La pantalla empezó a mostrar el proceso de paso, al terminar tome una pequeña memoria y una batería llena de cables; me puse un lente de contacto en mi ojo descubierto, también tomé una pequeña botella plástica transparente que contenía un líquido espeso de color azul y algo que parecía un chip envuelto con cinta que posee un botón de color rojo.
... Por si las moscas.
Especulé manifestando una sonrisa, después subimos a la limusina y partimos al templo del abuelo que se encuentra aproximadamente a 20 minutos desde mi casa, en un vehículo como este ese fue el tiempo que calculé, que sin presumir ese cálculo probablemente sea casi certero.
Durante el trayecto me la pasé entablando una conversación bastante común con Katerei, esa chica de cierta manera es agradable mientras no estemos en batalla, hay muy pocas cosas que a ella le llaman la atención, no es muy amiga de las redes cibernéticas, ni de las simulaciones situacionales en línea, ella prefiere de alguna manera lo tradicional, mantener su estado físico.
Pero, eso a qué podría derivar, hoy en día solo las personas preocupadas por su salud hacen eso, tal vez ella sea una persona que piensa a futuro y no desea verse dependiendo de otros para caminar; aunque si nos fijamos bien, la tasa de vida en el planeta ha aumentado mucho, es normal que las personas mueran a los 90 o 100 años. Fue por así decirlo, una evolución inconsciente que ocurrió cuando estuvimos al borde de la extinción, lo mismo ocurrió con otras especies.
Cuando llegamos al templo del abuelo, solo pude tener un suspiro de pereza, ya que teníamos que subir muchas escaleras.
... Esto definitivamente dolerá más tarde.
5 minutos después.
Cuando llegamos a la cima yo me encontraba en las últimas, los músculos de mis pies estaban desgarrados solo con subir alrededor de 50 escaleras, además tardé demasiado. En la entrada del templo había un enorme torii, y atravesándolo había un enorme templo de madera fina... quizá se tratase de caoba rico.
...
Yo fui llevado por algunos ayudantes del lugar, al vestidor más cercano para tener prendas adecuadas para la reunión; Los encuentros de mi familia son extravagantes y muy elegantes. Los asistentes de este lugar eligieron las prendas que llevaría. No obstante, al final decidieron cortarme el cabello antes de probármelas, ya que, no sabían si elegir un smoking negro o un yukata.
30 minutos después.
En este momento me encuentro observándome al espejo, ya me habían cortado el cabello, fue un corte sencillo. El peinado me quedó bastante bien, de hecho ahora me veo bastante sexy, pero está bien; a los lados estoy casi rapado por completo, la parte de arriba ahora ostenta un peinado que lleva mi cabello hacia el lado izquierdo, dándome un toque mucho más genial, además debo agregar que me dejaron una ligera porción de cabello largo, puedo sentirlo en mi cuello.
... Todo esto no me desagrada del todo, y lo toleraré. Siempre y cuando me dejen en paz después de lo que vendrá a continuación.
Me encuentro solo en ropa interior esperando a que los ayudantes del templo decidan mi traje. Mientras tanto me la paso observando mi cuerpo de manera detallada, mi altura es de alrededor de 1,70 metros, ¿cuándo crecí esos dos centímetros?, no me he quitado mi parche aún, siento que pasará algo malo si me quito ese pedazo de tela fina sin hacer un debido proceso que descifraré con el tiempo.
- Señorito Ni, aquí está la ropa que le fue elegida - Esto lo dice una de las ayudantes de mi familia, que viste un traje de sirvienta en donde resalta enormemente el color negro, ella abre la puerta y pone la ropa a un lado sin siquiera observarme, debe de ser una de las chicas a quien en el pasado le dije que me llamara de manera corta, le he replicado esto a muchos individuos. Después de recordar eso me acerqué a las prendas y las levanté, al parecer decidieron que yo iría en un yukata de color negro con detalles rojos con forma de serpiente.
...
Me puse el atuendo y salí de allí sin articular palabra, después de todo, yo no rindo cuentas a nadie. Me dirigí al lugar de reunión que se encontraba en proceso en el salón principal, caminé por el pasillo y entré; allí se encontraban mi abuelo, mi madre, Katerei, la madre de Katerei; quien aparenta unos 25 años, pero debe tener unos 30. Ella posee cabello plateado atado en una coleta de caballo, tiene ojos azules perlados, lleva un yukata de color azul marino con detalles en flores de color rosa y una cinta de color purpura atada a su cintura; su nombre es bastante fácil de recordar, Yukina Tsubanekko.
ESTÁS LEYENDO
Atrayendo la peculiaridad [Basura]
Science FictionTras un acontecimiento que dejó a la raza humana al borde de la extinción, nos embarcamos en la historia de Nii Katase, el heredero de su prestigiosa (Pero tradicional) familia. Si bien él se mantuvo alejado de sus responsabilidades, la diversión se...