꒰ ☁︎ ꒱ ,, ⌲ Baby & Daddy

19

(Al siguiente día)

Me levanté como de costumbre, Anna ya había hecho el desayuno, eran unos huevos estrellados sobre unos pan tostado y jugo de naranja, sabía delicioso.

- Buenos días Anna - dije bajando las escaleras un poco dormida aún.

- Buenos días señorita, ya le sirvo - limpió sus manos un poco y llevó el plato con lo ya mencionado al comedor.

-Te ayudo - la topo en el camino.

- Muchas gracias - sonríe y regresa por la jarra con el jugo.

Me siento y me sirvo un poco de jugo en el vaso de cristal que dejó en el comedor.

- Mmm, está delicioso - sonrío con la boca un poco llena mientras tapo ésta y veo a Anna.

- Siempre dice eso señorita - ríe.

- Es que es verdad - sigo comiendo.

- Muchas gracias - se sonrroja un poco mientras corta algo.

- ¿A donde fue daddy? - pregunté volteando a todos lados.

- El señor fue a trabajar temprano, dijo que el chofer la iba a pasar a dejar a su escuela.

- Bien, gracias - sonreí tapándome la boca.

Minutos después me levanté del comedor llevando mis trastes al lavabo y limpiando cada uno.

Subí a mi cuarto a tomar un baño rápido y ponerme mi uniforme, cabe mencionar que a la prepa a la que voy es privada, mi daddy insistió en que entrara ahí, asi que la ropa es un poco cara y fina por así decirlo, tengo un broche chanel en mi saco, corbata chanel, un bolso y algunas cosas para el cabello de la misma marca, lo demás del uniforme es de una tela muy buena y cómoda, no sé en cuanto está pero daddy dijo que el uniforme fue caro y que lo cuidara.

Al escuchar "escuela privada" pensé en chicos que se creen mejores que la sociedad, que presumen su dinero, físico o autos, chicas que presumen sus novios, celulares, maquillaje y otras cosas, no me equivoqué, desde que entré noté esas miradas que solo juzgaban, chicos sonriéndome y chicas con cara de que tienen algo pudriéndose bajo la nariz, fue divertido pero sabía que sería dificil adaptarme, claro, no todas las escuelas privadas deben de ser así pero la que me tocó fue cuestión de mala suerte.

- A fin llegaste - se me lanzó Alex rodeándome con su brazo.

Alex fue el primero con el que hice una buena amistad, traté de unirme a muchos grupos del salón pero en la mayoría del primer semestre estuve sola, hasta que este chico cambió de salón repentínamente, en ese entonces ya no intentaba nada pero él se me acercó y se me hizo simpático, comenzamos a hablar diario y a sentarnos juntos, ibamos a la cafetería y tomábamos lo que podíamos, ya estaba pagado el almuerzo junto a la inscripción, asi que es de agarrar lo que querías, la mayoría que tomamos son postres y una que otra torta o fruta, es muy divertido este chico.

- ¿Lista para otro día aburrido? - sonríe sin quitar la mirada del camino.

- La verdad no.

- Lo sé, tampoco yo.

Río - idiota - le doy un empujón en el pecho.

- Auch - se hace el dramático - con más delicadeza my lady.

- Sabes que odio que hables formal.

- Por eso lo hago - me lanza un guiño.

- Vamos - tomo su mano y nos dirijo al salón de taller de lectura.

Al llegar a la entrada suelto su mano y acomodo un poco mi corbata.

- Déjame - me voltea frente a él y se agacha un poco para acomodar mi corbata correctamente - te falta práctica - sonríe de lado como burla y se acomoda volteando al frente.

- Gracias - respondí sarcásticamente.

Tomamos dos lugares de la tercera fila, a veces solemos sacar un bocadillo a mitad de clase y comerlo a escondidas pero no queremos ser la atención de los maestros estando en frente o hasta atrás que comúnmente son los que se duermen o comen en clases, para no levantar sospechas elegimos estos lugares.

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Pdt. Me inspiro fisicamente en mi crush para Alex