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VALERIA:

Conocer a YoonGi de pura casualidad en el aeropuerto, que él mantuviera esa actitud estoica conmigo. Me hizo calmar la fan que llevaba dentro.


De todas formas, charlamos mucho respecto a mi trabajo. Quería saber todo.

Soo nos dejó en el hotel y nos indicó que mañana pasarían por nosotras para conocer al resto de la banda, los demás artistas de la empresa y las instalaciones de la empresa. Cosa que nos emocionaba tremendamente porque no solo conoceríamos las instalaciones sino a los demás miembros y artistas exclusivos. Esto me tenía con las emociones a nivel mil.

-Te vi muy charlatana con Yoon Gi... - me dijo mi amiga mientras nos decidíamos que habitación usaría cada una. -Parece que le caíste bien...

-Pues yo sentí todo lo contrario.

-Te imaginas...

-No. Lo peor que le puede pasar a una fan es que su Bias la odie... Y yo sentí eso.

-Deja de exagerar. Él no te odia. Tengo ojos y no dejaba de mirarte.

-Deja de decir idioteces.

-Cuando vayas camino al altar y él este esperándote no me dirás lo mismo.

-Deja de imaginar Sabrina.

Ella tecleo algo en su teléfono y supuse que le debería estar avisando a las chicas que estábamos bien y ya instaladas en el hotel. Mientras yo recorría la habitación que era inmensamente grande y moderna.

- ¿Estas bien? -Sabri aprecio a mi lado admirando la bella vista de la ciudad que nos brindaba nuestro departamento.

-Si. Solo estoy admirando la vista.

- Estamos en una zona muy exclusiva por lo que se ve... Las chicas te mandan saludos.

Suspire. -Si. Solo pienso en el giro que tomo mi vida este último mes. Y si tienes razón es una zona bastante pipí cucú. ¿Qué tal están?

Ella me miró confundida. -Las chicas, ¿ya estaban llorando?

Soltó un risita. - Caro sí, pero las demás estaban felices.

-Eso es lo mejor del mundo. ¿Elegiste habitación?

La suite en la que estábamos tenía dos habitaciones y una sala común.

Ella me miró sonriente. -Pues cada una tiene nombre y apellido de cada una de nosotras, así que alguien ya se encargó de elegirlas y ahorrarnos el trabajo de pelear por ellas como dos puertas inmaduras.

Negué con la cabeza. Camine en dirección a las habitaciones y efectivamente las puertas tenían nuestros nombres, baje el picaporte y me encontré con una habitación completamente rosada y repleta de peluches de RJ, sobre la cama.

-Al parecer en esta empresa tratan bien a sus empleados. La mía tiene colores neutros y peluches de todos los peluches de la banda.

Mi teléfono vibró. Deje todo lo que estaba haciendo para ver de qué se trataba. Mi corazón casi explotó al ver el usuario de Instagram. Había respondido a mi historia. La que subí junto a la vista de la habitación.

Agustd:

Activo ahora.

¡Bienvenida a Seúl! (ARMY encubierta)

Las lágrimas comenzaron a salir sin que las pudiera controlar. Sabri me miro con preocupación.

- ¿Es el idiota?

Negue con la cabeza y le extendí el celular. Porque no podía hablar de la emoción.

-Te contestó la historia... Yo te dije.

Bullett proof Donde viven las historias. Descúbrelo ahora