Ataraxia | Karmaland | Terminada

C a p í t u l o 4 2

||Alguien ya logró traducir el código binario del capítulo anterior. Vayan a ver si gustan. <3||

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○●○

Por la mañana, estando tranquilo en su oficina, Auron recibe una llamada.

ㅡAyuntamiento de Karm-

ㅡMe van a comer los cojones.

ㅡAlexby, ¿qué te pasa ahora?

ㅡ¿Qué qué me pasa? ¡Pasa que han reventado mi jodida oficina, tío! ¡He perdido todos los registros! ¡Todos! ¡Jodeeer! ¡Que solo quiero hacer mi jodido trabajo en este pueblo de m-!

ㅡVamos a ver. Compañero. No puedes gritar tanto a esta hora, la gent...

ㅡ¡A ver si la gente quiere hacer mi trabajo! ¡Tú estás muy tranquilito ahí en tu oficina! ¿No? Que el trabajo sucio los hagan los put-

ㅡ¡Pero Alexby!

Llevaron más de diez minutos de conversación.
Bueno "conversación". Parecía más una competencia de ver quien se interrumpía primero.
La llamada culmina con un "Me estás poniendo muy nervioso y voy a tener que agarrarte a puñetazos" de parte de la mano derecha del Alcalde.
Al colgar, Auron suspira exasperado.
Hoy iniciaba el turno de Alexby para vigilar a Luzu.
¿También tendría que hacerlo ahora?

Llama al teléfono otro (y único) interno del Ayuntamiento.

ㅡ¿Oficina del Alcalde?

Quien atiende no se trata de Lolo, sino Mangel. El pelirrojo le ofreció trabajo como su asistente personal.
El fumador aceptó gustoso, no por la paga prometida, sino a causa del hecho de poder ser útil en algo tan importante como lo es la Alcaldía. Se nota animado.

ㅡHombre. ¿Podrías decirle a Lolo que estaré fuera por un rato? ¡Ah! Y que alguien vaya a inspeccionar comisaría.

ㅡ¡Por supuesto, Mano derecha!ㅡ espetó risueño. Auron casi que logra percibir su sonrisa tras la línea.

ㅡGracias, Mangel. Nos hablamos.

Toma su sudadera roja y las llaves de su oficina. Al salir, asegura su rosa puerta y se encamina hacia afuera.

ㅡVamos a ver a Borja.ㅡ murmura, sin ganas.

○●○

El subconsciente puede llevar a cabo todos los procesos fundamentales y básicos que realiza la mente consciente.
Quizá, el subconsciente es más inteligente que nuestra parte consciente (parafraseando, por supuesto).
De hecho, es cierto que cada una de las acciones y respuestas que damos en nuestro día a día -tanto como "¿qué voy a comer?" O "¿Cuánto es 7+3?"- hayan sido contestadas mucho antes en nuestro lado "inconsciente".

Es por esto, tal vez, tal vez no, porque todo es muy ambiguo y las razones pueden ser más obvias de lo que parecen, que Thánato ha decidido posar su voz en esta parte de la mente del castaño.
¿Recuerdan el yo, el superyó y el ello?

¿Si? ¿No?

Les refresco la memoria. El superyó nos dice qué es bueno y qué es malo, mientras que el ello es pasional y desenfrenado.
El yo no nos interesa por ahora.