Capítulo 6

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POV. CHRISTIAN

—NO TE MUEVAS MALDITO MOCOSO — grita el hombre malo mientras me sujeta del brazo.

—YA SUÉLTEME— grito desesperado, quiero correr muy lejos pero no puedo su agarre es fuerte.

—CÁLLATE— siento como su mano impacta en mi rostro tres veces seguidas, el dolor es muy fuerte que mis lagrimas salen de mis ojos. No se que hacer. Ya no soporto esto. Observo como mi madre duerme en el mueble, ella se voltea dándome la espalda. El hombre malo me suelta y sostiene su cinturón en su mano. Intento ponerme de pie para huir, pero el me empuja y caigo sobre la sucia alfombra. Levanta su cinturón y comienza a golpearme muy fuerte.

—DUELE... DETÉNGASE POR FAVOR... —imploro mientras siento el ardor en mi espalda y mejilla.

Me despierto de golpe todo lleno de sudor por causa de la maldita pesadilla. Mi pecho duele. Me levanto de mi cama sabiendo que ya no podré dormir me siento muy mal. ¡Diablos!

Desearía que esto terminará de una vez por todas ya no tengo tranquilidad. Miro el reloj y me doy cuenta de que son las 5:30. Lo mejor es ir a trotar un rato y dejar de pensar en las pesadillas.
He recorrido más de tres kilómetros trotando aun y necesito más. Doy tres vueltas más por el lago y regreso a mi departamento.
Llego a mi habitación y directo a la ducha. Tiempo después salgo listo para desayunar y marcharme a mi empresa. No tengo que perder tiempo, mientras camino por el pasillo mi celular suena y sin mirar el identificador respondo.

—Grey
—Hola buenos días querido —es la voz de Elena, se me hacía raro que me llamará, después de algunos días.
—Buenos días, Elena ¿a qué debo tu llamada? — pregunte con voz ronca mientras bajaba por las escaleras.
—Quería invitarte hoy a mi casa a cenar— propuso en voz baja. — también tengo algo que pedirte y espero me puedas ayudar— añadió un tanto fría.

No tenía idea si debía aceptar su invitación, no quería qué me ofreciera una nueva sumisa. El pensamiento es desconcertante, así que lo descarto inmediatamente. En contra de mi voluntad accedo por cortesía.
—Está bien, ahí estaré a las 9 pm— afirmo
—Muchas gracias querido, te juro que no te arrepentirás — contesta momentos después para colgar el celular.

Eso es lo que yo espero no arrepentirme digo mientras observo mi celular. Suspiro y voy a desayunar.
El día ha sido bastante ajetreado, de reunión en reunión revisando papeles. Además, junto con Ros hemos realizado dos videoconferencias para algunas negociaciones.

Miro por la ventana de mi oficina afuera, un cielo grisáceo promete lluvia y no estoy de humor para recibirla peor recordando la cena que tengo con Elena. Regresó a mi escritorio y continuo con mi trabajo aún tengo algunos pendientes que resolver.

Observo mi reloj y guardo todo salgo de mi oficina, y me dirijo al subterráneo. Taylor me espera con la puerta del auto abierta.
—Buenas noches, señor Grey— saluda
—Buenas noches, Taylor—contesto rápido mientras me acomodo en el asiento— vamos a casa de la señora Lincoln— ordeno.
—De acuerdo señor.
No sé qué clase de favor me pedirá Elena, aunque siento una extraña sensación. Solo espero y sea mi imaginación. Suspiro con resignación. Ya acepté ir y tengo que hacerlo.

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