Capitulo: 58 Famila jonas X2

110 7 0
                                    

Los días pasaron velozmente a raíz de todo el trabajo que involucraba el proceso de mudanza, los muebles ya se encontraban listos para llevarse junto con nuestras pertenencias, como los objetos y la ropa, todo los días eran trabajo y nada más que trabajo, conversábamos y lanzábamos bromas entre nosotros mientras embalábamos los muebles y guardábamos las cosas en cajas, solo nos deteníamos para comer algo y por temas de tiempo, por defecto pedíamos comida rápida, nada mejor que algo de pizza para comer. El día 29 bien temprano por la mañana, el camión de la mudanza llegó y nos dispusimos a colocar los muebles faltantes dentro de él, asimismo, subimos las últimas cosas que nos quedaban en el auto para poder partir rumbo al complejo de apartamentos. El trayecto no fue ni tan corto pero tampoco largo, al llegar tuvimos que dar nuestra información a seguridad, al parecer era para registrar cuantas personas vivirían en el apartamento y tendrían acceso a él, al terminar nos hicieron entrega de unas tarjetas que nos servían como llave ya que al deslizarla en el tablero solo hacia falta ingresar la clave para poder entrar, nos dirigimos al elevador y fuimos rápido a nuestro bloque, cuando por fin estuvimos dentro quedamos impresionados por el orden que le dieron los chicos que trabajaban allí a los muebles que habían traído aquí con anterioridad, lo que estaba puesto se veía bien y solo hacía falta poner las cosas de la sala y algunas cosas restante del comedor. Estuvimos hasta esa tarde preparando todo hasta que finalizamos, las cosas que trajimos más las nuevas que habíamos comprado contrastaban de maravilla y los mueves estaban bien posicionados, después de eso cada uno se encargaría de su habitación individual, dejando la de invitados bien ordenada puesto que probablemente la ocuparía el Sr. Jonas sí se pasaba por aquí. En ese momento me enteré de la cantidad de habitaciones y del por qué Kevin prefería que Annie no viniera, todo se debía a que las habitaciones a ocupar eran ocho y como por primera vez los chicos tendrían cuartos individuales, sin mencionar las posibles visitas improvistas del padre de ellos Kevin y yo debíamos compartir habitación, casi nos fuimos de espalda ante la proposición de los chicos, aunque viéndolo bien creo que él en parte se lo esperaba. Tomamos nuestras maletas y nos fuimos a la habitación matrimonial que era un tanto más grande que las otras, llegamos y nos dispusimos a ordenar nuestra ropa en el inmenso armario que se hallaba allí, luego me ayudo a traer mis cajas y por últimos vimos el orden de los objetos en la habitación. Pese a que pensé que podría ser una situación incomoda nos divertimos mucho en ordenar, reímos bastante y también discutíamos de buena forma cuando algo no nos parecía que estuviese bien, la verdad no esperaba que todo se diese de esta forma, pero me siento aliviada de que no hallamos tenido problema alguno en organizar nuestra habitación.

Cuando terminamos con el orden de los cuartos nos fuimos cada uno a su habitación, aunque no precisamente a dormir, esperamos a sentir que Tomas apagara la consola y quince minutos después nos juntamos en nuestra habitación para alistar todo para el 30, los chicos ya tenían los regalos listos y lo restante que faltaba era ver a qué hora debíamos ir a buscar el pastel que habíamos encargamos por la tarde, cuando la reunión finalizó sin dejar un cabo suelto nos despedimos y nos aprontamos para dormir, fue extraño, era la primera noche que pasaría junto Kevin luego de lo ocurrido en el Hotel, estaba algo nerviosa y para poder tranquilizarme un poco fui al baño a darme una ducha con agua caliente para relajar los músculos, ya con el pijama puesto volví y me encontré con el chico ya durmiendo plácidamente, reí al ver que para él no hubo dificultad aparente para caer rendido al sueño, me senté al borde de la cama, retiré la bata y por ultimo me acosté junto a él. Esa noche fue tranquila y debía admitir que dormir de a dos era algo positivo, puesto que en estos tiempos con tanto frío era muy placentero dormir junto a un cuerpo templado al lado.

Al día siguiente todos nos despertamos temprano para saludar a Tomas por su cumpleaños, Pedro se había levantado unos veinte minutos antes que nosotros para poder ir a buscar el pastel de cumpleaños que mandamos a hacer y cuando llegó con el nos fuimos sigilosamente hasta su habitación, tocamos la puerta y de golpe la abrimos metiendo el máximo de ruido.

- ¡Sorpresa! -todos gritamos al unisono llenos de energía entrando a la habitación- ¡Feliz cumpleaños Tomas!

Tomas  tardó en despertaste, al principio se levantó de golpe y sonreía a la vez que se reía al vernos, se hecho nuevamente a la cama y Kevin junto a José se tiraron sobre él obligándolo a levantarse, al ver el pastel Tomás quedó impresionado, nunca pensó que con lo ocupado que estábamos nos haríamos el tiempo para celebrarlo en su día, fuimos todos juntos a la sala, Jonathan fue a la cocina por un instantes y volvió con chocolate caliente para nosotros, el cumpleañero estaba muy entretenido con todos los presentes recibidos, el regalo de su padre fue una consola nueva específicamente la último modelo que habían sacado, se veía demasiado contento y entusiasmado, todos los demás le regalaron ropa y videojuegos como en mi caso, estuve casi dos horas intentando ser disimulada durante estos días preguntándole por sus juegos favoritos y espiar en su cuarto con Kevin y Mario para saber cual de los nombrados eran los que le faltaban. Todo el ambiente se dio de maravilla, salimos a almorzar fuera por la ocasión e incluso aprovechamos de salir a caminar por un parque que estaba cerca para ver los pequeños copos de nieve caer, luego de pasar la tarde tirándonos bolas de nieve fuera volvimos al apartamento y al estar allí Tomas se antojó de palomitas de maíz, no podíamos decirle que no en su día así que Klen y Pedro fueron por ellas el supermercado mientras nosotros nos encargábamos de montar un "cine" en la sala, juntamos dos de los sofás y pusimos un par de almohadas en el suelo para los que quisieran sentarse en ese lugar, fue una tarde tranquila y divertida, tuvimos maratón de películas y comimos palomitas, unas con mantequilla y otras caramelizadas, todos juntos sentados en esa enorme sala en un día de invierno.

El día paso, el joven cumpleañero agradeció a todos por los detalles y por el cariño que recibió, estaba muy feliz por haber pasado su cumpleaños así, fue un buen día después de todo, compartimos todos juntos e hicimos del día una velada inolvidable para Tomas, misión cumplida. Era tarde y ya todos nos estábamos quedando dormidos, a duras penas nos levantamos de nuestros puestos, nos despedimos y cada uno fue a su habitación, solo Tomas y Jose siguieron viendo la película que ya estaba pronta a terminar.

- Vaya, fue un día muy movido, nunca pensé que me la pasaría así -comentaba Kevin mientras entraba a la habitación- me alegro de ver a Tomas así de contento.

- Fue un gran día, todo salió como lo planeamos y de lo mejor -me tiré a la cama- ahora a recargar fuerzas para mañana, hay mucho por hacer.

- Año nuevo...-se recostó junto a mí- Nunca pensé que el tiempo pasaría así, todo pasó muy rápido.

- Eso es cierto, yo... desde que llegué aquí sentí que había días que pasaban lentos y otros que pasaban tan velozmente frente a mi que no me daba tiempo de nada. En casa todos los días pasaban lentamente, puede que sea por el comienzo de año que tuve, pero el tiempo para mi es distinto acá que...allá.

- Será tu primer Año nuevo lejos de tu familia -se giró hacia mí para verme- ¿estás bien con eso?, lo digo porque podrías tener una videollamada con ellos antes.

- Es una buena idea, podría coordinar con Sarah y ver que podríamos hacer -le sonreí- es una buena idea.

- En fin, será mejor que nos vayamos a dormir, ¿has visto la hora? Son las 3 de la mañana y mañana tenemos que levantarnos temprano
....

mi peligrosa obcecionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora