~Monkie Kid~ 1️⃣

Niñero

Vi una imagen en Twitter y no pude evitarlo xD

Espero que les guste~

Nota: MK, Macaque, Nezha y Red Son fueron convertidos en niños :3

-¡Deja de morderme!- grito Wukong, sintiendo unos pequeños y afilados dientes mordiendo con fuerza una de sus orejas, tropezando, soltando lo que tenía entre sus manos para agarrar lo que lo estaba mordiendo. -¡Suéltame!- se quejo, logrando ser libre después de unos cuantos tirones insistentes, viendo con el ceño fruncido al responsable. -Eres malo, Macaque- el pequeño mono de pelaje negro y marca rojiza en su rostro le siseo como si fuera un gato, mostrando los colmillos y con las seis orejas bien extendidas. 

-Púdrete- gruño.

-Eres un mono, no un gato- bufo, solo recibiendo otro siseo como respuesta. Rodo los ojos, los cuales abrió con alarma al ver otro problema. -¡MK, no!- soltó al mono para lanzarse sobre su sucesor, alzándolo y sacándole el bastón mágico antes de causar más destrozos.

-Es mío...- el niño hizo un puchero.

-Lo sé pero por el momento, será mío- hizo un gesto algo exagerado, encogiendo el bastón y escondiéndolo de la vista ajena, el menor viéndolo como un truco de magia y riendo alegremente ante eso. El mono suspiro de alivio, dejando suavemente a su sucesor en el sillón más cercano, sintiendo un fuerte y repentino olor a quemado. Se volteo, alarmado al ver el fuego que consumía rápidamente una cortina y gran parte de una alfombra. -¡Red Son, deja de prender fuego todo!-se fue, volviendo rápidamente con un balde lleno de agua, tirándolo encima del pequeño incendio y del causante de eso.

-¡Pagaras por eso!- chillo el pelirrojo, su cabello volviéndose llamas por su enojo.

-Si, si, si...- bufo, tirando lo poco de agua que quedaba en el balde para apagar el cabello ajeno, dejando el balde de lado y alzando la vista, erizándose. -¡Nezha, bájate en este mismo instante!- ordeno al ver al mencionado pegado al techo, flotando gracias a aquellos anillos extraños bajo sus zapatos.

-¡No puedes obligarme!- le saco la lengua, riendo ligeramente, obviamente divertido.

-Estoy tan casando...- murmuro para si mismo, bajando la vista al sentir un pequeño y suave tirón, encontrándose con su sucesor, quien lo veía con ojos brillantes.

-¡Monkie King!- tropecé un poco con su titulo pero aun estaba sonriendo y Wukong lo adoraba, así se arrodillo para prestarle atención, atento al desastre que los otros aun causaban. -¿Quieres ver un truco de magia?- pregunto, luciendo emocionado por mostrarle algo.

-¿Un truco de magia?- enarco una ceja ante eso, curioso. -Claro Kid, muéstrame- sonrío al ver al menor saltando emocionado por la respuesta afirmativa.

-Buen, bien, bien...- retrocedió un par de pasos, dando pequeños saltos en su lugar. -Mi palabra mágica es...- sonrío enormemente. -...¡monito!- alzo las manos.

-¿Mo...?- sus palabras murieron al ver una sombra dibujándose justo bajo los pies del niño, quien se hundió en la oscuridad con una carcajada. -¡No!- se lanzo para intentar agarrarlo pero la sombra ya había desaparecido, llevándose al menor a quien sabe donde. -¡Macaque!- se volteo a ver al pequeño mono, quien solo mostro una sonrisa socarrona mientras movía lentamente su cola.

-Adiós tonto~- y se hundió en una sombra antes de que le dios pudiera reaccionar.

-¡NO!- gruño, haciendo una mueca de pánico. Dos de cuatro, solo tenía que ir a buscar al par que se había escapado antes de que alguien pudiera verlos y todo estaría bien, perfectamente bien. Muy bien, muy bien, solo debía respirar profundo, dejar a unos cuantos clones para cuidar a los dos niños que aun tenían y lanzarse a la ciudad para buscar a esos dos niños. Sip, era un gran plan, sencillo y rápido. Se sobresalto cuando un fuerte golpe resonó, volteándose para ver que la puerta principal estaba abierta, Nezha siendo el primero en salir volando de allí y Red no tardo mucho en seguirlo, impulsándose con sus llamas y saliendo disparado con una risa malévola digno de un villano de caricatura. Un largo gemido salió de la boca del dios, golpeando su frente contra el suelo, algo desesperado. Eso era malo, eso era muy malo. Salió corriendo, haciendo aparecer su nube y acelerando todo lo posible hacia la ciudad.