3. Otoño.

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Rin: (Con una sonrisa coloca el tazón sobre la mesa) ¡¡Aaah!! Comí demasiado.

Sesshomaru: (Sólo la ha acompañado. Ahora se pone de pie) Bien, entonces es hora de marcharnos.

Bestia Escamosa: (Haciendo una reverencia) En cuanto tengamos todo listo lo llevaremos a su palacio Lord Sesshomaru.

Sesshomaru: En tres semanas exactamente convocaré a una reunión. Quiero todo para entonces.

Bestia Escamosa: ¡Perfecto! Entonces, en tres semanas debemos tener listo su encargo mi Lord.

Sesshomaru: (Da media vuelta) ¡Vámonos Rin!

Rin: (Comiendo algunas fresas. Estaba llena pero eran muy dulces.) ¡Si! Le agradezco mucho por todas sus atenciones señor Bestia Escamosa.

Bestia Escamosa: ¡Oh fue un grato honor servirle señorita! Espero a su futuro esposo le agrade todo lo que usted ha elegido... Debe confiar ciegamente en su buen gusto.

Rin: (Sonríe) Si... No creo que se oponga jejeje.

Bestia Escamosa: (Le entrega un pequeño costal con fresas.) Lleve más, por favor.

Rin: ¡¡Oh!! ¡¡Muchas gracias!!

Bestia Escamosa: Debo agradecerle yo por depositar su confianza en nosotros. Espero en esa reunión a la cual convocará nuestro Lord, conocer a su afortunado futuro esposo.. Debe ser tan gentil, tan amable y tan dulce como usted.

Sesshomaru: Hmp.

Rin: (Al ver la expresión de disgusto de Sesshomaru) Jajajajaja siii, creo que ahí estará mi tierno prometido.

No tenía por qué seguir escuchando esa conversación... Sesshomaru se aleja varios metros para esperar a Rin... Al parecer había entablado amistad con esa Bestia... Luego de que él le prometiera llevarle más frutas dulces en su próxima visita al palacio, al fin se despiden... Sesshomaru espera que Rin se acerque para tomarla en sus brazos y emprender el vuelo, pero ella no lo hace, no se acerca lo suficiente.. Tras cuestionarla, ella tiene una "extraña" petición.

Rin: Señor Sesshomaru... Si seguimos a pie, ¿En cuánto tiempo llegaríamos a su palacio?

Sesshomaru: (Voltea a ver la posición del sol) No lo sé Rin, en unas horas oscurecerá... Quizá en... Dos días.

Rin: (Decepcionada, agacha su rostro) Oh..

Sesshomaru: ¿Por qué?

Rin: Bueno, es que.. (Suspira) Me hubiera gustado que viajáramos a pie, como en los viejos tiempos.

Sesshomaru: Rin, Ah-Un no viene con nosotros. Te cansarás.

Rin: (Sonríe, pero es notoria su tristeza) Lo sé... Será.. En otra ocasión.

Sesshomaru: (Se acerca y toma su mentón) Te propongo algo.

Rin: (Curiosa) ¿Si?

Sesshomaru: Caminemos un rato y cuando te sientas cansada te llevaré al palacio.

Entonces su mente empieza a imaginar, ambos, tomados de la mano, caminando por un verde senderos, con muchas flores y mariposas revoloteando alrededor.. Le es imposible no sonreír con entusiasmo.

Rin: ¡Está bien!

Sesshomaru: (Extiende su mano) Dame tu equipaje.

Rin sonríe, él va a ayudarla a cargar su equipaje. Es todo un caballero... Pero a punto de entregárselo, recuerda lo que lleva ahí... Además de dos kimonos y algunos accesorios, lleva el extraño, transparente y pequeño kimono que le regaló Aome, y además el aceite que elaboró con Sango. Sería extraño e incómodo que él llevase cargando algo así. Sin poder evitarlo se sonroja.

Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 4.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora