Ataraxia | Karmaland | Terminada

E p í l o g o - F i n a l

||Abajo va a haber una nota. No me voy a extender mucho ahí, pero tengo anuncios y tal. A lo largo de la historia les prometí varias cosas y estoy dispuesta a cumplirlas.||
||El capítulo 88 les ayudará si gustan. ||

ㅡNo parece que haya escándalo afuera. Fargan, deberíamos salir a ver.

ㅡVale, si tú lo dices...

○●○

Borja sonríe algo incómodo, preguntándose cuándo fue la última vez que estuvo a punto de hablar entre tanta gente.
Se responde a sí mismo, alegando las elecciones, procurando no sentir nada porque todo ha sido un caso perdido hasta ahora.

Los ojos de la multitud están pendientes en ellos, esperando que cumplan las palabras que el día de ayer Vegetta había soltado con tanto ímpetu. Todos están listos para sacarle las tripas a Auron, ¡claro que sí! ¡Wuju!

Además, los héroes han tardado en llegar a la propia convocatoria. Habría estrellas en el cielo de no ser porque las nubes son bastante espesas. Podría decirse que la gente está algo ansiosa.

Las lámparas y antorchas dibujan el camino hacia la zona central del pueblo. No obstante, hay zonas cuya luminosidad se reduce al tenue halo que dejan los objetos que usan para alumbrar, por causa de la lejanía de los mismos. El frío apremia y no sería raro que muchos empezaran a irse a casa.

Es mucho más alto el sentido del respeto que el de la violencia. Sí, el transcurso de todo ha sido tranquilo. Sin malos augurios o sensaciones vanas.
Samuel le indica a los reunidos que los acompañen hasta el cartel de Karmaland, no muy lejos de allí. No hay protestas al respecto.
Los muchachos apenas intercambian un par de palabras, también están nerviosos.

En fin.

Aquí va todo.

Borja da un par de aplausos con sus manos, internándose al medio de todos, teniendo a sus amigos casi al frente y a los demás, rodeándolo pot todos lados. Al asegurarse de que le oyen bien, carraspea.

ㅡEh. Hace buena noche, ¿no? Je.ㅡ truena sus dedos, asustándose por el sonido que su misma acción ha provocadoㅡ En fin. ¡Bueno! Llevaba tiempo sin ver tantos rostros. Es... extraño. Hoy no vamos a levantar los cuchillos contra nadie.ㅡ el castaño amaga una sonrisa, notando que sus compañeros también lo han hecho. Y es que el público presente ha bufado un "ohhh~" de decepción.

>> ¡Les aseguro que lo que tengo para decir es más importante! Habitantes de Karmaland, somos afortunados de vivir en este lugar, pero también cargamos con responsabilidades que a nadie más en este mundo les competen. Lo que quiero decir es... ¡nuestras acciones sí importan! Voy a serles realista. En los últimos meses varios de mis compañeros y yo enterramos la pata bien hasta el fondo, ¡y por ello perdimos héroes en el proceso!

Linda noche, ¿no?

ㅡEn este lugar hay un poder que se escapa de nuestras manos, con la capacidad de tomar almas y destrozarlas hasta volverlas añicos.

Seguro que las estrellas brillan mucho sobre esa capa de espesas nubes.

ㅡ...También perdimos a Merlon. Él en todo sentido era nuestro mayor guía, y ya no está con nosotros.

¿Sabes qué otra cosa es brillante?

ㅡ¡Todo por culpa de nuestra vanidad, egoísmo y resentimiento! ¡Nos cegamos, creyendo que podríamos hacer todo solos! Yo lo hice.

La mirada clara como el mar se pasea entre sus tres compañeros, que aguardan a que el castaño finalice sus palabras para poder llegar a un acuerdo.
Luego de una pausa en la que se ha dedicado a escudriñar entre el público y tras darse cuenta de que Fargan y Alexby están también por ahí, Luzu continúa hablando.

ㅡ¡Yo lo hice! Y me fue fatal.ㅡ amaga una sonrisa que nunca llega, recordando que Manolo había perecido por su culpa.

Las espadas lo son.
Tan brillantes como estrellas en el cielo.
Pero este cielo está cubierto...

Juguemos una partida de ajedrez.

El último rey en pie, gana.

ㅡLo cierto es que hay enviados de deidades terribles entre nosotros. Han convivido en nuestro hermoso valle durante muchos años. ¡Y mis compañeros y yo nos dejamos engañar!

Tap. Tap. Tap.
¿Oyes mis pasos? Claro que no.
Nadie lo hace.

ㅡPero los dioses han sido benévolos con nosotros. Esta es nuestra oportunidad...

Algunas antorchas se apagan. Nada preocupante, después de todo, corre algo de viento. La visibilidad no es terrible, de todos modos.

Un cuerpo se abre paso entre la gente, ansioso por estar tan cerca de Luzu como le sea posible.
¿Quién no? El castaño es bueno improvisando discursos en público.

ㅡ¡Es nuestra oportunidad de levantar nuestro valle, antes de que se rompa en mil...!

En mil...

"Pedazos".

Pero empiezan a haber problemas para comprenderle.
Quizá porque su frase se ha mezclado con el líquido carmín que ha empezado a escupir.

Un jadeo agónico le continúa.

Samuel grita un "¡Luzu!" Y el chillido de la multitud no se hace esperar. Los ojos abiertos de todo el mundo contemplan, atónitos, la forma en la que el cuerpo del castaño se desliza hacia el suelo, luego de haber sido atravesado por una espada.

Si tuvieras una sola oportunidad de obtener todo el poder que estabas buscando, ¿la tomarías?

Tras el cuerpo inerte del castaño, el que todos reconocen como Raúl Álvarez Genes, relame sus labios y sonríe con amplitud.

Jo. Auron ha sido consumido por su propia codicia.

ㅡBuenas noches. Mi nombre... es Kutsuja.

Un sólo Rey ha quedado de pie.

-Fin-

-*-*-*-*-

Como dato, Kutsuja significa "invocador".

No me odien.

Hasta aquí llega la aventura, compañeros. Ha sido una travesía larga.
Pero no crean que pretendo despedirme. No aquí, ni ya.
Necesito que estén atentos a las próximas actualizaciones.

Y eso es todo por ahora.

Como siempre, los amo.