Y tu eres el único que sigue aquí Sam Gamgee (Samfro) (Canonxoc)

Resfriado

Goliat estaba un poco preocupado pues no había sabido nada del castaño, desde hace un par de días que no aparecía o daba señales de vida así que decidió ir a la gran casa en Bolsón cerrado. Al tocar la puerta no recibió ninguna respuesta, volvió a tocar esperando que esta vez le abrieran y logró escuchar unos ligeros pasos que cuando se acercaron abrieron la puerta de una manera un tanto brusca.

—Ya les he dicho..– Fue recibido por un Bilbo encolerado pero éste al notar de quien se trataba cambio su rostro a uno más tranquilo–Mi muchacho lo siento, pensé que eras los Sackville-Baggins– se disculpó para luego invitarlo a entrar.

Goliat sonrió y entró en el hogar.

—¿Qué te trae aquí muchacho?– le dijo el canoso mientras lo invitaba a sentarse.

–Frodo no ha aparecido en estos días y.. vine a ver si estaban bien.

Bilbo frunció el ceño– ¡Ay!– exclamó– hace unos días fuimos a dar un paseo– el anciano se veía algo amargado contando esto– ,en un momento nos encontramos con Lobelia y nos escondimos, al final el pobre terminó pescando un resfriado por este clima.

–¿No es nada grave?– preguntó preocupado.

–Solo un poco de fiebre, es que muy sensible para las gripes.

–¿Puedo ir a verlo?– dijo, quería ver como se encontraba su amigo.

–Claro, creo que ya despertó– dicho esto el pelirrojo guió a Goliat al cuarto del menor.

Al entrar a la habitación se encontraron con el castaño que intentaba leer un libro.

–Querido, tienes visitas.

Frodo alzó su rostro y al encontrarse con el del azabache sonrió mientras se acomodaba mejor en su cama.

Goliat entró junto a Bilbo y se sentó al pie de la pequeña cama.

–¿Cómo estás?– dijo con la voz más suave que pudo hacer.

–He estado mejor– le dijo con una sonrisa para acto seguido toser un par de veces.

Su tío se acercó a él y se aseguró de que estaba lo suficientemente abrigado, Frodo le aclaró que estaba bien. Luego los tres se pusieron a conversar hasta que el castaño volvió a caer dormido.

–Hoy está mucho mejor– le dijo el anciano a Goliat una vez estuvieron de nuevo en la sala.

–Lo vi animado– añadió el azabache.

Bilbo le sonrió– ¿Quieres una taza de té?

El enano que tenía las manos heladas aceptó y Bilbo se dirigió a la cocina. Al cabo de lo que parecieron cinco minutos regresó con dos tazas de té de manzanilla en sus manos.

–Gracias– Goliat tomó la taza.

–Sabes mi chico– dijo el mediano mientras le daba un sorbo a su té– estoy feliz de que estés en nuestras vidas, eres un buen muchacho.

el azabache casi se atraganta con su té– ¿En-serio lo cree?

–Claro– Bilbo rió.

Goliat se sonroso un poco, solo un poco.

–Cuando termine el invierno... ¿Volverás algún día a la comarca?

Goliat lo miró perplejo, en ese momento cayó en cuenta de que solo faltaban unos meses y...

–Claro que lo haré.

N/A: holaaaaa

frodo es un poco enfermizo y nadie me lo niega