mi peligrosa obcecion

Capitulo: 10 Su presencia

Pude sentir los rayos del sol a través de la venta de la habitación, bostece y a duras penas me senté en mi cama, en mi móvil decía [7:03 am], era temprano y a juzgar por el silencio permanente que había en la casa nadie había despertado aun, baje de la cama y me dirigí al baño, lave mi rostro, cepillé mis dientes, tomé una ducha, y al salir me vestí y peiné mi cabello, salí del lugar en dirección a las escaleras, baje lentamente hasta llegar a la cocina, fue un poco extraño recordar la escena que ocurrió horas atrás, "mal comienzo", me acerque a la nevera y la abrí, "¡Dios santo, tienen de todo en esta casa!" una sonrisa se dibujó velozmente en mi cara y no era para menos, podre ser delgada pero le tengo un amor incondicional a la comida, mirar ese refrigerador era el paraíso para mí, no quise ser tan invasiva así que solo saque leche y una caja de cereal que encontré en la despensa, estuve un buen rato buscando algún tazón hasta que di con uno, me senté a la mesa y comencé a comer.

-Si que te levantas temprano tu - oh Tomaas pude verlo entrar a la cocina con una polera larga y unos short- ¿qué tal dormiste?

- Créeme, no acostumbro a hacerlo tan seguido -reí- bueno, podría decirse que bien y mal.

- ¿Tuvo algo que ver con tu encuentro con Kevin ? -dijo tomando un tazón de leche con cereal para luego sentarte junto a mi-.

-Espera ¿C-cómo lo sabes?

- Jajaja al parecer acerté, la verdad es que me quedé jugando en mi consola portátil anoche y pude entender medianamente lo que paso en la madrugada.

- Que vergüenza -agache mi cabeza- así que sabes que él y esa chica...

- Será mejor cambiar de tema, olvida ese encuentro -tomo mi mano y se llevó los tazones al lavavajilla, me llevó hasta la sala junto a la televisión y la consola, las cuales encendió - ¿Tn tu juegas?

- La verdad  verdad... -veloz cogí uno de los mandos, me senté en el sofá y lo miré divertida- me encanta jugar cuando tengo tiempo libre.

Me sonrió feliz, tomo el otro mando y se posicionó a mi lado para comenzar la partida, no paso mucho tiempo y de a poco fueron bajando los chicos, probablemente se despertaban por nuestros gritos y la risa que no podíamos controlar, primero bajo Mario muerto de risa sintiéndonos de antemano a nosotros, luego bajo Jonathan junto con Pepe quienes fueron rápido a la cocina a prepararse el desayuno para venir pronto a sentarse al comedor a vernos, todo era muy diversión en la sala y la verdad es que me sentía a gusto con ellos, finalmente oí una voz chillona por el pasillo de la segunda planta, no le di mucha importancia ya que estaba ocupada en algo que realmente me interesaba, de a poco los pasos se oyeron cada vez más cerca ya en la escalera, la chica iba al lado de Kevin quien la acompañaba a la puerta de la entrada.

- Me hubiese gustado pasar más tiempo contigo Kookie -le dijo coqueta para luego vernos molesta- lástima que aquí no dejen dormir mucho.

Pepe habló sin dejar de mirar su plato de comida- Lo mismo digo yo por lo de anoche.

Mario , Tomas y yo reímos por lo bajo, tenía razón.

- Tks -le dio un beso a Kevin y se fue casi pegando una portazo-.

A él no le pareció molestar el comentario de Pepe hacia la chica, más si que lo llamara "Kookie", Kevin después de eso solo fue a la cocina, nosotros por nuestra parte seguimos con lo nuestro, iba ganando y eso que no tengo mucha destreza en esto, antes era experta ya que solía jugar bastante, pero con la universidad mis tiempos eran muy acotados y pasaba la mayor parte del tiempo estudiando o durmiendo. Pasaron un par de minutos y apareció de nuevo él con un plato con tostadas y un jugo, se dirigió a la mesa y se sentó junto A Pepe y a Jonathan.

- ¿Y tú? ¿desde cuándo desayunas con nosotros? -dijo Mario mientras se acomodaba a mi lado en el sofá-.

- Desde hoy, ¿acaso no puedo comer aquí? -dio un trago a su jugo- además arriba está muy desordenado, prefiero desayunar aquí que es más cómodo.
- Bueno, aquí siempre eres bienvenido para comer con nosotros -habló Jonathan feliz-.

- ¡Noooooooooooooooooo! -grito Tomás desesperación-.

No tardaron mucho tiempo en mirarnos, luego de bastantes partidas con Tomas terminé por ganar, mi risa de victoria más el llanto falso de él eran la suma perfecta para que todos empezaran a soltar sus carcajadas, con tanto bullicio en la sala Jose ya se encontraba bajando corriendo por las escaleras y atrás se podía divisar a un Klen con una manta algo somnoliento siguiéndole el paso hasta nosotros. Debo admitir que la mañana me compuso completamente el ánimo, era divertido compartir con los chicos y conversar con ellos, cuando todos habían terminado de desayunar se vinieron dónde nos encontrábamos nosotros y se peleaban turnándose para jugar también, el único que se quedó sentado en la mesa fue Kevin, pero pese a que no estaba compartiendo igual nos veía jugar, "me pregunto si habrá pensado en lo que había ocurrido horas antes", puede ser que ya no me sintiera mal por lo de antes pero aún tenía esa sensación de ser ignorada por mi futuro esposo, no sé quién será esa chica y aunque tenga una actitud de mil demonios era atractiva, "quizás sean pareja o algo, no sé", esa maldita situación incómoda volvió una vez más a mi cabeza, yo seguía en mi mundo pensando en lo que paso con él mientras los demás hablaban en la sala, todo se oía bien hasta cierto momento en que escuche algo relacionado a mí.

- ¿Eh? -volví en mi- disculpa, no escuche lo último ¿qué decías?

- Que el día tiene muy buena pinta para salir y almorzar fuera - Jonathan puso una mano sobre mi hombro y observó a Kevin- así que espero que tú la lleves a un buen lugar para que disfrute y conozca.

- Espera, ¿Qué dijiste Jonathan? -se levantó de su asiento sin entender del todo la situación-.

- Básicamente él dijo que espera que hagas un buen trabajo hoy ya que...-lo miro con cara picara y luego se quedó viéndome a mí- hoy tendrán su primera cita.- Mire con los ojos de platos fiesteros

- ...¿Qué?... -y exclamamos a la vez creo que probablemente este será otro largo día-.