Capítulo 38.

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— Arruine la cita, y sé que merezco ser odiado y golpeado — dice contra mi cabello.

Como si fue tan fácil odiarlo.

— No arruinaste tal cita, cuando ni siquiera asististe — murmuro.

Lo siento tensarse —: Se que no es excusa cuando pude haberte avisado, pero tuve que llevar a Nessa al hospital. Es por eso que pedí a Wallace ir a buscarte.

¿Tú lo mandaste?

Quiero preguntar. Sin embargo, preguntó otra cosa apartándome de él —: ¿Ella está bien? ¿Cómo está Ro?

—Nessa sufrió un desmayo, Ro, ella está bien.

— ¿Qué ocurrió?

— El doctor dijo que se debía a tanto estrés acumulado. Ella no estaba comiendo, ni durmiendo bien.

— Yo no sabía... — ¿Por qué Ro no me llamo?

Bajo la mirada hacia mis pies, mientras Evan sigue hablando.

— Ro, no quería preocuparte, ella tendrá sus razones para no decírtelo.

— Lo sé, no es de mi incumbencia — termino por aceptar.

Sé que esto no es su culpa, nada de esto sabríamos que ocurriría. Vuelvo a levantar la mirada y veo un Evan agotado, cansado, pero sobre todo veo culpabilidad.

— Halley, perdón yo debí...

— No debes preocuparte por mí cuando algo más grave está pasando. No tengo nada que perdonarte.

— En verdad quería pasar la tarde contigo en la playa.

Una sonrisa se me escapa ante su confesión.

— Habrá otros días.

Evan me devuelve la sonrisa y puedo decir que lo que veía hace un rato es arrebatado como un manto.

— ¿Quieres dormir aquí? — pregunto abiertamente —. Te ves cansado y estaría preocupada si conduces así.

— Me quedaré, pero, ¿crees que pueda tomar una ducha?

— Por supuesto.

Me giro para abrir la puerta y puedo sentir su aliento golpeando mi oreja —: Gracias Halley, por todo.

No entiendo ese todo el cual se refiere, pero tendrá sus razones, así como yo las tengo por sentir lo que siento.

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Recorro la cocina en busca de algo para cenar. Pero recuerdo que, en mi camino por buscar
comida, no compre nada.
Reviso las repisas por si hay comida instantánea, cuando su celular en la mesita de centro vibra.

No quiero ver de quién se trata. Pero sin poder evitarlo hecho un vistazo a la pantalla. No sólo el nombre en la pantalla me revuelve mis entrañas, sino la imagen del contacto. La mejilla de Evan siendo mordida por la boca de Nessa.

Dejo el celular donde estaba, pero este no deja de vibrar.

¿Qué querrá tan tarde? ¿Será una emergencia?

Debí haber contestado o dejar que sonara hasta que Evan tomara la llamada. Pero no lo hago. En su lugar, apago el celular.

La puerta del baño se escucha abrir e inmediatamente dejo el celular donde estaba.

— Halley, ¿quieres salir a cenar? — grita.

— Perfecto, muero de hambre.

Aunque mis entrañas se retuercen por la culpa, una parte de mí no lo hace, sino todo lo contrario.

Es mi momento de estar con Evan, pienso egoístamente.

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Después de comer una hamburguesa con papas. Puedo decir que mi estómago lo agradeció.
Ya no estaba lleno solo de culpa, ahora también de queso.

Llegamos a casa en ese tipo de silencios cómodos, o al menos así se sienten la mayor parte del tiempo con él.
Evan entra al baño después de que le entrego un cepillo dental, cuando termina entro en seguida.

Estoy con el celular sentada sobre la bañera decidiendo si debería llamar a Ro y preguntar por Nessa.
Pero, ¿qué probabilidad hay de qué estuviera bien y solo llamaba para asegurarse que estaba en casa?

Hago caso a eso último y decido no llamar.

Después de siete minutos de dilema, al salir me encuentro con Evan tendido boca abajo en la cama. Su chaqueta se encuentra en un sofá cerca de la ventana y sus zapatos esparcidos por el piso de la habitación.

Mi intención era solo acostarme y dormir en mi lado de la cama, sin embargo, me acuesto de frente hacia él.
Evan dormita con sus brazos abrazando la almohada. Su cabello cae cubriéndole los ojos y por instinto lo aparto de su rostro.

— Evan Arwenson, me gustas. — Susurro lo que tenía que decirle cuando estuviéramos frente al mar —. Y me asusta mucho, me asusta tanto en la persona que me estoy convirtiendo.

Una parte de mi entiende que su corazón ya eligió a su persona. Pero otra parte está convencida de que él siente algo por mí.

La palabra miedo en el amor es más común de lo que debería. Aunque últimamente describe perfectamente lo que siento. No miedo de sentir lo que siento, sino el miedo de lo que él sienta por mí.

De que él no me elija.

— Seré valiente, ¿de acuerdo? — digo —. Te diré que me gustas cuando estés despierto, solo si tú prometes ser sincero. Sincero contigo mismo.

Evan se mueve y por un momento me estremezco de que haya escuchado lo que dije.
Pero no lo hace. Solo se gira dándome la espalda como si no le importará lo que yo sienta. Como si fuera la única en esta habitación que no sabe diferenciar entre lo real y no real.

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A la mañana siguiente despierto sola en la cama.

Evan se había ido.

Mi celular suena y es un recordatorio de que pasado mañana tengo entrevista por televisión. Está vez, solo yo.

Pero lo que llama mi atención, son todas las llamadas perdidas que tengo de Ro. Inmediatamente marco su número.

— Halley.

— Ro, ¿está todo bien? — hago una pausa —. Supe lo de Nessa.

— Ella está mucho mejor ahora — suspiro en parte de alivio.

— ¿Necesitas dinero? ¿Quieres...

— No Halley, no necesito dinero — contesta con un tono molesto.

— De acuerdo. Entonces te veo en los estudios de Star Mount.

— Con respecto a eso, debo a quedarme a cuidar a Nessa. Pero le pedí a Frank y Lucia que te acompañarán.

— Oh. — No me eligió —. Está bien, no es como que te necesite hoy. Nos vemos luego.

Cuelgo.

No intentaba ser grosera, ni mucho menos. Pero una parte de mí se molestó cuando no fui su prioridad.

¡Por dios Halley tú no eres su hija!

Grita una de mis muchas voces internas.

Bajo las escaleras con el fin de encontrar algo de comida, que sé que no habrá. Pero una nota en la puerta llama mi atención:

"Halley, tuve que salir temprano. Gracias por dejarme quedar.
                                                   -E."

Arrugo la nota y la tiro al bote de basura. No soporto ver que, aunque no soy un objeto puedo ser intercambiable para ellos.

No quiero serlo, en todo caso ella debería serlo.

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