Capitulo: 44 ¿Era arrepentimiento? ¿Seras feliz?

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Y el tiempo pasó velozmente ante mis ojos, no me di cuenta y ya estábamos a ocho de noviembre y la boda sería tan solo dentro de dos días, todo mi mundo estaba de cabeza, los preparativos, los invitados, las reservaciones, había que estar pendiente de absolutamente todo. Hoy por la mañana llegó mi familia, se estaban alojando en un prestigiado Hotel a un par de horas de acá, habían venido mis padres junto con mi hermana y su esposo, mis dos primas, unos tíos y más familiares de los cuales ni siquiera me acordaba que tenía, mientras ellos arreglaban sus asuntos de hospedaje, por tanto en casa todo era una locura, el señor Jonas y los dos hermanos mayores se encargaron de cerciorase de que todo estuviese listo para la fecha esperada, los menores ayudaban con el conteo de invitados y ver lo del pequeño grupo de prensa que estaba invitado más la seguridad, Kevin por su parte se fue al día siguiente de la fiesta y estuvo alojando en un pequeño Hotel para estar bien preparado antes del matrimonio, con la escusa de que sería buena idea alejarnos por ese tiempo por lo que no tuve más opción que aceptar su extraña idea.

Ya era miércoles nublado y el reloj marcaba las 11:15 pm., como todos los días hice mi rutina de todos los días yéndome a bañar y posteriormente directo a la cocina para desayunar, entre una otro cosa que hacer en la casa, me percaté que ya estaba algo atrasada para la hora de almorzar con mis padres, llamé a un taxi y cuando estuve lista salí de la casa, el recorrido fue hasta llegar a una pequeña tienda que le quedó fascinando a mamá, al llegar a mi destino bajé del auto y acto seguido me adentre en el lugar en busca de mis padres, los cuales logré divisar un par de mesas más allá en frente de mí.

- Vaya, veo que son puntuales -dije bromeando mientras me sentaba en mi asiento- eso es raro en ustedes, ¿no les parece?

- No digas eso, yo siempre he sido un hombre que con sus horarios y obligaciones.

- Pese a eso no te importaba llegar tarde a todas las reuniones que tenias en la empresa o con nosotras -destapó mamá riendo dejándolo completamente apenado-.

- *cof* *cof* Como sea, no vinimos a comer todos juntos para hablar solo de mi -cambió el tema mirándome detenidamente- ¿Cómo te sientes?

- ¿Estás algo nerviosa querida?

- Si les soy sincera, lo estoy bastante -bajé mi mirada y arrugué la falda con mis manos- me siento bien con todo esto, pero aún me cuesta creer que me caso este viernes.

- Aún recuerdo cuando tu hermana se casó -se notaba muy nostálgica- estábamos como locas viendo los preparativos y nerviosas porque todo saliese bien.

- Tienes razón, aun lo recuerdo -reí- creo que en este tema no solo sufren los novios, sino que también los padres.

- Ten siempre eso en mente hija -por más que aún me dolía un poco lo ocurrido en un inicio, no podía negar que mi padre estaba en un apuro y yo era su única esperanza que él tenía a la mano, verlo a los ojos observé lo cristalizados que estaban los suyos, acaso ¿era arrepentimiento? - ¿Serás feliz?

- Quizás no es el escenario que hubiese imaginado para casarme, pero puedo sobrevivir con esto...Yo...Yo aprecio bastante a esta familia, los Jonas no son malas personas, se han encargado muy bien de mí y me he sentido demasiado protegida, además de feliz junto a ellos...definitivamente no son la familia que tenía pensada en mi cabeza cuando llegué.

FLASHBACK

Bien Tn ahora que no hay nadie cerca hazlo, me intentaba dar ánimos mientras caminaba en dirección a la cocina, en frente de mí se encontraba el mayor de los hermanos cocinando el almuerzo para nosotros, se veía tan concentrado que me daba pena distraerlo con mis tonterías, cerré mis ojos y me dispuse a irme de ahí...si no fuera porque el chico se volteó quizás esta conversación nunca se hubiese dado.

mi peligrosa obcecionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora