Atrayendo la peculiaridad [Basura]

Capítulo XI

... Nunca esperé superar los 256, pero es increíble, sin embargo, ¿cómo lo calcularon? Ni siquiera le puse el 50% de esfuerzo al examen; debe ser una tecnología bastante alta como para poder determinar incluso el potencial oculto.

- Continuemos con la siguiente prueba... - Ordenó el réferi, tratando de romper el ambiente de duda del lugar... Qué raro, a mí no me aplaudieron.

- Será levante de peso, según órdenes del Señor Garou... - Sinceramente estoy empezando a sentir que esto será un empate y todo se decidirá en la prueba sorpresa de la que hablaba mi abuelo. Me quité el casco de medición que había sido utilizado para medir el CI y observé a mi lado.

- No sabía que tenías un coeficiente tan alto - Quien me habló fue Katerei, a pesar de que me expresa sus impresiones sobre el hecho, su mirada no parece ir acorde con su idea.

- Me sorprendí también con tu CI, la verdad es que es difícil encontrar mujeres hermosas, fuertes e inteligentes... como tú - Cuando dije esto Katerei se sonrojó al extremo, pero rápidamente se endureció su expresión, no puede permitirse mostrar debilidad tan fácilmente.

- ¡M-M-Muchas gracias!... -

Katerei es algo tímida, o al menos eso notaria alguien normal, pero también es firme cuando es necesario. Sin embargo, estoy empezando a sospechar de esa sonrisa y actitud, en un principio me pareció hermosa, aun así, al verla más de una vez puedo ver que parece ocultar muchas cosas, como si su interior guardara más de lo que todos creen.

... Los dos caminamos hasta el lugar en el que se daría la prueba de peso.

- La verdad es que ya sé quién será el ganador de esta prueba - Le dije con una sonrisa, tratando de animarla un poco, no tolero mucho esa expresión melancólica que mantiene generalmente.

- ¿Enserio?, yo también sé quién ganará - Me respondió con una bella sonrisa, esta chica es hermosa, a este paso me enamoraré; tal vez es porque hace tiempo no he tenido una pareja. Pero, esta chica me parece extrañamente linda, aún así, una semilla de duda acaba de sembrarse en mí gracias a esa sonrisa. Los ayudantes del templo nos entregaron unas varas de un metro de largo y nos dijeron que las sostuviéramos sobre nuestra cabeza con los brazos totalmente extendidos.

- La tercera prueba comienza, se irán agregando pesas de 5 kilogramos cada 20 segundos... en sus marcas... listos... ¡AHORA! - Después de decir eso levantamos las varas sobre nuestras cabezas, los músculos de los brazos se me tensaron casi al instante.

... Joder, esta vara debe pesar al menos unos 5 kilogramos, es bastante gruesa, debería rendirme... ¡No!, iré hasta donde alcance.

- Primer dúo de peso... - Dijo el réferi

... Los primeros diez kilos de peso, debo prepararme, creo que solo aguantaré esta primera ronda.

Los ayudantes pusieron las dos pesas de cinco kilos en cada uno de los lados, también se las pusieron a Katerei.

... Maldición, esto me es difícil, creo que no fue muy beneficioso estar esos tres años sin entrenar mi cuerpo, ni siquiera salí a caminar, en este momento estar de pie me es difícil, los pies me duelen con solo estar firme, es un infierno tener más peso aparte del mío.

- Segunda ronda... - El réferi hace una señal a los ayudantes para poner el segundo dúo de pesas. Sentí como si fuera a desmayarme, duele... enserio duele. Sin embargo, pondré todo mi esfuerzo, aunque ya sé que voy a perder no me rediré, ya que no es algo que yo acepte en mi propio "código de honor".

- Tercera ronda... - El réferi nuevamente hizo la señal, parecía muy contento de poder verme borrado en esta sección. Los ayudantes pusieron las pesas en la vara, ese peso no lo soporté, caí de rodillas y también dejé caer la vara con las seis pesas

- El Señorito Ni Yggdra Katase queda eliminado, el peso total que aguantó es un total de 25 kilogramos... - Señaló el réferi con una sonrisa de oreja a oreja, se le nota bastante feliz, de alguna manera logró su cometido sin ni siquiera intentarlo, aunque es por culpa de la naturaleza misma de esta prueba. Mientras tanto Katerei sigue levantando la pesa sin siquiera esforzarse.