Lazos lejanos

Capítulo 7

En el pueblo...

Sofía...

Al llegar al pueblo, quedé asombrada, porque la entrada se veía muy antigua, muy deteriorada, pero efectivamente decía "Reino Potens. Provincia Leuksna"

Las palabras provincia y Reino es extraño, porque ya no existen los reinos, los de Inglaterra fueron los últimos en desaparecer pero ya no hay ni príncipes. ¿Qué es esto? Lo tengo que averiguar, debo saber en donde estoy y como irme de aquí.

La gente me mira extraño, voy caminando y siento que me voltean a ver. ¡Aaaay no aguanto no ponerme roja! Me da pena que me miren tanto (en especial con lo que paso con Alexandra) eeeeeh será...¿Qué ellos son de mi época? Bueno no, pensándolo bien no, sus ropas son diferentes a las mías, ¿por eso me ven como la rara? Por la ropa diferente....

Mis pensamientos son interrumpidos al ver que un tipo enooooorme parece que está ebrio, se acerca a mi pero lo logro esquivar. Rápido un lugar seguro, ¡por fin! Encontré un lugar para comer.

Mmm no es 5 estrellas, pero se ve decente, aunque creo que es una taberna, nunca en mi vida creí que entraría a una. Si no hay de otra pos nimodo, lo malo es que no sé cuánto me voy a gastar, tengo $50 pesos en billete y $15 pesos en moneda, en total $65 pesos, pero....¿qué moneda es la que se utiliza aquí? Pudiera ser ¿el dólar? Si es así entonces traigo...mmm ¡¡¡$0.02 dólares!!!
Uy tendré que hacerme de panza pequeña.

Sandra...

Creí que nunca llegaría a la taberna, vaya, muchas felicidades a esa niña, ¿siquiera traerá dinero? Jajaja no creo que entienda aún que no es nuestro tiempo ni nuestros países. Jajaja y la ropa no se la cambió, esa mocosa se va a meter en problemas sólo por su ropa y peor si sigue sin entender que show aquí.

Pasa la mesera y me pregunta.

-señorita, ¿desea algo de beber o algo de comer?- ralmente tengo hambre, pero no tengo dinero...ya sé

-sí señorita, emm me puede traer un baso de agua por favor yyyyyy... ¿Tiene pan? - necesitaba algo barato, si bien no voy a pagar con dinero no debo abusar con pedirme lujos.

-¿pan?- me preguntó, yo creo que se le hizo muy poquito o quién sabe.

-sí señorita- le respondí con una sonrisa en mi cara, para convencerla.

Ella asintió levemente la cabeza, me correspondió la sonrisa y me dijo.

-claro que sí señorita, en un momento se lo traigo- moví mi cabeza en forma de decir que sí y le dije.

-claro, gracias-

Jajajaja creo que la niña no ha visto que también estoy aquí, la voy a observar, a ver que hace.

No sé la razón por la que me importa ésta niña, lo único que se me ocurre es porque sentí feo cuando le grite, pero ¡oye! Ella no tenía derecho a insultarme, además que yo no le había hecho nada, sin mencionar que me dejó a mi suerte queriendo que pensara que estábamos en África.

Ahora que lo pienso, es medio delicadita, jajaja ella fue la que se ofendió cuando levanté la voz, en el caso de no ser delicadita entonces es muy fácil de intimidar, mmm entonces si me necesita, sea payasa-delicada o sea fácil de manejar, necesita alguien que la ayude para que no se meta en líos estando en otro lugar con costumbres diferentes.

Uy sí, como si supiera mucho de costumbres diferentes.

#15 minutos después#

Sandra....

Llega la señorita que me atendió, pero no trae sólo agua con mi pan. En su charola trae una pequeña jarra de vino; agua; mi pan que pedí; un poco de fruta picada y un pescado frito pequeño.

-señorita, este...yo no pedí todo esto- le dije al ver que lo empezaba a poner en la mesa.

-no se preocupe, pude notar que no tiene dinero- cuando dijo eso no pude seguir viéndola, agaché la mirada.

-¿cómo se dio cuenta?- sin levantar la mirada le pregunté, estaba apenada.

-me dí cuenta porque llevo años aquí, conozco cuando la gente tiene intenciones de pagar y las que no. Usted se ve con intenciones de pagar pero que no le alcanza, por eso usted pidió tan poco, algo que no le alimentaría. Y como tenéis esas intenciones, prefiero darle algo que es poco pero que le alimente mejor- muy tranquila y muy dulce me lo dijo, estaba sumamente agradecida con esa dama.

Sofia....

Ha pasado un buen rato, me estoy muriendo de hambre, la mesera nada que viene; ya me vino a pedir mi orden, pero no llega.

Mientras veo la entrada y salida de mucha gente, muchas mujeres acompañadas de hombres que yo creo nadie debería dar ni un centavo, además de feos son vulgares, son irrespetuosos con ellas, me dan asco por su forma de tratarlas, quizás estén pagando para estar con unas mujeres tan bellas como ellas pero no por pagar deben faltarles al respeto.

Veo a la mesera que se aproxima a mi mesa, cuando veo el pequeño tazón de sopa que pedí empecé a salivar mucho, tenía muchísima hambre y también estaba sedienta. En cuanto la señorita dejo el jarrón de agua junto con el bazo y mi sopa sentía como si me abalanzará a la mesa por el hambre que traía.

Sentí la mirada de la chica, que era de manera loca y extraña, jajajaja no era mi culpa, estaba casi casi moribunda. Bueno es un decir porque no era para tanto.

Giré mi cabeza para mirarla y disculparme por comportarme de tal manera, pues había exagerado mucho en mi hambre.

-discúlpeme señorita, reconozco que exageré no era mi intención parecer loca por la comida- lo último que dije la hizo reír, me miró y me dijo.

-No os preocupéis pequeña, puedo entender que quizá hiciste muchas cosas.
Eres una chaval, no es tan malo, sólo ten cuidado que le faltéis el respeto a alguien de aquí-  después de decirme eso dio la media vuelta y se retiró.

Me dejó pensando cuando dijo "chaval" y "faltéis" no porque no conozca el significado de dichas palabras pero hasta donde tengo entendido son expresiones clásicas de España, entonces...¿Cómo había llegado a España? ¿Pos en qué tiempo estoy? En fin seguí comiendo.