CAPÍTULO 8

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Lee Donghae

—¿Cuál era la bendita urgencia?— dije luego de entrar y tirar la puerta detrás de mi.

—¿Urgencia? Nadie te dijo que era urgente— dijo Leeteuk sentándose en el sillón.

—Eunhyuk me llamo y dijo que era urgente.

—Yo nunca dije eso— protesto.

—Entonces ¿que pretendes engañándome?

—Mejor di que pretendes tú con esa chica, sabes perfectamente que estas jugando con fuego.

—¿Jugando con fuego? ¿De que están hablando?— pregunto Leeteuk confundido.

—Donghae esta coqueteando con la chica que presencio el asalto.

—¿Y quién es ella? Sí se puede saber.

—Jieun— dijimos los dos al mismo tiempo.

—¡¿Que?! Te volviste loco?!— dijo Leeteuk sumamente alterado y sorprendido a la ves.

—¿Por que me volvería loco? Estoy confirmando que no nos haya reconocido.

—Es demasiado arriesgado— añadió Eunhyuk negando con su cabeza de lado a lado.

Lee Jieun

Estaba sentada en el sofá, embobada como una tonta. Aun sentía ese hormiguillo en mi estomago. Ese hombre me puso sumamente nerviosa, ni siquiera Ji Woon me hizo sentir así. Debo de estar soñando, esto no es real. Nada en esta noche puede ser real. Luego de tanto batallar y batallar con aquella escena en mi cabeza una y otra ves. Fui a ducharme y luego irme a la cama. Después de todo mañana tendría que enfrentar a mis jefes nuevamente. No salgo de una para meterme en otra.

—¡Ji, ya me levante!— gritaba Hanah detrás de la puerta.

Se me dificulto levantarme. La noche había sido tan pesada que no podía casi ni abrir mis ojos.

—¡Ji!— grito aun más alto.

—Ya, ya voy— hable como si ella me pudiera escuchar.

—¡Ji, tengo escuela!

—¡Ya lo entendí!— le dije luego de abrir la puerta—. Dame unos segundos, ve a desayunar.

—Esta bien.

Me duche lo mas rápido que pude, me vestí y luego salí buscando mi bolsa. No estaba tarde para llevar a Hanah a la escuela, puesto que Chae Yeon nos llevaría a las dos. Hanah ya desayunada, le ordene tomar su bulto  para salir. Pasado unos segundos, ya nos encontrábamos de camino hacia al escuela de Hanah, quiene estaba impaciente por llegar.

—Date prisa Yeon, pareces una anciana manejando.

—No parezco ninguna "anciana" niña— le respondió Chae Yeon molesta por su comentario mientras manejada.

—Anciana— volvió a repetir por segunda ves.

—Hanah, basta por favor.

—Que maneje rápido, así como las películas de Rápido y Furiosos.

Realmente me causo mucha risa lo que acaba de decir. ¿Desde cuándo esta niña ve esas películas? Yo no pongo esas películas. Tendré que velarla mejor.

—Hanah, una pregunta. ¿Por que tanta prisa en llegar a al escuela? Nunca llevas prisa, ¿por que hoy quieres llegar más rápido?

—No te puedo decir.

—¿Como que no puedes decirle?— pregunto Chae Yeon confundida—. Se supone que le respondas todo los que se te pregunta.

—Si, pero a ti no— escuche cuando emitir sonido con su lengua.

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