POV.ANASTASIA
-Anastasia, deberías mantenerte alejada de mí. No soy un buen hombre para ti.
Suspiro.
¿Por qué tuvo que decirme eso? Esas palabras se repiten una y otra vez en mi mente. Siento como si me hubieran dicho que me iba a morir. ¿Por qué me siento tan mal? Me sentí tan desilusionada y molesta por su forma de actuar.
¡Tranquila!... mi pequeña saltamontes esto solo es el inicio de tu vida amorosa... una veces se ríe y otras veces se llora murmura mi subconsciente.
No sabes cuánto te detesto en este momento...
Ya no quería volver a verle la cara a Christian así que salí de la casa del señor Grey, ya no podía seguir allí.
Observo por la ventada del auto y me doy cuenta de que ya estamos llegando a mi casa y en todo el camino no he dicho nada. El auto se detiene y veo la puerta abrirse.
-¿Estas bien Ana te noto diferente? -pregunta Sawyer mientras me bajo del auto.
Finjo mi mejor sonrisa antes de responder.
-Sí, estoy bien solo es cansancio, nada más. -miento y camino a la puerta principal, la abro al entrar solo hay una que otra lampara encendida.
-Bueno entonces que descanses hasta mañana. -dice el dirigiéndose a su habitación.Asiento.
-Hasta mañana Sawyer. -digo subiendo por la escalera.Llego a mi cuarto y me apoyo en la puerta me cubro la cara con las manos. No puedo evitar que se me llenen los ojos de lágrimas. ¿Por qué lloro?
Me dejo caer al suelo, enfadada conmigo misma por esta absurda reacción.
Estoy llorando la pérdida de algo que nunca he tenido.-Maldita sea -murmuro con enojo mientras paso mi mano por mi mejilla
Qué ridículo. Lamentando la pérdida de algo que nunca ha existido mis esperanzas frustradas y mis expectativas destrozadas. Nunca me he expuesto y tuvo que ser con él.
Me odio por ser una tonta bien estaba yo sin sentir nada por nadie y ahora a la primera me siento tan mal.
¡Basta! ¡Basta ya!, me grito a mí misma Olvídalo... ¡Ahora mismo! Y deja ya de auto compadecerte, de castigarte y toda esta mierda.
Me levanto del suelo y me voy a la ducha a relajarme después de un largo baño me cambio y me meto a la cama a descansar mañana es otro día.
Me cubro muy bien con la cobija y acomodo mi almohada es mejor olvidar este mal momento.
Sería bueno si pudiéramos poner el dolor en un sobre... y devolvérselo al remitente. Y con ese pensamiento me dejo llevar por los brazos de Morfeo.
Al día siguiente.
Siento como el sol me pega en la cara me levanto para luego frotar mis ojos. Salgo de la cama dirigiendo a la ducha para darme un baño rápido, en 5 minutos esto lista para ir a desayunar y retirarme a la empresa.
Me abro paso por los pasillos de la empresa, llego a mi oficina y me acomodo en la silla.-Buenos días, señorita Steele- saluda mi secretaria ingresando.
La miro y le sonrio.
-Buenos días, Jhanna ¿dime que tengo para hoy en la agenda? -pregunto
-Tiene tres reuniones programadas, y una videoconferencia nada más señorita.Asiento.
-Gracias, me podrías traer un té por favor Jhanna
-Sí, con permiso
Me concentro en mi trabajo en eso el sonido de mi teléfono me entretiene observo el identificador y es Kate así que decido contestar.-Hola Ana ¿Cómo estás? -saluda muy feliz.
-Hola, Kate. Estoy Bien ¿dime que sucede? -pregunto mientras me levanto para acercarme al ventanal.
-No sucede nada, solo quería invitarte un par de copas, hoy en la noche con Mia anímate si - murmura melosa, me pongo a pensar y seguramente me emborrachare talvez eso necesite no pierdo nada al final.-Si - afirmo enérgica -¿a qué hora? -pregunto
-A las 9pm nos vemos en el bar FIFTY que tal- dice emocionadaSonrio.
-Si me parece bien- murmuro -entonces hasta la noche- me despido y corto la llamada.La tarde se pasa volando me entretuve en una y otra cosa, miro mi reloj y son las 8:40pm y justamente ahora me estoy dirigiendo al bar. Le comenté a Sawyer que quería venir sola no estuvo muy convencido así que le dije que no demoraría y que tampoco tomaría más de la cuenta, pero aun así el decidió traerme. Llego al bar y Sawyer me entrega las llaves del auto, el llamo a otro guardaespaldas para que lo recoja.
-Si vez que no puedes conducir, no dudes en llamarme ¿entendiste? a y otra cosa nada de conversar con gente extraña- murmura mientras niega moviendo la cabeza. Me siento como una niña de prescolar que de todo le advierten.
-Si hermano mayor entendí todo, vete tranquilo- sonrio.
Niega.
-Espero así sea- dice esta vez ya entrando al auto.
Con las chicas ya hemos bailado y creo que llevo como 9 chupitos de tequila ya me siento mareada, observo a Kate que está hablando por celular seguramente es con Elliot ella desde que lo conoció no se despega para casi nada. Yo sigo bailando con Mia, ya tenía tiempo que no bebía y tampoco bailaba.
Nos sentamos en nuestro apartado y seguimos tomando.
-¡Más bebida, Ana! -grita Kate animándome. Ya no puedo beber mas así que pienso salir un momento, necesito aire el ruido me está empezando a abrumar, pero antes debo avisarle a Kate.
Me acerco a su oreja y le susurro.
-Kate, creo que saldré un momento a tomar el aire.
-Está bien Ana, pero no demores- murmura moviendo su cabeza al son de la música.
-De acuerdo.
Me levanto de mi puesto y me abro paso por la gente para salir, la cabeza me da vueltas y me siento inestable. Soy consciente de lo borracha que estoy.
Mientras me mantengo de pie en la acera siento que alguien me abraza con una mano y me mantiene pegada a él, y con la otra me agarra de la barbilla y me levanta la cara. ¿Qué intenta hacer?¿Va a besarme?
-No, no, no para...No. -le empujo, pero él es persistente así que lo golpeo y se dobla del dolor intento huir, pero justo cuando volteo el me agarra muy fuerte de mi brazo.
-¿A dónde vas mamacita? -murmura el tipo todo baboso- Te are pagar el golpe que me diste -masculla e intenta besarme.
-No, no ya suéltame- digo mientras intento liberarme.
Porque tiene que pasarme esto justo a mí.
-Creo que la señorita ha dicho que no- dice la voz de alguien que llega y empuja al tipo todo pasa muy rápido que me desmorono siento que me sostienen y ya no se más todo para mí se ha vuelto oscuro.
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Cree en mí
RomanceLa vida te enseña a seguir, adelante sin importar las circunstancias, Anastasia a pesar de ser, tan joven es dueña de una gran fortuna a ella no le interesa el amor es alguien que se dedica a su trabajo, pero el destino le tiene una sorpresa al enco...