XXXVII

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Al dia siguiente fui la primera en despertarme, algo raro ya que normalmente necesitaba a alguien que lo hiciera, pero el dia de hoy habia ocurrido sin la necesidad de que me gritaran al oído o que me movieran de un lugar a otro. Por lo que tuve la idea de ir a dar una vuelta por el lugar, tratando de disfrutar durante unos momentos el silencio y de paso tal vez correr un poco, de ese modo tratando de mejorar mi condicion fisica. Pero vaya sorpresa me lleve al escuchar las gotas de lluvia caer contra el piso.

─Vaya dia ─ gire ligeramente la cabeza para encontrarme a Iggy sentado, mirando hacia la entrada de la tienda. ─Parece que hoy dia nos mojaremos.

─Será mejor despertarlos si queremos seguir ─ murmure, recibiendo un asentimiento de su parte

─Podrás despertarlos? ─ me pregunto recibiendo una respuesta afirmativa de mi parte. ─Haré algo para comer antes de seguir.

El salió de la tienda dejándome sola con el rubio y pelinegro, pero al ver a los dos, especialmente al rubio me fue imposible que no se me ocurriera algo que a mi me encantaría, pero estaba segura que a ellos no tanto. Sin evitarlo sonreí una sonrisa traviesa al ver al rubio descansar tan cómodamente para despues salir de la tienda.

─Ocurre algo? ─ pregunto Ignis, levantando una ceja al verme afuera de la tienda.

─Nop, ya vuelto... por favor no los levantes ─ conteste para despues empezar a caminar hacia los arbustos, árboles y flores que había a nuestro alrededor, buscando bichos ya sean grandes o pequeños.

Aunque fue algo complicado, despues de 10 minutos en un pequeño arbusto me encontré a un bicho pequeño, tenía alas gigantes y pequeñas patas de un color morado. No iba a negar que me daba asco tener que agarrarlo, pero para evitar lastimarlo y que la lluvia lo haga, lo agarre entre una mano para despues taparlo con la otra, evitando que escape y también que se mojase.

Algo que lamentablemente yo no pude evitar, ya que las gotas de lluvia poco a poco empezaron a mojar mi ropa completa. Sintiendo también mi cabello mas y mas pesado, simplemente lo lleve hacia atrás para evitar que me molestase.

─Segura que todo bien? ─ volvió a preguntar Ignis, cuando vio que caminaba hacia la tienda, con una sonrisa traviesa.

─Mas que bien...

Fue lo único que dije antes de entrar y encontrarme adentro aun a los bellos durmientes, casi me daba pena hacerles la broma, pero al final decidí no incluir a Noctis al este no haber hecho nada malo conmigo. Simplemente me vengaría del rubio y me dedicaría a despertar al pelinegro.

─Noctis... pts ─ dije lo más silenciosa que pude, moviendo con delicadeza al principito. Más al ver que poco a poco se empezaba a despertar, puse un dedo en mi boca diciendo que estuviera en silencio. ─ No hagas bulla.

El príncipe asintió algo confundido, viendo como yo me paraba de su lado para caminar hacia donde estaba el rubio y sentarme a su lado para acercarme cada vez más a él.

─Prompto ─ murmure cuando me acerque lo suficiente a su oído. ─ No vuelvas a bromear conmigo ─ susurré.

Me pare dejando el bicho en su pecho, ya que tampoco sería tan mala como para ponerselo en la cara, que culpa tenía el bichito? 

─Ahh ─ grite como loca para empezar a saltar, simulando tener "miedo" ─ un bicho, un bicho está encima de Prompto.

Seguí gritando hasta que el rubio se levantó de un salto y empezó a gritar del susto, limpiándose desde el cabello hasta los pantalones causando que riera a carcajadas y el príncipe hiciera lo mismo, con la única diferencia es que yo me empezaba a limpiar lagrimas y me agarrase el estómago por el dolor de reir tanto. En algún momento, Noctis habia agarrado la cámara de Prom y le empezó a tomar fotos que más adelante yo misma iría a pedir copias.

Final Fantasy XV [Noctis y Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora