Con el señor Sesshomaru para siempre. PARTE 4.

4. Ya no es una niña.

Bajo la sombra de ese frondoso árbol, contemplando ese bello atardecer, ella eleva su mirada para encontrarse con esos hermosos ojos color miel... No hace falta pronunciar palabra alguna, él se acerca a ella y la besa con ternura... Estar sentada sobre sus piernas, rodeada por sus fuertes brazos, inhalando esa fragancia masculina, instintivamente acaricia su pecho, su cuello, su mejilla, sus frágiles dedos se pierden entre esa cabellera plateada... 

Se asombra un poco... No se dio cuenta en que momento se ha recostado en el suelo con su futuro esposo encima de ella... No importa, sólo desea disfrutar de las agradables sensaciones que le produce ese contacto... Mientras la besa, acaricia suavemente su cuerpo... ¿En qué momento él desató sus ropas?... Su cuerpo ha quedado expuesto ante él... Siente sus manos en sus hombros, sobre sus pechos, sus cálidos besos sobre su cuello... Esos besos descienden, besan sus senos, su abdomen... ¡¡Se siente tan real!!

No desea apartarse nunca de este momento... Él le había expresado su deseo de esperar un poco más, hasta que fueran marido y mujer.. Pero es imposible controlar las sensaciones que siente ahora... Sus miradas se conectan un momento, ella le suplica continuar y él sonríe al obtener su aprobación... Cierra sus ojos nuevamente al sentir su cálido aliento sobre su abdomen.

Una voz femenina la obliga a salir de ese mundo de sueños.... Muy sorprendida, Rin abre sus ojos.. No ve a Sesshomaru junto a ella... Algo desconcertada, le cuesta un poco moverse... Desesperadamente voltea a ver a todos lados, está en su habitación, Katia se acerca a ella.. Luchando contra las sábanas, al fin libera sus manos.... ¿Fue un sueño?.. Él no está con ella, pero su cuerpo ha reaccionado tal cual ocurría en esa hermosa ilusión... Se siente muy apenada, como si esa adorable mujer pudiera saber lo que ocurría en sus sueños.

Rin: ¡Katia! Buen día. ¿En qué momento llegué aquí? ¿Dónde está el señor Sesshomaru?

Katia: (Un poco sorprendida al verla tan consternada) Tranquila Rin.. Pero estuvieron tres días juntos.. ¿Tan rápido lo empiezas a extrañar?

Rin: (Sonrojada) ¿Como? Es que... Bueno... Estábamos en otro lugar... No me di cuenta cuando llegamos aquí.

Katia: Anoche cuando él llegó te traía en brazos, estabas dormida.

Rin: (Suspira, se siente triste, le hubiera gustado sentir como él la llevaba entre sus brazos) Debe ser porque estaba muy cansada, incluso ahora me duelen un poco los pies.

Sentada sobre el futón, bosteza, levanta sus manos hacia arriba con la intención de estirar su cuerpo, pero al ver por la ventana se da cuenta que es tarde. Rápidamente se pone de pie y se apresura a bañarse. Sale envuelta en una toalla, no ha elegido su ropa... A Sesshomaru no le gusta esperar y teme hacerlo enojar por su demora... Por fortuna Katia ya ha elegido por ella y le ha dejado ropa y accesorios sobre el tocador... Por alguna extraña razón ella ya se ha retirado, no le dijo nada al respecto.

---Mientras Rin se bañaba---

Katia doblaba las sábanas que durante la noche cobijaron a la joven humana, son cuatro, seguramente fue Sesshomaru quien la cubrió y la envolvió de esa manera. De repente, la puerta de la habitación se abre, lentamente, con cautela, tratando de no hacer ruido... Se trata justamente de Sesshomaru. Es tarde y Katia cree que él está molesto por la ausencia de Rin.

Katia: (Busca disculparse) Sesshomaru.. Rin no tarda en salir.

Sesshomaru: (Susurra) Lo sé. (Se acerca a ella y la observa fijamente, luce demasiado misterioso).

Katia: ¿Que ocurre?

Sesshomaru: (Habla en voz baja). Nada. Reúne a todos en la entrada principal. Después de que Rin desayune daré un aviso.