Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 4.

60. Necesito un general.

Aki lleva a Shunran a una habitación. La pobre está tan borracha que le causa gracia... Ella le pide quedarse a su lado hasta que se quede dormida.. No protesta por ello, con gusto lo hace. Deja una cubeta a su lado pues está seguro que al despertar vomitará. Le recuerda un poco a Keiko cuando se embriagó por primera vez y aseguraba que iba a morir.. ¿Cómo estará ahora?

Antes de marcharse acaricia su rostro.. Era tan parecida a Ami.. Y Toran era la viva imagen de Kyo, pero con cabello azul. Abriga a la más pequeña del clan con una sábana blanca y se retira de ahí. Aprovechará el momento para ir a ver a Keiko, seguro con este ajetreo la pobre ha estado sola todo el día.

Desvía su camino, pero alguien lo alcanza.

Soldado: ¡¡¡Comandante!!! Lady Irasue lo busca.

Aki: ¿Para qué?

Soldado: No lo sé. Pero quiere que esté presente.

Aki: Bien...

Voltea a ver en dirección a la enfermería.. Más tarde irá a verla. Quizá Keiko aún no despierta, la herida requería un par de días más para cerrar por completo.

Aki: Lady Irasue.

Irasue: Bingo, me retiro a descansar. Cuando esto termine di cualquier pretexto.

Aki: Si Lady. 

Suspira frustrado. Ahora debía permanecer ahí, en espera de que esta "reunión" terminara... Al cabo de un par de minutos, Takeshi termina su participación y se acerca al comandante. Parece buscar a alguien con la mirada.

Aki: ¿Qué pasa?

Takeshi: ¿Y Lady Irasue?

Aki: (Era su oportunidad de molestarlo) Fue a su habitación. ¿Quieres ir tras ella?

Takeshi: (Sonrojado) ¡Noo!

Aki: Anda, yo le digo al Lord que te pedí ir por algo.

Takeshi: (Apenado) ¡No! No tengo por qué seguirla.

Aki: Pues... Todos están acá distraídos. Podrías ir y alegrarle la noche.

Takeshi: (Demasiado avergonzado) ¡¡Comandante!!

Aki: Jajajajajajaja. Si cambias de opinión....

Takeshi: Hmp.

Con un gesto serio el muchacho se retira y Aki lo ve con gracia.. Definitivamente, molestarlo iba a ser un muy buen pasatiempo.. ¡Ojalá Keiko estuviera ahí! Ella sería más explícita en sus comentarios y seguro el pobre Takeshi haría un hueco en la tierra para meter su cabeza.

La extraña.

El tiempo pasa, y al anochecer, todos se retiran a un lugar asignado... Rin se siente muy cansada... Sesshomaru al ver sus ojitos somnolientos le indica que se retire a descansar, él se hará cargo de lo demás, pero ella se niega.

Casi una hora después, cuando todos se han retirado, Rin le pide quedarse un rato ahí, con ella, viendo las estrellas.

Rin: Faltan seis días señor Sesshomaru.

Sesshomaru: (Acaricia su rostro) Y nunca seis días parecieron tan distantes.

Rin: ¿Cree usted que Rin sea una buena esposa?

Sesshomaru: No tengo duda alguna.

Rin: ¿Y seré buena gobernante?

Sesshomaru: No tendrías al imperio más extenso del país en espera de ello si no fuera así.