~Monkie Kid~ 1️⃣

Otra Dimensión

Alguien me pidio que Monkie King y su alumno se encontraran con versiones femeninas de ellos mismo, así que esto fue lo que salió

Espero que les guste~

Nota: Conservare ciertos nombre, como el mismo Sun Wukong ("Sun" hace alusión a su origen como mono, y "Wukong" significa "consciente del vacío", según internet) y a MK (porque "Kid", en ingles, se usa tanto para niños como niñas)

Nota-2: Monkie Queen y MK (la versión chica) tendrán esta letra para diferenciarlos

Nota-3: Si tiene alguna idea, no dude en dejarla ^_^

Petición de: LaSpiderPoetta

Fue un día normal y pronto, MK estaba corriendo para empezar su entrenamiento con su maestro, agradecido mentalmente de tener que ir al "Templo de la Vergüenza" que estaba más cerca de la ciudad. Se saludaron y justo cuando se movió para sacar su bastón, sintió algo redondo y diferente en su bolsillo, sacándolo para ver que era.

-¿Listo, Kid?- Wukong se acerco, notando la confusión en el rostro de su estudiante. -¿Que pasa?- pregunto, parándose a su lado con curiosidad.

-Encontré esto en mi bolsillo- mostro lo que parecía ser una pequeña esfera transparente, con algo parecido a polvo en su interior, colorido y brillante, con una cuerda fina a su alrededor y amarrado a un anota que colgaba. El chico sujeto el papel entre dos de sus dedos, dispuesto a leer la elegante letra que este tenia. -"Buen viaje"- leyó, enarcando una ceja, confundido.

-¿"Buen viaje"?- Wukong murmuro, pensativo, sintiendo una extraña sensación de Deja-Vu. Se alarmo al notar como la pequeña esfera empezaba a brillar intensamente, eso no debía ser una buena señal. -¡MK!- fue rápido en tomar la pequeña esfera y dejarla caer, rodeando a su alumno con sus brazos y cubriéndolo lo mejor posible, cerrando los ojos y dándole la espalda a la esfera en el suelo justo cuando está explotó, cubriendo todo con un fuerte brillo. Wukong sintió un cambio, mientras que MK sentía repentinas náuseas. Se quedaron quietos por unos segundos y entonces, el mono decidió alzar la vista y ver a su alrededor, manteniendo un firme agarre en el menor. Parecían seguir en su templo pero algo en el ambiente se sentía diferente, casi extraño. -¿Estas bien, chico?- preguntó, mirando al menor al darse cuenta de que este se estaba apoyando en su hombro.

-Mareado...- murmuró, luchando contra las náuseas y el mareo. El mayor hizo una pequeña mueca y lo ayudó a sentarse lentamente en el suelo, MK abrazando sus piernas para apoyar su frente en sus rodillas y Wukong acariciando suavemente su espalda en modo de consuelo, mostrando una pequeña sonrisa. Le había pasado lo mismo la primera vez.

-Eso pasa en los viajes dimensionales, corazón- el dios fue rápido en alzar la vista, viendo a quien había hablado y relajándose apenas. Había alguien sentado cómodamente en las escaleras, un demonio con apariencia de mono de pelaje castaño y claro, un poco corto y revuelto, ojos brillantes y dorados que los miraban con diversión, vistiendo como él pero de una manera que resaltaba sus curvas, con rasgos finos y una gran sonrisa. Se levanto con tranquilidad, había una elegancia en sus pasos, su cola moviéndose lentamente mientras se acercaba a ellos. -Un placer conocerte, otro yo~-

-Igualmente~- sonrió, no era la primera vez que iba a otra dimensión y se encontraba con otra versión pero sí era la primera vez que veía a una versión de él en mujer. Era extraño pero no en un mal sentido. -Supongo que estamos en tu mundo-

-¡Exacto!- asintió ella rápidamente.

-Bueno, lamento la invasión pero realmente no planeamos una visita a otra dimensión, fue...algo repentino- hizo un gesto con las manos, formando un pequeño circulo que su estudiante no vio, explicando sin palabras la pequeña bomba circular que los había mandado allí. Eran diferentes versiones de una misma persona, así que ella pareció entender rápidamente, haciendo una pequeña mueca.

-Nha, no te preocupes. Su visita acaba de hacer mi día aburrido más interesante- se apresuro a sonreír, luciendo despreocupada, aunque ambos estaban algo preocupados por la pequeña bomba. Debían investigar un poco eso. -Así que...¡Bienvenidos! Mi hogar es parecido a su hogar...literalmente- rio ligeramente ante sus propias palabras y entonces, sus ojos se fijaron en el menor, quien parecía haberse recuperado y se estaba levantando, arreglando su campera. -¡Ho, por todos mis duraznos!- esquivo a Wukong hábilmente, quien solo pudo parpadear y voltearse, sin querer perderla de vista. -¡Tienes un MK!- chillo con obvio entusiasmo, enganchando sus manos bajo los brazos ajenos para levantar al chico, quien parecía confundido y perdido pero no molesto. El mono miro la interacción con algo de curiosidad, viendo la emoción obvia en el rostro de su versión femenina.

-Hola~- decidió sonreír, sin saber que hacer exactamente pero queriendo ser educado.

-¡Eres adorable~!- lo abrazo, sin dejar que los pies ajenos tocarán el suelo, MK correspondiendo el gesto con entusiasmo, siempre le gustaban los abrazos.

-¿Un MK?- el mono enarco una ceja, divertido ante la expresión.

-Mi sucesora se apoda MK, diminutivo de "Monkie Kid"...- sonrío ella, bajando al chico para mirarlo a la cara. -...y apuesto a que tu también, ¿no es así dulzura?- el chico sonrío y asintió rápidamente, riendo cuando ella le apretó suavemente las mejillas. -¡Lo sabía~!- movió su cola con alegría, soltándolo solo para abrazar al chico nuevamente.

-¿Como te llamas?- pregunto MK con curiosidad. Su "yo" de ese mundo parecía usar el mismo apodo que él, así que tenía curiosidad por el nombre de la diosa que parecía negarse a soltarlo.

-¡Soy Sun Wukong, la gran y fantástica Monkie Queen!- se presento, soltando al chico solo para acercarse unos pasos hacia su contraparte masculina.

-Entonces Queen...- sonrío él, cruzándose brazos. -...no sabrás como devolvernos a nuestra dimensión, ¿no?- pregunto. Volver era importante, en especial si el chico estaba con él, ya podía escuchar los gritos y sentir los golpes que iba a recibir de parte de Pigsy si el chico estaba desaparecido mucho tiempo.

-Tengo un par de contactos que estoy segura que nos ayudaran...- asintió, pensativa, ya repasando la lista de demonios que conocía. Alguno de ellos debía tener respuestas. -...pero antes de eso...- silbo, llamando a su nube, la cual fue rápida en acercarse. -...¡tienes que conocer a mi MK!- tomo las manos del menor, caminando hacia la nube. -¡Tu y ella se llevaran genial, estoy segura de ello!-

-¿Podemos?- MK miro a su maestro con ojos brillantes de emoción, esperando una respuesta.

-Claro, Kid- sonrío, acercándose para rodear los hombros ajenos con su brazos, contento y algo divertido ante la emoción del menor.

-¡Ho si!- Queen chillo, arrastrándolos a ambos hacia su nube, empezando a volar mucho antes de que cualquiera pudiera acomodarse. Wukong teniendo que abrazar a su estudiante para que este no saliera volando por la velocidad y por el repentino movimiento. Otro día, otra locura.