A pesar de llevar el mismo apellido, no era para nada parecida a su familia.
Alnitak Black conocerá a esa parte de la familia, que despreciaron a su abuelo por nacer diferente, cuando ella entre a Hogwarts, pero no todos ellos son despreciables, en...
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Aquellos primero cuatro meses que pasaron fueron realmente entretenidos para la pelirroja.
Pará empezar, su amistad con Marlene y Dorcas se hizo más grande, aunque no convivían mucho con la morena por estar en diferente casa, también con Lily, las cuatro en la primera semana ya eran grandes amigas, también comenzaron hablarle a Alice Avery, su compañera de cuarto, aunque está prefería estar sola la mayor parte del tiempo.
Alnitak también se dio su tiempo de conocer a Sirius, sabiendo un poco más de su vida y del resto de los Black, la joven pelirroja también le contó sobre su familia, notando la enorme diferencia de ambas familias. Conoció más a James, notando que, al igual que ella, tenía mucha facilidad para relacionarse con los demás, gracias a que no se quedaba callado, era algo presumido pero amable, siempre y cuando no molestara al amigo de Lily, quien le resultó la persona más misteriosa y amargada para su edad.
Al día siguiente de que llegaron, se acercó al mismo castaño de las extrañas cicatrices en el rostro, y a otro castaño que parecía algo temeroso: Remus Lupin y Peter Pettigrew eran sus nombres. A la semana este par se habían convertido en amigos de James y Sirius, al igual que de Alnitak, Marlene y Lily, aunque esta última prefería mantener distancia con el azabache y el pelinegro.
En esos cuatro meses también había notado la extraña actitud que Remus tenía y las desapariciones de este, aunque siempre decía lo mismo: di madre estaba enferma y necesitaba ir con ella. Ninguno le dio gran importancia, pues es algo que ellos también harían si sus madres estuvieran enfermas.
Sus clases eran entretenidas, a excepción de Historia de la magia, donde sólo duraba como máximo cinco minutos antes de perderse en sus pensamientos o simplemente dormirse como la mayoría lo hacía. Con la profesora Mcgonagall, a pesar de ser estricta y no bromear con sus alumnos, sus clases se iban rápido y entretenidas, la vieja bruja se dio cuenta de lo pésima que era Alnitak y lo excelente que era Sirius en las transformaciones. Slughorn lo noto también, pero de diferente manera, noto que la chica Black era muy buena en pociones al igual que su primo, pero que James y Marlene no lo eran tanto.
Todo era de maravilla... o bueno, casi todo, porque si quitaba el hecho de que tenían que subir cientos de escalones o recorrer kilómetros para llegar a cualquier salón y también el hecho de que tenía constantes encuentros con Bellatrix o con Narcissa quienes querían saber mucho más de ella, dándoles casi un infarto cuando la pelirroja les dijo que no era sangre pura y si quitaba también el hecho de las malas miradas que recibía de los demás miembros de la casa de las serpientes, si quitaba todo eso, esos cuatro meses fueron de maravilla.
Ahora estaban a una semana de regresar a sus casa para las vacaciones de navidad. Lily se despidió de Marlene y Alnitak para irse con Severus, quien sólo miró a ambas Gryffindor desde lejos, sin saludarlas a pesar de que la pelirroja de ojos verdes le saludo con la mano, aún tenía la esperanza de ser su amiga, pero sería más fácil que lloviera chocolate a que eso pasara.
