Y tu eres el único que sigue aquí Sam Gamgee (Samfro) (Canonxoc)

Un lugar para los dos

Goliat se encontraba en un sueño ligero, sólo en la pequeña habitación que compartía con Bofur cuando oyó que el mencionado llegaba.

La puerta se abrió con cuidado y se infiltraron pequeños rayos de luz procedentes de una fuente externa después de estos entró Bofur con una pequeña lámpara en mano y con un algo cansado "Ya llegué" saludó. El peli-negro se volteó en la cama como respuesta y el mayor mientras se sacaba las botas comenzó a decirle algo a Goliat que este no llegó a entender.

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Apenas estaban saliendo los primeros rayos del sol cuando el oji-dorados fue despertado por Bofur.

-Hombre- Goliat se tapó más con las sábanas- apenas esta amaneciendo ¿cuál es la prisa?

Bofur quien se encontraba parado a lado de la cama suspiró- Que estamos invitados a desayunar con ellos- Acto seguido quitó las sábanas que cubrían al joven dejándolas en el piso.

Goliat se sentó en la cama y bostezó‐ ¿Cuándo pasó eso?

-Después de que te fuiste, te avisé cuando regresé.

Goliat bostezó- No lo escuché- dijo mientras se comenzaba a cambiar.

Bofur rodó los ojos y también empezó a cambiarse.

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Los rayos de un tierno sol se posaban sobre los jardines de la comarca cuando Bofur y Goliat llegaron a la gran casa en Bolsón cerrado.

Cuando tocaron la puerta los recibió un animado Bilbo
-Bienvenidos- saludó- pasen justo estaba por preparar el desayuno.

-Déjame ayudarte con eso Bilbo- se adelantó Bofur.

Goliat que seguía con sueño aprovechó para acostarse un rato en la sala en lo que le llamaban para ayudar en algo.

A los 15 minutos Goliat fue llamado para ayudar a poner la mesa y servir la comida. Cuando ya casi terminaban este labor escucharon como entraba el menor de la casa este al verlos solo se quedó paralizado.

-Buenos días- saludó tímidamente, luego se dirigió hacía Bilbo y le preguntó en tono bajo- ¿Por qué no me avisaste que iban a venir?- dijo un poco alarmado.

-Porque estabas dormido querido- respondió el anciano dándole palmaditas en la cabeza mientras sonreía.

Frodo se quedó callado unos segundos mientras observaba a Bilbo, suspiró y se dirigió hacia los invitados.

-Disculpen mi tardanza y descortesía- dijo en el tono más formal que pudo-... me quedé dormido- se rascó la nuca e invitó a los 3 a sentarse.

El desayuno pasó de lo más normal, con todos riendo y hablando de sus planes para ese día, Frodo pasó todo el desayuno mencionando algunos lugares conocidos de la comarca a los que podrían ir.

Al finalizar el desayuno ambos jóvenes se dirigieron a la puerta para comenzar su recorrido y con ciertas palabras de despedida por parte de sus tíos partieron.

Ambos jóvenes se encontraban caminando sin rumbo fijo en silencio, un silencio algo tenso y esto Goliat no lo soportaba.

-Es un lindo día- dijo para intentar romper el hielo.