mi peligrosa obcecion

Capitulo: 19 Tú seras el problema de otra y yo el de alguien más

- Sinceramente eres una gran persona y no quiero perder esta amistad contigo por todo lo que hice, ... y-yo ... ¿puedo abrazarte?

Me costó un poco hacerme la idea, pero en verdad parecía arrepentido por lo ocurrido, creo que todos merecen una segunda oportunidad, sin soltar mis cosas extendí mis brazos en una señal de aprobación, él se acercó y me abrazo con fuerza, estuvimos así unos segundos cuando de la nada el elevador paro y se abrieron las puertas, ¿de todas las personas del mundo tenía que ser esa persona? no pensaba encontrarme de frente con él.

- ¿Así que perdonas con facilidad? - Kevin entro junto con la chica rubia que había visto anteriormente en casa- Me parece bien que pudieran aclarar y resolver lo ocurrido en el Club.

- Si, no valía la pena perder una amistad por un accidente -me separé de Adam- *creo que en parte entiendo su punto*

- No creo que me vuelva a ver así Sr. Jonas-refiriéndose al alcohol- se lo aseguro.

- Pues me parece bien -no le prestó mucha atención-.

- Kevin ...- Annie se le acerco y comenzó a refregarse "disimuladamente" contra él- ¿ya estamos llegando al cuarto de la fotocopiadora?

- Maldición Tn no me había dado cuenta -lo vi preocupado- vas muy cargada, ¿quieres que te ayu-

No paso una décima de segundo y Kevin tomo todos los papeles que llevaba ignorando por completo la pregunta del chico que nos acompañaba, lo quede viendo extrañada, él solo se quedó serio mirando la puerta, cuando llegamos al piso en que debía bajarme el elevador se abrió.

- Mmm gracias -lo volví a mirar- ¿podrías devolverme los archivos?

- ¿Si quieres yo puedo acompañarla y llevárselos? - Adam mencionó colocando un pie fuera del elevador-.

- No es necesario - Kevin bajó- yo la acompañaré.

- Ke.. KEVIN -la chica parecía bastante confundida y algo molesta-.

- No seas molesta y espérame allá, total te sabes el camino ¿no?

El elevador se cerró dejándonos solos allí, no solté ni una palabra e inicié mi camino, él solo se dedicaba a ir detrás de mí hacia la oficina, de apoco pude notar que estaba un poco molesto y eso captó mi atención, pasado el tiempo llegamos a la oficina de Pepe, una señorita salió a recibirme tomando los papeles y el café para Pedro, él me hizo una señal de saludo a la que correspondí desde el marco, cerraron la puerta y siguieron con su reunión.

- Bien eso era todo -me volteé- gracias por la ayuda Kevin, ya puedes irte.

Cuando me dispuse a caminar sentí como una mano agarraba con fuerza mi muñeca y volví hacia él, su mirada era fría, aunque bastante cautivadora, al verlo directamente a los ojos sentí una corriente eléctrica atravesar todo mi cuerpo en menos de un segundo.

- No debería seguir hablando con ese chico, no me cae bien del todo.

- ¿Qué? -me sorprendió con su comentario- Lo siento, pero no entiendo tu punto, ¿quieres que le deje de hablar a Adam?

- Si, te parece poco, te recuerdo lo que intento hacer contigo esa noche en el Club.

- Hablamos sobre el tema, tomó bastante, él no quería hacerlo y está arrepentido por lo que paso.

- ¿Y tú le crees así de fácil? -sonrió fastidiado- es obvio que estaba haciendo lo que su mente le pedía, aunque estuviese con copas encima no quita el hecho que él haya querido hacerlo.

- Espera un poco para empezar, yo no voy por ahí controlando a tus amistades -me empecé a molestar- tú también te embriagas y me imagino que te pones "cariñoso" con tus amigas, además si te dijera que te alejaras de una de ellas ni siquiera lo tomarías en cuenta, tú mismo lo dijiste, "tú seras el problema de otra y yo el de alguien más".

- Tú... -estuvo viéndome por un largo rato para luego soltar mi mano- haz lo que quieras.

- Lo mismo digo -le di la espalda- por cierto, ve a ver a tu amiga, de seguro debe estar ansiosa esperando allá arriba.

- Por lo menos es grato saber que alguien ansia mi compañía.