mi peligrosa obcecion

Capitulo:49 Lo que más nos gustaria es tener a la familia cerca

Annie se fue lo más rápido que pudo del cuarto de baño, Charlotte le había dado donde más le dolía y era cierto, no soy completamente culpable de que el beso haya sido tan largo, fue algo que quisimos los dos. Cuando la tensión bajó de mi cuerpo volvimos con los invitados, pero esta vez al gran salón. Al llegar pude ver a un chico agitando su brazo indicándome que vaya a su lado, mire a mi amiga quien me dio una señal de aprobación y seguido fui hasta él.

- Ya llevaba bastante tiempo sin verte -delicadamente me abrazó-.

- Lo lamente, con todo esto de la Boda he tenido que estar en varios sitios y sinceramente sería muy conveniente partirme en dos en este momento.

- Pues es una buena opción -rió- Sabes...te vez muy hermosa, realmente te queda muy bello ese vestido -acaricio disimuladamente mí rostro, por suerte nadie vio-.

- Gracias -me sonrojé- me alegro de que te guste, y hablando de ropa... -me acerqué a su oído para susurrarle- hay un conjunto que quiero que veas en el Hotel, de seguro te encantará.

- Wow, ya estoy deseando ver lo que tienes -sonrió pícaramente-.

La conversación era agradable y me gustaba pasar tiempo con él, sentía que se lo debía ya que no le he prestado mucha atención. Quería mimarlo y provocarle para lo que se venía en la noche, estaba en buen terreno para coquetearle, sin embargo, alguien nos interrumpió.

- ¿Adam? -era una chica atractiva, tenía una figura de muerte con ese vestido dorado que hasta yo me quedé pegada observándola. Parecía conocer a mi novio y se veía muy contenta de verlo- ¿Me recuerdas?, soy la amiga de infancia de Kevin.

-D-Danna -estaba emocionado, al parecer no la veía de hace mucho- por supuesto que me acuerdo de ti, siempre ibas con Kevin a la empresa, tu vivías al otro lado de mi apartamento en ese entonces.

- Me pone muy feliz que me recuerdes, Kevin y tu siempre solían juntarse conmigo, ambos eran como mis hermanos mayores protegiéndome y ayudándome de no meterme en problemas con mis padres -tomó una pausa luego de terminar de hablar, no tardó mucho tiempo en verme a los ojos y darme una tierna sonrisa- ¡Tn felicidades por la Boda!, me alegro mucho de que ese arrogante haya encontrado a una linda chica -hiso una reverencia- por favor cuídalo bien.

- Gracias Danna, eso haré -le correspondí la sonrisa, pero ¿cómo era eso de que esos tres se conocieron?, acaso ¿Adam y Kevin eran amigos antes?, en este momento tenía muchas dudas en mi cabeza-.

Sin darme cuenta todos estaban yendo a sus puestos, por desgracia mi conversación con Adam quedo hasta allí y se fue en compañía de la joven de antes. Ya sentada en la mesa de la familia, el Sr. Jonas se levantó y comenzó a decirnos unas palabras por nuestra unión, lo veía a la cara pero era muy difícil prestarle atención, mi mente estaba en otro sitio y era precisamente por la chica misteriosa, estaba muy metida en mis pensamiento hasta que sentí como una cálida mano sujetó la mía.

- ¿Sucede algo? -me susurró- estás algo distraída.

- No -le imité- es solo que han pasado muchas cosas hoy y tengo mucha información en mi cabeza.

Él comprendió y no insistió, cuando su padre estaba por decir las últimas palabras, una tos hizo eco por todo el lugar, el sonido provino de las mesas del fondo y sabia perfectamente que rubia prepotente se sentaba ahí. Cuando el Sr. Jonas vio de quien se trataba cambio su cara por unos segundos y luego prosiguió, por lo que me habían dicho, al parecer al mi suegro no le cae muy bien Annie y hasta intentaba que Kevin no se juntara con ella, me imagino que debe ser por la vida alocada que lleva ella. En fin, el discurso terminó y la cena dio inicio, la entrada era espectacular y el segundo plato junto con el postre no se quedaban atrás, todos parecían disfrutar la comida incluido mi esposo, quien al probar los platos no dudo en echarse a reír por mi buena elección, al parecer no me tenía fue.