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El olor de velas aromaticas inundó mis fosas nasales, se sentía dulce pero mientras más lo olías más fuerte era, definitivamente las luces estaban apagadas, el fuego de las velas en el suelo formando un camino con ayuda de pétalos rojos era lo único que alumbraba el lugar, la luz de la luna pasaba desde la puerta trasera a la sala de estar, el camino formado en el suelo iba a ella pero no terminaba ahí, fui con cuidado de no caer por los pétalos al mismo tiempo de no hacer ruido, el lugar estaba en completo silencio, no estendía que pasaba.

Corrí la puerta trasera mostrando a daddy al terminar el camino en una mesa alta redonda con un traje negro y camisa blanca, se había dejado su cabello natural, siempre suele peinarse con toneladas de gel y eso se ve bien, pero me gusta ver a daddy levantarse con su cabello ondulado llegando a penas a tapar sus ojos, era demasiado sexi, en sus manos tenía un ramo de las rosas más hermosas que había visto en mi vida, algunas eran rojas y algunas blancas en el centro formando un corazón.

-¿Es lo que pienso que es? - dije nerviosa al ver sonreir a daddy.

- Ven y lo averiguarás - aleja una de las dos sillas de la mesa circular invitándome a tomar asiento.


Con una sonrisa nerviosa me acerqué a daddy dándome éste el hermoso ramo, las estrellas brillaban tanto que sentía que me veían, no era justo que daddy estuviera vestido formalmente y yo "así".

- Debería cambiarme - dije inclinándome para salir de la silla.

- Estás perfecta - daddy tomó mi muñeca evitando que me fuera.

Me volví acomodándome viendo hacia él notando cada parte de la mesa, ambos teníamos platos con un cubreplatos sobre ellos, en el centro había un pequeño pastel como en una mini cúpula, era muy pequeño pero los detalles que tenía eran increibles, una botella de vino se situaba a un lado junto a unas copas altas y delgadas, daddy sirvió la bebida dándome una servilleta de tela blanca, la coloqué sobre mis piernas dejando colgado mi chamarra en la silla para moverme mejor.


- ¿Y los mensajes? - quería quitarme la duda.

- ¿Quieres hablar de la buena estrategia que usé para traerte? - sus codos se acomodaron en la mesa uniendo sus manos.

- Si, me preocupé.

- No lo hagas, yo mandé el mensaje.

- Pero no es tu número.

Daddy sacó de su bolsillo un teléfono - tuve que comprar uno nuevo, pude haberlo hecho diferente pero este me servirá para mis futuros trabajos - volvió a guardar el teléfono - comamos - daddy destapó los platillos.

Su sonrisa agrandó en cuanto vio mi reacción al ver lo que estaba en el plato.

- Recuerdo que cade que veíamos la película tenías ganas de probarlo, no sé si te guste pero quería cumplirte ese sueño.

En el plato había una pequeña porción de "ratatouille", cada que pienso en ese nombre imagino una voz francesa pronunciándolo como en la película, no suelen gustarme mucho las verduras pero hay que admitir que en la animación se veía delicioso al igual que en la vida real, solo falta probarlo, de verdad esperaba que me gustara.

Tomé el cubierto tomando del platillo lenta y delicadamente para no quitarle la perfecta forma que tenía, el sabor era algo que no había probado antes, si no fuera por esto no comería las verduras que tiene.

- ¿Te gustó? - daddy pregunta nervioso.

- Me enecantó - respondí cubriendo mi boca - pero estoy segura que no me llenaré.

꒰ ☁︎ ꒱ ,,  ⌲ Baby & DaddyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora