mi peligrosa obcecion

Capitulo: 64 ¿Me engaño?

- Bien, ¿sabes lo que tienen que hacer? -preguntó Mario antes de quitarle el seguro a la puerta del auto-.

- S-Si -dije aun nerviosa por el plan-.

- En ese caso ponte la peluca rubia y los lentes ópticos -me extendió sus manos con los objetos- terminemos rápido con esto.

Tomas y yo salimos del automóvil de Mario, la idea era hacerme pasar por una extranjera que necesitaba algo de orientación respecto al Hotel, mientras que a Tomas, con una peluca negra y lentes oscuros para no ser reconocido como uno de los hijos de la familia Jonas, intentaría hacerse pasar por el chico que estuvo esa noche ocupando ese cuarto de hotel, en conclusión, Adam. Tomé mi bolso y caminé hacia la entrada adelantando a mi compañero, al entrar me giré y fui a recepción en donde encontré a un hombre que me podría ayudar.

- Excuse me, I am from the United States and would like to know the price of one night for the stay at the hotel -gracias a Dios mis padres me contrataron clases intensivas de inglés y coreano cuando joven, manejar tres idiomas como los dos anteriores y el español son un regalo que apreciaré siempre-.

- ¡Oh, a foreigner! Well, miss if you want to know the hotel's costs here is the information you need to know -habló el hombre extendiéndome unas hojas con la información que solicité y más. Al lado del sujeto se encontraba una chica que se veía joven, miré disimuladamente a mi lado y noté como un chico se colocaba junto a mí-.

- Hola, disculpe la molestia, pero me gustaría saber si se me habrá quedado un maletín con unos papeles de empresa aquí. Lo que pasa es que llevo bastante tiempo buscándolo y hace poco recordé que reservé una habitación en este lugar cuando vine a una fiesta, por esa razón está la pequeña posibilidad de que ese maletín tal vez esté aquí. Lamento no haber venido antes a corroborar, el trabajo me tenía muy ocupado.

- No se preocupe señor, es algo que le suele suceder a algunos huéspedes de forma habitual y por lo general nunca vuelven por sus objetos perdidos -sacó un pequeño libro de notas- ¿en qué fecha reservó la habitación y cuál en específico fue?

- Reservé la habitación 310 para el 10 de noviembre.

- Oh, ha pasado mucho -dijo la joven buscando la fecha en el libro- ¡Aquí está!, según esto a usted no se le extravió ningún maletín aquí.

- Vaya, es una lastima ya que era uno de mis últimos lugares en donde buscar.

- Es una pena que no lo halla podido encontrar joven, sin embargo, encontramos en la habitación un collar y un par de aros de su pareja -la chica sonrió- por lo menos algo logró recuperar.

Tragué grueso, el nudo en el pecho se hizo una vez más presente, tenía la esperanza de que hubiese sido un error, pero al parecer todo indicaba lo contrario. Rápidamente le agradecí al hombre que me estaba atendiendo y le dije que antes de tomar una decisión debería consultar con mi pareja, tomé mi bolso de la mesa de recepción y salí del lugar rumbo al auto. Adam me mintió, claramente pasó la noche en el Hotel y nunca canceló su reservación, me sentía fatal, no solo mintió sobre eso sino que también con su compañía, nunca estuvo acompañado de un amigo sino que se encontraba acompañado de una mujer, " ¿qué demonios tenía que estar haciendo Adam con una chica la noche en que nos íbamos a juntar?", todo este tiempo culpándome de todo y sintiéndome horrible cuando realmente él probablemente comenzó la "fiestecita" antes que yo, maldita sea, ¿por qué me vengo enterando de esto hasta ahora?

-  Wowowow -Mario se sorprendió al verme subir al auto de esa manera- ¿Tn descubrieron algo?

- Si... ese imbécil me mintió -estaba muy molesta- nunca estuvo enfermo.

-  ¿Cómo? -estaba inquieto- ¿qué fue lo que encontraron?

- Cosas de mujer, accesorios...

- ¿Accesorios?

- Encontraron un collar y unos aros en el cuarto esa noche -habló Tomas entrando al auto y quitando su peluca- además me comentó que se quedó un paquete de preservativos, pero que era posible que los chicos de la limpieza se lo hayan quedado.

- Por favor... tiene que ser una p*ta broma.

- Bueno, claramente estuvo con una mujer esa noche.

- Te juro Tn que no sé cómo pasó esto. Esta parte de Adam no la conocía, sé que era coqueto, sin embargo, jamás se me pasó por la cabeza que te mentiría para pasar la noche con una chica.

- Definitivamente tengo que hablar con él, tengo un par de preguntas que hacerle antes de decirle lo de Kevin.

- Me parece bien, creo que lo más justo para los dos es hablar del tema.

- Lo malo es que no sé cuando podre juntarme con él, últimamente Adam ha tenido mucho trabajo, primero para navidad y luego para año nuevo.

- Espera, ¿a qué te refieres a que ha estado con mucho trabajo? -parecía extrañado por mi comentario-.

- Eso, ha tenido que adelantar papeleo ya que la empresa se retrasó un poco y es por esa razón que tuvo esa semana llena de cosas por hacer.

- Tn puede que me esté equivocando, pero hasta donde yo sé la empresa dio esa semana más relajada para que los empleados pudiesen estar con sus familias y tener más tiempo para ellos.

- ¿T-Tn? -estaba un poco asustado por mi expresión. Estaba sedienta de respuestas-.

- Te juró que si fue una maldita mentira lo mato.

- En fin, hay una sola forma de saber lo qué ha pasado con el tema de su trabajo.

- ¿Eh?, explícate.

-Klen y Jonathan trabajan en la empresa desde casa, pero la única persona que trabaja directamente allí y que sabe todo lo que ocurre en ese lugar es Pedro.

- En ese caso me imagino cual será nuestro siguiente destino -soltó este último sosteniendo el volante entre sus manos-.

- ¿Estás segura de esto? -me preguntó algo preocupado por mi estado, se notaba que para ambos la situación era suficiente por hoy-.

- Si, si quiero encararlo quiero tener todas las pruebas posibles -bajé mi vista a las joyas que Tomas depositó en mis manos- sé que esto es una prueba contundente, aunque de todas formas quiero esas respuestas de Pedro, necesito saber qué ocurrió.

Todo el ambiente dentro del auto era de tensión y lleno de dudas, los se encontraban chicos ansiosos por el desenlace de esta historia, quería a toda costa conversar esta incógnita con Namjoon para poder estar más segura de querer hablar con Adam lo más pronto posible. El trayecto se me hizo eterno, a través de la ventanilla me dedique a observar la ciudad detenidamente, todos los puestos, los mercados, los edificios y Hoteles mientras diminutos copos de nieve iban cayendo a la calle. Cuando por fin llegamos a nuestro destino un enorme dolor de estomago se apoderó de mí, inhalé profundo, abrí la puerta y exhalé al cerrarla tras de mí.