🌝ADICTO AL SEXO🌚 •TAEKOOK•

Capítulo 22

Culpabilidad

No me puedes hacer esto...

Eres lo único que tengo en mi vida Taehyung...

Yo haría lo que fuera para que seas feliz.

Yo soy feliz, a tu lado siempre lo supe.

Te estás muriendo bebé...

Yo no quiero que llores por mi, eres una buena persona y las buenas personas se quedan, yo... He hecho mucho daño Tae..

Por favor no te vayas...

No me dejes solo...

Yugyeom...

Taehyung despertó con un golpe seco en su cuerpo, se había caído del mueble en donde pasó toda la noche esperando una señal de vida de su novio.

Pero el recuerdo de su pasado lo sigue atormentando.

Yugyeom... -Dijo pensativo con morderse su labio inferior mientras lograba sentarse en el suelo.- Me duele mucho la cabeza...

Visualizó un poco el lugar y se dio cuenta que Jungkook no había llegado, de inmediato se levantó con resaca pero a eso lo ignoró olímpicamente.

Kookie... ¿En dónde estás?

Se sabía que estaría en la graduación de su hermano, más no comprendía del ¿porqué? aún no llegó al apartamento, sin pensarlo mucho y con la adrenalina a mil salió disparado a la calle a buscarlo.

Más se detuvo cuando recordó que él no tenía teléfono, pero si se sabía en dónde vivía su casa.

Espero que estés bien amor...

Por otro lado, Jungkook salió con su vieja ropa de casa cuando miró a su hermano y padre hablando en la mesa, de repente buscó con la mirada y se sorprendió a ver en como Namjoon era enseñado por su madre en como debía condimentar la comida.

Buenos días...

¡Oh hijo! ¡Buenos días! -Dijo ella muy feliz al acercarse y darle un beso en su cachete.- Mira, la sopa está lista, Namjoonie me ayudó mucho.

El menor sonrió cuando escuchó eso, más aún le dolía el chichón por culpa de él. Lo miró y el mayor supo que estaría enojado por su golpe en la frente.

Buenos días Jungkook. -Sonrió con vergüenza.- Lo de anoche... Eh.. Lo lamento, no vi la alfombra y me resbalé... No fue intencional...

No claro que no querido. -Dijo su madre al defenderlo.- Fue un accidente, Jungkook te perdona ¿cierto?

Si... -Dijo con una sonrisa que quería matarlo.- Ahora no sé cómo me lo cubro porque en serio me duele a cada minuto.

Ya no dramatices bebé, veré si tengo algún medicamento, ya vuelvo.

Una vez que se fue el menor se le acercó intimidante, el otro agrandó sus ojos de sorpresa, esperando la golpiza del día.