Nación Tribal

Capítulo 16

Narra Zuko

Ya habían pasado dos días desde que salimos de la Tribu Agua del Norte y Nerea aún no despertaba.

Cómo este viaje solo era para cerrar el tratado de paz no pensamos que fuera necesario incluir un médico en la tripulación, además hasta cierto punto si traíamos un médico ya que Nerea era sanadora, pero justamente la sanadora que traíamos era la que necesitaba un sanador.

La cuidé tanto como pude pero no tenía muchos conocimientos para ayudarla. Lo único que yo hacía era controlar su temperatura con paños de agua en la frente y el pecho, pero no estaba funcionando.

A pesar de que ya llevábamos dos días de viaje aún estábamos cerca del Polo Norte y el clima seguía siendo muy frío, sin embargo el cuerpo de Nerea estaba de lo más caliente.

Me preocupaba mucho que no despertara pronto porque debe comer y tomar agua o sino el daño podría llegar a ser más grave.

Cuando menos lo pensé ya era de noche y yo también necesitaba descansar. Salí de la habitación y me dirigí a la cocina para comer algo; le dije al cocinero que me preparara dos pescados fritos y que me los llevará a la habitación de Nerea cuando los tuviera listos.

Cómo Nerea estaba durmiendo en mi habitación yo me estaba quedando en la suya para dormír.

Me cambié, me quité la camisa y traté de acomodarme  y dormír en la cama pero justo en ese momento se empezó a oír un gran escándalo en el buque. Al parecer los soldados habían visto algo porque solo se oían sus gritos diciendo "¡Ahí está!" y "¡Se fue por ahí!"

Volví a vestirme y salí de la habitación hacía la cubierta del buque para ver qué pasaba. En el camino me encontré a uno de mis soldados y le pregunté qué era lo que pasaba y me dijo.

Soldado: Es la Princesa Nerea Su Alteza, no está en su habitación y la vimos por el barco tratando de escapar.

Zuko: ¿Dónde está ahora?

Soldado: Creo que algunos hombres ya lograron capturarla en la cubierta del barco.

Dejé al soldado de lado y rápidamente me dirigí a la cubierta del barco para ver que era exactamente lo que pasaba.

Cuando llegué ví como dos hombres estaban sosteniendo a Nerea por los brazos mientras ella decía.

Nerea: ¡Déjenme! Solo salí a tomar un poco de aire fresco -dijo como si estuviera aún dormida-

Zuko: ¿Qué sucede aquí?

Soldado: Su Alteza, encontramos a la Princesa Nerea aquí intentando escapar.

Nerea: Eso no es cierto, ni siquiera tengo fuerzas para lograr algo así ¿Por qué lo intentaría?

Zuko: Sueltenla y déjenos solos.

Los soldados obedecieron de inmediato mis órdenes y se fueron pero cuando soltaron a Nerea al parecer a ella le faltaron las fuerzas y se cayó al suelo.

Me apresuré a ayudarla para que no cayera completamente al piso y se golpeara. La sostuve y ahora ambos estábamos de rodillas en el piso así que le pregunté.

Zuko: ¿Estás bien? ¿Qué haces levantada, creí que seguías inconsciente?

Nerea: Para ser sincera no lo sé… acabo de despertar y solo quise tomar un poco de aire frío y fresco, pero en cuanto los soldados me vieron me dijeron que debería estar descansando y como no les hice caso comenzaron a seguirme.

Zuko: Lo lamento mucho, no debieron hacer eso… y ¿Cómo te sientes?

Nerea: Bien… ¿Cuánto falta para llegar a la Tribu Agua del Norte?