Capítulo 73

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POV.CHRISTIAN 
 

Estoy revisando unas hojas de cálculos ayer la pase muy bien con Anastasia, después del incidente de la mañana todo quedo muy bien y me pude disculpar con ella. La mañana se pasa muy rápido le estuve llamando a Anastasia, pero su celular esta apagado es algo muy raro en ella.

Decidí llamar a su secretaria y me supo manifestar que ella hoy no había ido a trabajar, ya que tenía cosas pendientes que hacer. Entonces ahora he decidido que iré a su casa y le daré una sorpresa. Mañana tengo que asistir a un evento, me resulta muy aburrido, pero supe que Anastasia, también asistirá y eso me alegro mucho.

Guardo todas mis cosas y me encamino al elevador es hora de ver a mi nena, al llegar al estacionamiento Taylor me espera con la puerta del carro abierta.

—Señor Grey

—Taylor —respondo a su saludo y rápidamente me acomodo en el asiento de atrás del auto.

—¿A dónde lo llevo señor?

—A la casa de la señorita Steele, por favor, Taylor

Asiente.

—Claro como usted diga señor.

Taylor se abre paso por la carretera y conduce. Pienso en todos los buenos momentos que he tenido con Anastasia, su sonrisa su forma de ser todo de ella me gusta. Es una mujer muy agradable. Ella me hace feliz no vería mi vida sin ella.

¡Hay Anastasia mi destino está en tus manos! ¡Te pertenezco! No me podría hacer a la idea de compartirla con alguien más. Pienso pedirle que busque un método anticonceptivo ya estoy harto de tener que usar los putos condones. Quiero hacerla mía, pero que no haya ninguna barrera de por medio.

Observo que estamos ya cerca de llegar a su casa tengo planeado en pedirle a Taylor que se regrese a Escala y que en la noche me venga a recoger.

Miro que estaciona el vehículo, pero antes de salir le informó lo que he decidido.

—Puedes regresar a casa yo te llamo para que me vengas a ver— le digo ya bajando del carro

—Está bien señor Grey— responde, observo el carro irse y me dirijo a la puerta toco el timbre y Lupita sale a recibirme.

—Buenas tardes, señora Lupe ¿Dónde está Anastasia? —preguntó

—Buenas tardes joven Grey, Anastasia no tarda en llegar fue a retirar su vestido para la gala de mañana, si gusta la puede esperar —me dice ella muy amablemente.

Asiento.

—Claro podría esperarla en su habitación, solo no le diga que llegue quiero darle una sorpresa— susurro.

Sonríe y asiente.

—Claro siga nomas— Me dirijo a las escaleras y subo a su habitación. Ingreso y cierro la puerta a mis espaldas.

He estado en esta habitación algunas veces, pero nunca me había fijado bien en ella. Me doy cuenta de que tiene un estante con muchos libros, también hay un cuadro hermoso encima de la cabecera de la cama.

Es una habitación muy acogedora sigo observando más su habitación, esperó que no demore mucho Anastasia, me aburre tener que esperar. Me dirijo a su baño voy a arreglar mi cabello es un caso creo que ya lo tengo muy largo. Al entrar abro el grifo de agua paso mis manos y me las coloco en mi cabeza acomodando mi cabello.

Cierro el grifo para salir, pero algo llama mi atención hay unas cajas pequeñas. Tomo una de las cajas y veo la etiqueta. No puede ser cierto es una prueba de embarazo. Leo las instrucciones y lo único que me da a entender es que si llega a ver dos rayar marcadas están quieren decir que es positivo.

Reviso la otra prueba todas las dos dan positivo. Por eso ayer me pregunto si tenía planeado tener hijos. No puede ser cierto porque me haces esto Anastasia. Siento enojo, frustración. Salgo del baño con las dos pruebas de embarazo. La puerta se abre y es Anastasia quien llega.

—¡Christian!

La observo fijamente.

—Me puedes explicar que mierda es esto —gruño irritado mostrándole las pruebas de embarazo a ella. Me mira a los ojos con pánico. Espero su respuesta.

—Estoy embarazada. —dice ella me quedo inmóvil no puede ser cierto, es mentira.

—¿Qué? — pregunto esperando que me diga otra cosa.

—Estoy embarazada Christian— vuelve a decir lo mismo, no era un sueño todo es real.

—¿Cómo es posible? —pero que ridícula pregunta hago.

Ella solo me mira y es como que me digiera ¿Cómo crees tú? Mi postura cambia y le dedico una mirada dura.

Oh mierda, no me puede estar pasando esto a mí. No ahora.

—Lo siento — murmura con la mirada agachada como puede ser posible acaso no conoce los métodos anticonceptivos.
Grey, Grey eres o te haces acaso tú no eres el encargado del condón o acaso ya se te olvido... o no espera la calentura te hiso pendejo y no te lo pusiste, capaz lo rompiste ya que eres un salvaje en la cama me dice mi entrometido subconsciente.

—¿Lo sientes? ¿Acaso lo hiciste al propósito dime? —reclamo enojado

Niega

—Claro que no— responde sorprendida por lo que dije.

La miro a los ojos. Estoy muy enojado. Como pudo suceder esto.

—¿Me crees estúpido? Dime acaso me quieres amarrar con un embarazo —el enojo hace que le diga palabras hirientes. Y sé que me arrepentiré después.

—¡No te atrevas a volver a decir eso en tu vida porque no es verdad! —grita Anastasia con lágrimas bajando por sus mejillas

—¡A la mierda! —grito

—Basta ya... —dice llorando

—¿Dime crees que yo estoy listo para ser padre? te dije que no tenía planes de tener hijos no aún.

—Se que no estamos listos para esto, pero sé que seremos unos maravillosos padres Christian. —dice ella, piensa que es fácil tener un hijo todo es pañales, malas noches, biberones, vomito.

—¿Cómo lo sabes? —le gruño

—Solo lo sé si, nadie nace sabiendo como ser un padre o una madre— responde firme.

—A la mierda con esto —grito alzando mis manos en señal de derrota no pienso seguir con esto.

—Si tanto es un problema para ti esto, no te preocupes no te pediré que te hagas responsable— dice mientras su lagrimas bajan por sus mejillas.

—No tu no entiendes —grito y me abro paso por su lado y salgo de su habitación.

—¡Christian! —escucho que me grita hago caso omiso a su llamado llego al vestíbulo, y salgo por la puerta.

Pienso llamar a Taylor, pero prefiero caminar necesito tranquilizarme, no sé porque le dije todo eso. Ahora la culpa está haciendo mella en mí.

Esto no debió ocurrir no de esta forma, que clase de padre seré si mi niñez fue una mierda, con la puta adicta al crac y el proxeneta. Siento miedo de lo que pueda pasar.

Siento miedo de no ser lo que Ana, espera un buen padre para él bebe. Maldita sea mi pasado. Estoy aterrado ante esta responsabilidad. Dime Grey te crees hombre por dejar a la mujer que dices amar, sola llorando y sintiéndose de lo peor solo porque está embarazada dice mi subconsciente enojado.

Él tiene razón no debí dejarla sola, pero son muchos sentimientos encontrados debo organizar mis pensamientos y si seguía en su casa solo diría más estupideces de las que ya le dije. Y ya me siento mal por las palabras que le grite ¡Maldición ¡

Hay un tipo de tristeza que no me hace llorar. Es como una pena que me vacía por dentro y me deja pensando en todo y en nada a la vez, como si ya fuera yo, es como si me hubieran robado una parte del alma. ¡Joder! nena perdóname, volví a hacerte sufrir y llorar, yo lo lamento tanto.

Cree en míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora