------4 días después...-------
Princesa Tania...
Mi madre debe estar loca, yo no quiero estropear mi vida tan jóven, ella se casó a mi edad y por eso está amargada y quiere que yo sea igual. El emisario que envió es un consejero de bodas y sólo están esperando a que despierte el rey para que me comprometan con él.
No sabe nada de ésto Sandra ni Sofía, creo que a Sofía le dolería horriblemente saber que el que le gusta se va a casar con quien parece ser su amiga, no sería mi intención lastimarla, paro puede que ella no lo vea así.
-Majestad, ¡Majestad buenas nuevas!- entran a mi alcoba los dos emisarios alterados.
-¿qué sucede?- pregunté.
-Alteza, su madre la reina está aquí.- hablaron al unísono. Estaba sentada, pero en cuanto oí eso me levanté de un brinco.
Salí de la habitación y vi que los Elfos se juntaron para darle la bienvenida, pero no la festejaron como a mi cuando yo llegué, debe ser porque fuimos enemigos tanto tiempo.
Saludé a mi madre como es debido, me dijo que necesitaba hablar conmigo, la llevé a mi casa donde podía hablar sin que nadie nos escuchara. Esa charla me dió escalofríos, pues expresé que no quería casarme y la razón es que no me gustaba Jonah, sin embargo no parecía bastarle a ella.
-no puedes pensar sólo en tí, debes pensar que tu pueblo lo necesita. Los elfos pensaron que ésto que pasó con el Rey fue nuestra culpa, pero si eres su esposa quedamos libres de sospechas. No tuvimos nada que ver, pero pueden atacar si es que piensan que fuimos nosotros.- tenía razón, en ese sentido no se equivocaba, si me caso con él la alianza de paz se asegura por muchas generaciones.
-pero, mamá hay un problema...-hablé tímidamente.
-no hay problemas para tu madre, decidme ¿qué sucede?- habló abrazandome como una madre cariñosa.
-que al rey no le intereso y...-
-¡baa! Tonterias, vos soís un Hada, de clase, hermosa, de su edad, jóven, princesa, ¿qué más puede pedir si eres perfecta?- habló mientras me soltaba y presumía mis cualidades.
-mamá, puede que no sea tan exigente...-respondí agachando la mirada. Ella se extraño y me volteó a ver. Yo me senté en mi cama.
-le gusta Sofía y a ella....le gusta él.- respondí. Ella se sentó a mi lado y colocó su mano en mi espalda.
-mi querida hija, ella es sólo una humana. Una humana sin importancia, ella no es igual a ti, vos sos mejor, vos podeís conquistar al Rey. No te preocupes si le gusta ella, no va a durar para siempre y...ella no se quedará mucho tiempo para que lo conquiste.-
-¿qué quieres decir con que “no se quedará mucho tiempo”? ¿Qué le vas a hacer?- pregunté asustada.
-no le haré nada, ella decidirá marcharse.- respondió muy tranquila.
Sofía...
Jonah sigue sin despertar, supe que vino la reina hada, no salí a verla, yo me quedé a cuidar a Jonah. ¿Cuándo despertarás? Le hablo mientras está dormido, a veces parece responderme, como puede mover la cabeza como tomar mi mano y apretarla, eso principalmente lo hace cuando ya me voy a ir. Otras veces murmura mi nombre, siento que el tiro querían darmelo a mí, pero que por accidente nos movimos, lo que ocasionó que él lo recibiera. Preferiría ser yo a quien le dieran el disparo, por lo menos estaría ya mejor, pues mi herida de la flecha esta casi sanada.
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Lazos lejanos
RandomUna historia de chicas que se conocerán de una forma muy peculiar y que se enfrentarán a peligros fantásticos. Tendrán que unirse y volverse amigas para regresar cada quien a su hogar. Dos naciones diferentes en dos personas, se formarán unos lazos...