Ataraxia | Karmaland | Terminada

C a p í t u l o 2 2

|| Todas las desgracias de Karmaland ocurren a causa del cabrón de Triple 7, no lo olviden.||

Tenemos miedo.

Por naturaleza, el ser humano está diseñado para estar alerta, sobrevivir. Meros animales con consciencia.

Polvo. Eso somos.

Y vaya que el Alcalde se siente de esa forma. Juguetea con su cabello, sacando a la luz aquél nerviosismo que le carcome el alma y la mente.

Lolito es muchas cosas. Puede que demuestre su psicópata ser asesinando sádicamente a sus víctimas, o que se comporte de manera cínica frente a muchos, sí, puede ser un gobernante corrupto y todo lo que quieran.

Sin embargo, como si se tratara de un crío de doce años, toda su persona se desbarata frente al mismo hombre de siempre.

"Estás aquí porque te lo recomendó Auron."

"Es mejor aclarar todo."

"Fue idea de Auron, punto."

"pUNTO."

Intenta mentirse, repitiendo palabras mentales que nunca lograrán convencerlo de que simplemente está obedeciendo a un consejo de su psicólogo de confianza. ¡Oh! Por supuesto que no.

Pudo haberle dicho que le quería lejísimos de él, pero Mangel siempre le taladraría la memoria, insistentemente, atormentado sus recuerdos con masoquista efigie.

《No necesitamos más enemigos, Lolito. Habla con Rogel, seguro se arreglan.》

Jodido Auron y jodido él que le obedece.

Acumula tanto aire en sus pulmones, que se ha imaginado reventando. Ahí, en el pórtico de Mahe.
No es buena idea que Rogel lo vea con las tripas al aire, para nada.

Se obliga a exhalar rápidamente cuando aquél ridículo y exagerado escenario se forma en su cabeza.

Entonces, ya sin excusas para no llevar a cabo su cometido, resignado ante la idea de volver a encontrarse con Mango Rolo, toca la puerta de su casa.
Golpeteos pausados, pero persistentes.
Los lobos ladran dentro de aquél hogar. Se escucha un "Calla, Chupeta, seguro e' Rubiuh".

Lolo no puede ni quiere evitar que la sangre le hierva ante la repentina mención de ese tipo. Que asco que da.
Finje mantener la compostura cuando el pelinegro abre la puerta. Traía una sonrisa en el rostro.

Traía.
Ese no es Doblas.

Lolito carraspea.

ㅡ¿Yepa...?

○●○

Jimmy se acurruca como puede en el pequeño regazo de su dueño.
Es gracioso. El animal es mucho más grande que Alex.
Emite un sonido de tranquilidad al recibir caricias del joven policía. Pronto, se ha dormido.

Ale trata de evitar ignorar el hecho de que su hijo le está bloqueando la circulación de la sangre de sus piernas. Suspira.

Sus días se perciben solitarios.

Me corrijo.

Él está sólo.

No hay amigos. No hay pareja.
¿Tiene, acaso, compañía? ¿Alguien que sea su soporte emocional?
Exacto. No.
Porque siempre ha tenido que conformarse con las sobras. Esperando cual perro a que caigan migajas de la mesa.