Capítulo 56: Celos

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Joseph:

Después de quedarse dormida entre mis brazos y donde yo acariciaba su cabello. Me quede ahí sin moverme. Ella me necesitaba y yo no me alejaría.

La lluvia aún cae afuera de la casa por lo que no me voy a ir. Poco tiempo después también me quedo dormido a su lado.

(...)

Cuando despierto es media madrugada, Andrea aún descansa entre mis brazos y sonrío. La puerta de su habitación está entre abierta. La dejo acostada para salir al pasillo y me encuentro con sus padres.

— Jey –saludó su padre—. No quisimos despertarte mientras dormías.

— ¿Ani está bien? —Me preguntó su madre.

— Estará mejor —Le dije antes de seguir avanzando por el pasillo hasta quedar frente a ellos—. Sólo tiene que descansar.

— ¿No prefieres quedarte aquí? —insistió su madre al verme con intenciones de irme.

— Hay una habitación de invitados al otro lado del pasillo —Me indicó su padre y acepté.

Me dirigí hacia esa habitación para dormir ahí por esa noche.

(...)

Cuando me despierto, abro los ojos y voy camino hacia el baño del fondo. Salgo de allí y me encuentro con Ani que me mira con los ojos entrecerrados y luego la cara va a sorpresa.

— ¿Dormiste aquí? —preguntó acercándose y agarrándome por el brazo.

— Si —dije sonriendo en burla.

— ¿Cómo se te ocurre? —Me jala del cabello—. Mis padres no nos pueden ver juntos —dice entre dientes y en a penas en un susurro.

— Nos vieron querida Ani —cerró sus ojos con fuerza y casi me dio un ataque de risa cuando se comenzó a mover nerviosa de un lado para otro.

— ¿Qué? —tartamudeó—. ¿Qué les dijiste? —Me preguntó con los ojos muy abiertos y con un tic nervioso en la mano.

— Nada —respondí tan normal como pude—. Ya sabes, lo de siempre, que nos besamos y que una cosa llevo a la otra y terminamos en la cama —Tanta tranquilidad en mi voz que hasta a mí me asombró poder mentir tan bien.

— Pero tú estás loco —Sus manos están en mi hombro agitándome.

No pude aguantar las ganas de reír a carcajadas y ella me miró esperando una explicación.

— No me hace gracia, idiota —dice cruzándose de brazos.

— Tendrías que ver tu cara —Me reí demasiado fuerte.

Golpeó la parte trasera de mi cabeza y siguió su camino pasando por mi lado.

— Me pagarás esta Jey —Me saca su dedo corazón y bajamos al salón donde sus padres están desayunando.

(...)

Salimos juntos de nuestras casa para ir al instituto. Pero esta aún molesta por la broma de esta mañana, por lo que no me habla y a penas llegamos a la puerta ella corre dejándome atrás.

— ¡Adiós se dice! —Le grito pero ella me ignora completamente.

— ¿Qué le hiciste ahora? —Me pregunta Leroy uniéndose a mí junto a Anthony.

— Sólo bromee con sus padres, se lo tomó personal —Y comienzo a reírme sólo al recordar su rostro de esta mañana.

Todo el día Ani se la pasó evitándome, pero aún podía reírme, por lo que la dejé bastante tiempo sola.

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