Prescripción 25: Empty car.

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—Uhm... Bienvenido —BamBam se inclinó un poco en el sillón al ver a Yugyeom entrar al departamento y saludó, aún se sentía un poco avergonzado de hacer aquello cada noche.

—¿No deberías estar durmiendo? —preguntó el coreano mientras sacaba sus zapatos y caminaba hasta la sala— Es más de media noche, debes trabajar mañana —se sentó al lado del tailandés y éste sonrió levemente.

—Perdí la noción del tiempo —se encogió de hombros mientras le enseñaba su laptop con algunos asuntos del trabajo y sonreía medianamente; era mentira, la verdad es que no podía dormir.

Había pasado más de dos semanas desde que BamBam llegó al departamento del coreano, era extraño, querían llevar las cosas a paso lento, pero eso era un poco difícil con ambos quedándose en el mismo lugar. Yugyeom le había pedido al mayor que se quedara con él al ver lo paranoico que se había puesto al poner un pie en su propio departamento, el tailandés se sentía extremadamente inseguro de estar allí solo y tenía miedo de que Jackson o alguno de sus hombres se apareciera en algún momento, estaba simplemente demasiado aterrado de vivir en su propia casa, así que el coreano dejó que se quedara con él hasta que se sintiese seguro de poder pasar más de una noche en su departamento sin creer que sería secuestrado por su ex. Sinceramente, aquella petición también hacía sentir más tranquilo a Yugyeom, y la verdad es que él disfrutaba cada segundo con BamBam a su lado.

—¿Estás bien? —preguntó el menor al ver que seguía viendo a un punto en el piso— ¿Tienes fiebre? —puso su mano en la frente de éste pero él negó con su cabeza.

—Sólo estoy un poco cansado —asintió y Yugyeom hizo una mueca.

—Una de las cosas que más me gustaba de tí cuando éramos niños era esa extraña costumbre que tenías al mentir —llevó la mano que tenía en la frente del tailandés hacia su cabello y lo acarició—. Solías desviar tu mirada y parpadear varias veces justo cuando decías la mentira... así como ahora  —sonrió y BamBam suspiró—, ¿Qué ocurre?

—No podía dormir porque... —relamió sus labios, que se sentían algo secos, y volvió a suspirar— Uno de los hombres de Jackson, su chófer personal... —miró al coreano— ha estado frecuentando la calle donde trabajo... Sé que he estado algo paranoico, pero... ¿Qué? —se detuvo al ver la expresión en el rostro del menor.

—Dime, ¿es un sujeto de mediana edad, anteojos oscuros, traje elegante y maneja un deportivo negro? —preguntó y el mayor asintió— Sí, pensé que estaba enloqueciendo, pero ese sujeto se estaciona frente a mí todos los días en el hospital... —suspiró— Ese puesto pertenecía a uno de los superiores en el hospital pero hace una semana que dejó el país para ir a trabajar en otro lado... Me parecía realmente extraño...

BamBam titubeó un poco antes de apretar sus puños y morder su labio fuertemente; no estaba siendo paranoico entonces, Jackson sí lo estaba siguiendo... No sólo a él, también a Yugyeom, y eso lo ponía más nervioso.

—No pasará nada —Yugyeom acarició su cabello nuevamente y el tailandés volvio a mirarlo—. Prometí que te cuidaría, ¿recuerdas?

—Tardaste un poco en cumplir con eso —BamBam rio bajo—. Unos diecisiete años.

—Pero lo hice —Yugyeom sonrió y se acercó al rostro del mayor— y seguiré haciéndolo... —besó su mejilla rápidamente— Vamos a dormir —levantó al más bajo y se lo llevó a la habitación.

...

BamBam mordió su labio mientras se recostaba de la pared y terminaba de tomar su vaso de agua. Se había levantado de su escritorio porque tenía sed y cometió el error de, una vez más, mirar por la ventana, de nuevo estaba allí, el maldito chófer de Jackson realmente estaba vigilándolo y sus nervios, más que sólo estar de punta, estaban desbordando, explotando dentro de él, volviéndolo loco lentamente y torturándolo. BamBam estaba al borde de un colapso.

Rice Ball (GOT7 - YugBam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora