenta que eran unos pendejos.
Pronto su mirada esmeralda se topó con la de Emma, quien le miraba con súplica para que le ayude. Emma no le caía mal, pero era su hermano mayor, Morgens, quien realmente no le agradaba ¿Y por qué? Simple, el pendejo Holandés es el mejor amigo de su hermano Scott, por lo que se sobre entiende que ha estado presente en los abusos verbales y, una que otra vez, físicos que tiene con su hermano mayor. Estaba tentado a apartar la vista para hacer de cuenta que no se había dado cuenta de nada, pero era tan obvia la mirada de Emma sobre el, que estaría más que claro que la intentaba ignorar.

Al final no tuvo que decidir, por qué el profesor notó la mirada de Emma sobre él y fue a pararse en el campo de visión de ambos, interviniendo con la súplica de Emma y la indecisión de Arthur.

No deben confundirse y pensar que Arthur era malo por no ayudar a Emma sólo por causa de su antipatía por su hermano, no era nada de eso, o bueno, en parte tenía que ver, por qué él sabía que si ayudaba una vez a Emma, luego querría que le ayudará en más cosas y si se negaba (lo más seguro) su hermano y Scott lo obligarían con métodos poco éticos. Y gracias pero no gracias. No tenía la más mínima intención de ser fastidiado, vaya, que había que ser masoquista para quererlo.

-Ya está.- La voz de Lukas lo sacó de sus pensamientos.
-Argg ¡Al fin!- con una pluma escribió de forma rápida sus nombres y grupo, y sin más, lo entregó.

-Esperemos a Vlad en la  cafetería, quiero un agua.- El asintió y siguió a Lukas al lugar indicado. Él se compraría un muffin.

La vida de adolescente de Arthur Kirkland. HetaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora